• Cambios en el aspecto y funcionamiento del foro. Ver detalles

“MI REGRESO A ÁFRICA ES EL REGRESO AL PARAISO” Viaje a África de Michael en 1992

En este libro publicado en 2010 por el escritor Gonzague Saint Bris, “En el Paraíso con Michael Jackson”, cuenta sus impresiones sobre Michael Jackson tras acompañarle en su viaje por África descubriendo una faceta totalmente desconocida del artista: su gran erudición, su amor por la lectura, por el arte y la historia.

He extraído algunos de los pasajes más destacados de la primera parte del libro, dedicada a su viaje a África, que muestran dicha faceta a través de las conversaciones de ambos.
Como es bastante largo lo pondré en 4 partes y a lo largo de las próximas semanas, para no aburrir con tanta lectura. :eek:


2ª PARTE

3ª PARTE

4ª PARTE

EL ENANO AZUL


BIENVENIDO A CASA, MICHAEL

Cuando estabas en la Tierra ya soñabas con el Edén y el retorno al Paraíso.

Me pediste que te acompañara. Al África de tus raíces.

Un día mientras nos adentrábamos en el bosque gabonés, me dijiste: “No juzgues a una persona hasta que no hayas caminado dos lunas dentro de sus zapatos.” Era un viejo proverbio indio… Cuando pronunciaste estas palabras, desde el negro carbón de tus ojos, comprendí que era un mensaje.

Ahora que estás en el Paraíso, me toca a mí hacer un recorrido sobre tu eterno retorno.

Para mí, tú nunca fuiste mortal.

Lo bueno que tiene la lengua inglesa es que podía tutearte y hablarte de usted al mismo tiempo.

A veces eras como un fantasma, estabas allí y sin embargo parecías ausente. Otras veces estabas lejos y ese era tu modo de acercarte.

Como los príncipes de ese mundo a quienes se les ha dado el nombre de iconos, fuiste encantador durante tu paso por el tapiz rodante del tiempo. Avanzabas permaneciendo inmóvil, progresabas sin moverte realmente, te detenías retrocediendo, marcaste la distancia con el presente en una práctica rítmica del canto de los orígenes.

En realidad no tenías un futuro porque lo que te esperaba era mejor. Fuiste atraído por la eternidad, esperado por la perpetuidad.

Siendo un futuro inmortal, estabas, quizás sin saberlo, en ese gran trabajo de preparación, en la extenuante tarea, en la titánica obra, en el largo camino que precede a la resurrección.

Gonzague Saint Bris



REGRESO A ÁFRICA

Un hombre sin cultura es como una cebra sin rayas.”

Proverbio africano citado por Michael Jackson.



En el cadillac color cacao que nos lleva desde el aeropuerto hasta Libreville seguido por una multitud desenfrenada, Michael me ha dicho:

“MI REGRESO A ÁFRICA ES EL REGRESO AL PARAISO”

En el momento en que el avión de Michael Jackson, un Boeing 707 procedente de Los Ángeles, aterriza en Libreville sobre la pista del aeropuerto Léon-Mba, sobre el suelo del ecuador, a dos pasos del océano Atlántico, África acaba de recibir la espuma de un nuevo duelo. El océano ha esparcido la noticia por las playas. El escritor afroamericano Alex Haley, premio Pulitzer, ha muerto. Fue el autor legendario de esa obra maestra que es además un best-seller, Raices, la gran saga del retorno a las raíces en África. Es como un signo y la transmisión de un testigo. La llegada a Gabón del cantante más grande de los tiempos modernos al reencuentro del continente de sus ancestros se asemeja a un inmenso símbolo. Por otra parte, el que arrastra tras de sí decenas de millones de admiradores, más que todas las estrellas de todos los siglos, anuncia el color, y es el negro: “Mi regreso a África, es el regreso al paraíso.”

En el aparcamiento del aeropuerto la acogida es delirante. Subido sobre el Cadillac color cacao que nos saca del aeropuerto, Michael irradia una alegría sin igual. Una multitud negra persigue su limusina presa de asalto por una multitud de adolescentes a lo largo del boulevard al borde del mar. Miles de críos corren detrás de la limusina de Michael Jackson quien, de pie, con una camisa con la figura de Mickey en la espalda, agradece a unos y otros con una sonrisa irresistible. Ahora, el vagón-salón de la megaestrella se dirige hacia la capital y la multitud abigarrada pone ritmo a su gloriosa aparición con un bramido de amor.

Los festejos con su África reencontrada no han hecho más que empezar. Jamás, desde la llegada de Nelson Mandela, un invitado había reunido tal multitud ni levantado tal fervor. La visita está organizada como la de un Jefe de Estado: Reuniones de generales, seguridad máxima, acreditaciones de personas destacadas y del séquito, recepciones en el Palacio Presidencial de Omar Bongo, en el Salón de Embajadores decorado en maderas claras y preciosas, techos de campana y marquetería y marroquinería.



Pero antes de los encuentros oficiales, Michael, que ha venido con uno de sus pequeños primos, Brett, ha querido tener un encuentro con ese grupo de niños en el Okoumé Palace, donde se instala con su séquito, es una merienda con mil niños organizada por él. Y en el salón de fiestas, el ídolo que encarna la música y la danza negras desde Cab Calloway a James Brown, va a descubrir la excitación local y las danzas étnicas. Una joven de 13 años, de nariz egipcia, ojos elevados y almendrados como los de aquellos nubios, de cadera estrecha y piernas interminables, se contonea delante de él. Y después de este ejercicio de seducción, toda orgullosa, viene a susurrarme al oído: “Le he tocado.”


*******



…¿No tendrás otra historia de Leonardo que contarme durante la cena? Me pidió amablemente Michael.

Enseguida pensé en aquella de La Cena. El modo en que había sido pintado este famoso fresco no podía más que excitar su imaginación porque ponía en evidencia las preocupaciones que podían ser más personales: La metamorfosis y la identidad.

-Me gustaría contarte la extraordinaria historia de una obra mayor de Leonardo da Vinci, el famoso fresco de La Cena en el Monasterio de Santa María de las Gracias en Milán. Este fresco representa una escena inmensamente conocida: Cristo a la mesa con sus Apóstoles. Son trece en la mesa pero hay un traidor allí entre ellos, Judas. Fue Ludovico Sforza, conocido como El Moro, duque de Milán, quien ha pedido a Leonardo da Vinci que pintara la última cena sobre los muros del refectorio de Santa María de las Gracias. Leonardo comenzó a trabajar pero, como siempre, fue distraído por sus otros trabajos. Ni siquiera aparecía por la obra. Finalmente es convocado por su mecenas, avisado de sus ausencias.

Sforza le pregunta con furia: “¿Dónde estabas?

-Mirad Majestad, necesito encontrar un tipo suficientemente bello para ser el modelo de Cristo.”

Unas semanas después lo encuentra. Pero un año después todavía no ha terminado su obra. Seis meses han pasado y Ludovico Sforza le convoca, furioso. Le dice: “Te burlas de mí, todavía no has terminado, los monjes dicen que nunca vienes por la obra, el prior te ha denunciado”.

-Mirad señor, me falta lo más difícil… busco desde hace meses un tipo que tenga un aspecto sucio para hacer de Judas y, creo yo, no es fácil. Voy a los bajos fondos de la ciudad, a los albergues mal frecuentados, todas las noches estoy en los burdeles de Borgho para buscar a alguien que pueda representar a Judas. Y efectivamente, una noche Leonardo vio un tipo con el ojo torvo, la boca torcida, el aspecto retorcido, mala cara, “!el casting infernal!” Se aproxima a él y le dice: “Tú, ¿te gustaría posar para mí?” El otro le ha reconocido: “Ah sí, se quién eres, tu eres Leonardo. Pero primero qué haces tú en un lugar como este… y además, me pides posar, pero ¿para hacer qué?”

Leonardo le dice: “Es para hacer de Judas…pero te daré dinero.” El hombre hace un movimiento de retirada y de indignación al mismo tiempo. Palidece, el dolor se dibuja en su cara. “No, no, ¡eso no lo puedo hacer! ¡Tú no me puedes pedir a mí que encarne a Judas!” Pero ¿por qué? Pregunta Leonardo. La respuesta surge irrefutable: “!Porque es a mí a quien, hace un año y medio, me pediste posar para encarnar a Cristo!”

-¡Guauu! Exclama Michael.

Y entonces, él me propone hablar largamente de Miguel Ángel. Me deja estupefacto por su conocimiento del Renacimiento italiano, me da miles de detalles sobre las relaciones contrastadas y plenas de rivalidad entre Leonardo y Miguel Ángel. La velada proseguía y yo estaba cada vez más silencioso, epatado y sorprendido por esta repentina elocuencia provocada por su pasión por la escultura y la pintura.

-¿Cómo sabe usted todo eso? Le pregunté.

-Es por Diana, murmura con su suave voz.

-¿Pero quién es Diana?

-Diana Ross, ¡por supuesto!

-¡Ah, bueno! No sabía que ella tenía tal interés por la pintura.

Entonces veo iluminarse el rostro de Michael. Me dice:

-Es a ella a quien debo todo. Ella me ha iniciado al amor al arte. No solo me ha hecho comprender mejor a los maestros del Renacimiento, sino que me ha revelado los misterios de la pintura de Poussin y me ha enseñado los rasgos característicos de Degas.

¡Qué paradoja que este ciudadano del mundo me haya invitado al corazón de África para discutir sobre los maestros de la cultura europea!



Continuará...
 
Última edición por un moderador:
Ohhhhhh....Blues ! Este libro siempre me ha parecido uno de los más amorosos escrito sobre Michael.
Te agradezco infinitamente que nos lo puedas ir trayendo.:*)

Y Michael.....qué decir...ya no tengo palabras. :eek:

Con Diana :


4ed12463fe1a.jpg
 
Gracias Blues!!!

Valió la pena esperar tanto, me encantó!!!!

Mabel, me fascina esa foto, cada vez que la veo me gusta más y cuántas que transmite o que uno se puede imaginar a partir de verla.
 
Gracias Blues, tu siempre con muy buenas aportaciones al foro, este libro ya lo habia buscado yo en internet, pero solo lo encontre en frances, gracias por tomarte la molestia de traducir.
 
Me encanta Blues!! La introducción del comienzo es tan bonita…, y esa charla del escritor con Michael hablando de arte, conversar con él, escucharle hablar de algo que le apasionaba tanto… y de lo que además tenía tanto conocimiento… Todos los que compartieron momentos así con él son muy afortunados.

Muchísimas gracias Blues!!
 
muchisimas GRACIAS!!! esto quería leer hace tanto tiempo!
Curioso lo de que esta en África y preguntando sobre el renacimiento, pero desde la curiosidad e interés es donde uno aprende, a mi también me ha sorprendido la historia que le contó. Esperare a las otras de este lugar que Michael amaba tanto :*)
 
Various-Michael-visits-Africa-michael-jackson-7512899-772-511.jpg

Gracias Bues, me habían hablado muy bien de este libro.
Estoy deseando leer lo que nos pongas. Te seguiré.
Yo he leído bastante sobre Michael en África, donde además, fue coronado oficialmente Rey de Sani, por las autoridades del lugar. Es muy bonito todo lo que vivió Michael allí y por lo que veo, el libro lo cuenta de una forma preciosa.

De nuevo te doy las gracias, Blues, por tu buen trabajo.

Besos
 
Este libro relata su viaje a Africa pero a mí me lleva a París :eek: Porque sabes sobre todo a lo que me recuerda este libro? Al momento en que lo compraste cuando estuvimos allí. Y eso es como abrir una caja de pandora donde me vienen otros muchos recuerdos de esos días, de cómo íbamos encontrando a Michael a cada paso, de cómo pisábamos los mismos sitios que él, cómo llevamos su voz hasta casi las nubes, de cómo -por sorpresa y de forma inolvidable- sentimos que nos miraba desde aquella estatua vestida con su chaqueta (y que sigo pensando que tendríamos que habernos traído debajo del brazo :jajaja:)

Pero independientemente de lo que me recuerde solo con ver la portada, es un buen documento que muy pocos pueden tener a su alcance o entender, con lo que gracias por hacérselo llegar a todos :)

Compañera de aventuras... :ven:
 

liznieves

Michael Jackson's rules
Gracias Blues!!!!
que hermoso el viaje que hizo MJ a este lugar maravilloso!!
y que se la haya pasado tan bien..
siempre espero leer algo tuyo!!
que estes muy bien
 
¡¡Vaya libro más interesante Blues, gracias por traérnoslo!!

Es increíble la cultura que tenía Michael, yo me pregunto de dónde sacaba el tiempo para aprender tantas cosas.... es la persona más trabajadora que he visto en mi vida, es que no paraba. Hay tantas facetas de él que son muy poco conocidas, ¡¡qué suerte han tenido los que han podido estar cerca de él o charlar con él alguna vez!!


 

liznieves

Michael Jackson's rules
Blues o alguien!!
tengo dos dudas!
primera:
en que mes fue este viaje?..

y segundo quien es el niño que lo acompaña?
me encontre un video de este viaje a africa y sale un niño con gorra, puedes identificarlo?

te dejo el enlace, se ve del minuto .06 al .12

http://www.youtube.com/watch?v=Jokmv9zVPEM&feature=player_embedded#!


la cantidad impresionante de personas que lo saludan! del 1:46 al 1:53!! maravilloso!!!

por cierto todas las fotos y segmentos del viaje (aqui y en el video) se ven increibles! se le ve muy contento :)
 
Última edición:
Various-Michael-visits-Africa-michael-jackson-7512899-772-511.jpg

Gracias Bues, me habían hablado muy bien de este libro.
Estoy deseando leer lo que nos pongas. Te seguiré.
Yo he leído bastante sobre Michael en África, donde además, fue coronado oficialmente Rey de Sani, por las autoridades del lugar. Es muy bonito todo lo que vivió Michael allí y por lo que veo, el libro lo cuenta de una forma preciosa.

De nuevo te doy las gracias, Blues, por tu buen trabajo.

Besos

Anneke eres lo máximo ke lindas fotos
 
Gracias a todos por vuestro interés en este libro. Puede que no sea tan fácil de leer como otros sobre Michael, pero precisamente porque se sale un poco de los temas habituales que se suelen escribir sobre él, es por lo que me parece interesante.

Y gracias también por aclarar las dudas, Dulce, y por los vídeos y fotos que ponéis. :)


2ª PARTE:

...¡Qué paradoja que este ciudadano del mundo me haya invitado al corazón de África para discutir sobre los maestros de la cultura europea!

Lo hizo en Libreville, la capital de Gabón, donde la historia misma era una lección. Esta ciudad fue fundada por esclavos liberados por los franceses de un barco con destino a Brasil, éstos últimos les ofrecieron un terreno donde pudieron construir una ciudad que se convirtió en la capital.

Aunque la noche había caído, Michael quería aún debatir sobre lo que era visiblemente su tema preferido: El Renacimiento y el duelo Vinci-Miguel Ángel.

-¿Sabías que Miguel Ángel fue un niño prematuro? Me preguntó Michael.

- No, no lo sabía, lo ignoraba.

-La víspera de su nacimiento, su madre estaba todavía de viaje y la montura de la señora Buonarroti se cayó arrastrando con ella a su caballo… al día siguiente, a las ocho de la tarde, dio a luz prematuramente a un hijo de nombre Michelangelo. A final de mes el niño fue confiado a una nodriza de Florencia, hija y esposa de picapedreros… Toda su vida pensaría Miguel Ángel que su amor por la piedra y su don prodigioso para la escultura en el origen de su inmensa carrera han surgido por pasar su infancia al lado de tallistas de piedras.

Gracias a Michael he conocido, a propósito del duelo pictórico entre Miguel Ángel y Leonardo da Vinci –cuando cada artista había recibido la orden del gonfaloniero de Florencia, (magistrado civil en las ciudades medievales), de pintar en la sala del Gran Consejo: A la derecha el de Da Vinci, la batalla de Anghiari; a la izquierda el de Miguel Ángel, la batalla de Cascina-, que no fueron solo los dos grandes artistas quienes emprendieron un combate singular, sino que fue toda la ciudad quien entró en combate. Pronto la ciudad entera fue comprometida en una parte o en la otra –de un lado los angelistas y del otro los vincistas-, listos para el enfrentamiento, en una disputa que no era otra cosa que estética.

-Pero lo más divertido, precisaba Michael, fue la historia de los dibujos robados. Mientras que los dos pintores trabajaban cada uno en su lado, preparando sus cartones y tomando todas las precauciones del más grande de los secretos para no ser espiados por su rival, los dibujos de Miguel Ángel desaparecieron… sin que jamás se haya sabido quién los había sustraído.

Y Michael añadiría riendo a carcajadas:

-¡Quizás la causa del robo está simplemente en la preservación de la moralidad pública! Parece que los señores de Florencia veían con muy mal ojo la exposición exagerada de soldados desnudos revelando sus partes íntimas.

Seducido por su conocimiento del artista que parecía cubrir todos los aspectos del personaje, interrogué a Michael sobre las relaciones de Miguel Ángel con el dinero.

-Sobre ese punto, era terrible. Él no dejaba de compadecerse de su soledad pero también de las penas y peligros por los cuales se sentía agobiado sin cesar, de todo lo que pretendía gastar para “ayudar a su casa”. ´´El aludía sin duda a la familia de hambrientos que vivían a sus expensas, llevando con firmeza operaciones comerciales e inmobiliarias. Como todo Toscano, Miguel Ángel estaba atormentado por el amor ancestral a la tierra y al dinero. Aun cuando no se convirtió nunca en un gran propietario terrateniente, quedó obsesionado por el deseo de lucro que le impulsó a aumentar la fortuna de los Buonarroti. Esta avidez desenfrenada se refleja en el consejo que él da a sus hermanos para negociar un bien: “Tened cuidado de no comprar a nadie por necesidad, para poder regatear.” ¡Es horrible! Se puede decir sin equivocarse que Miguel Ángel era duro en los negocios…

-¿Qué es lo que le ha sorprendido más de Miguel Ángel?

-De un lado, su increíble insensibilidad y consideración por los demás, esa feroz indiferencia que hace que no asista ni siquiera al entierro de su hermano, su única excusa puede ser que estuviera absorbido por su trabajo. De otro lado su prodigiosa energía, montaba a caballo todavía a la edad de 88 años, pareciendo un apuesto caballero de vuelta a su cuartel al ponerse el sol. En definitiva, que ha trabajado hasta el límite con el empeño de un joven en la obra titánica de San Pedro de Roma durante los diecisiete últimos años de su vida. Más interesante, el modo en que soluciona tras su propia muerte, de modo que resulte imposible, una modificación del conjunto arquitectónico que él ha creado. Él no quiere que ningún mediocre pueda atentar contra su obra, que ningún otro artista pueda cambiar a posteriori su visión de las cosas. Él quiere que su trabajo quede fijado definitivamente en el mármol de la inmortalidad. Más sorprendente aún (y aquí, mirando atentamente a Michael, yo adivinaba que él estaba hablando de aquello que le concernía a él también), ese rechazo de la autoridad, de los poderes temporales, cuando lo que quieren es entrometerse en sus orientaciones artísticas. Ahí, él es capaz de una violencia extraña, de una brutalidad increíble, incluso con el enviado del Papa. Me acuerdo de una carta de las más insolentes donde decía claramente en San Pedro que el trabajo de aquél era encontrar el dinero y ocuparse de la red de transportes, en tanto que todo lo que concernía a la creación y los planos de la obra, le correspondían a él solo.

Le dije a Michael:

En definitiva, él era como usted: una voz sin maestro.

*******

Nuestro juego proseguía, se extendía sobre todos los colores de la paleta de pintura. En mi turno de ponerle a prueba:

¿Sabe usted dónde está enterrado Miguel Ángel, su bien amado maestro?

Él esperó, pareciendo dudar, después respondió:

En Florencia, creo.

Sí, en la Basílica de La Santa Cruz.

...Se hacía tarde. Mientras se terminaba la cena, Michael me propondría quedarme para ver dibujos animados. Desgraciadamente, los videos que le han dado en la recepción estaban en francés y él educadamente, los ha rechazado. Entonces yo me despido. Dejando la suite de la octava planta, lo dejé abandonado a ese vicio impune, la lectura.

********

Todo era mágico en este encuentro: el lugar, los instantes, los temas de interés, los escenarios, los decorados. ¿A qué le debía yo el regalo de este viaje iniciático?

En verdad, nada me predisponía a encontrarme con la megaestrella. Michael era para mí como una estrella fugaz de quien había escuchado el sonido sedoso en las nubes y las canciones trepidantes en la tierra, igual que todos los habitantes del planeta. Como todo el mundo, yo estaba subyugado por su talento como bailarín, cuando pasaban en bucle Beat it y Billie Jean por la MTV. Fue el primer Negro en conquistar el inmaculado canal musical americano.

Él simplemente vio en la pantalla del televisor a alguien que hablaba de aquello que le interesaba en alto grado: las fuentes de la cultura, la civilización europea y más particularmente el arte, los castillos, los cuadros, las iglesias, la esencia misma de ese país por el cual, sin saber por qué, sentía tanto amor: Francia.

*******

El mundo entero proclamaba que Michael era un rey. No se sabía cómo llamarle. Se le llamaba “El Rey del Pop”, “El Emperador del Videoclip”. Pero si los medios pueden crear estrellas, nada como el pueblo para crear reyes.

Michael sería coronado también rey por África: En primer lugar entronizado en Costa de Marfil y seguidamente, durante su etapa en Abisinia, coronado rey en el territorio Sanwi.




*******

Michael Jackson en Gabón, es Peter Pan en África. Todo su periplo tendrá lugar bajo el signo de la comunicación y del encuentro, bien en el esmeralda de la selva o en el oro de la sabana. El ídolo es de una extrema sensibilidad. Su hermana La Toya lo declara: ”La vista de un niño africano mal alimentado en la televisión le sumerge en una crisis de lágrimas”. Y Michael no lo desmiente, sino todo lo contrario: “Si yo no hubiera decidido mirar al mundo con los ojos de un niño, estaría probablemente muerto desde hace tiempo… porque me sentiría demasiado mal”.

...Seis meses antes, el día de su aniversario, había dejado caer su mensaje: “Quiero vivir para ver un mundo sin guerras, sin hambre, sin sufrimientos. Y quiero ayudar a construir ese mundo. Cuanto más tiempo viva, más podré hacer el bien”. Cuando comienza esta gira sin conciertos en Gabón dentro de un retorno a sus raíces lleno de músicas mágicas, él tenía 33 años, la edad de Cristo.

...“La más bella de las vidas privadas está en el interior de uno mismo”. Así ha hablado bajo su sombrero negro, con sus gafas ahumadas, su camisa escarlata, sus pantalones oscuros, el que recorre el planeta con la tribu catódica y África en busca de sí mismo.

...En Franceville, delante del grupo Imperio de Djogo, se siente embargado con sobresaltos mientras está sentado en la tribuna oficial.

Entonces es cuando Michael se pone a hablarme de Degas, el pintor. La escena de danza a la cual acababa de asistir en Franceville, probablemente le había inspirado.

-¿Por qué me hablas del pintor Degas?

-Porque en sus telas él es el único que trata el universo de la danza con una verdad que no encuentro más que en su pintura. Incluso siendo sus temas elegantes, sus célebres bailarinas o sus jockeys antes de la carrera, no cede jamás a la cursilería. Su mirada es moderna, despoja la vida de artificios. Es lo que me gusta de las bailarinas de Degas, que las pinta durante el esfuerzo, sin adornarlas, con su sudor y su fealdad. Porque yo se que el baile mezcla fatiga y fervor. Comprendo cómo trabaja Degas, sobre todo cuando veo a sus bailarinas en la barra.

- Tú, cuando bailas, ¿sufres?

- Un espectáculo es como una maratón de dos horas: cada vez pierdo cinco kilos.

- Y la atmósfera alrededor, cuando el concierto termina, ¿cómo es?

-Hay chicas en el pasillo, en la escalera, escucho a la gente de seguridad que las hace salir del ascensor pero yo me quedo en calma en mi habitación y escribo una canción, y cuando tengo necesidad de hacer esto, hablo conmigo mismo, después exploto en el escenario: en eso consiste mi vida.

*******

Al día siguiente nos adentramos en la profundidad de la región de esta provincia, Woleu-Ntem, que es forestal en una región fangosa. Estoy conmovido por la elección de Michael: ha querido visitar una misión cristiana, la parroquia Saite-Therese d’Ango, fundada por los padres blancos en los años 1920. En esta iglesia, en ese colegio, en ese pequeño seminario de Sait-Kisito, todos los niños llevan flores y banderolas: “Bienvenido a Casa Michael”. Una vez que los gritos de entusiasmo de los pequeños son apaciguados, él les ha dicho: “He tenido la alegría de aceptar a Jesucristo en mi corazón como mi salvador personal y él me ha perdonado, ha aliviado mis sufrimientos, y ha cambiado mi vida. Pero mi mayor alegría fue cuando él me bautizó con el Espíritu Santo. Cuando he experimentado la luz de Dios en mi corazón y Le he alabado en otros idiomas, he sentido tal alegría que no existe gozo mayor ni igual. Y quiero decir simplemente al Señor que Le amo con todo mi corazón”.




Continuará...

 
Blues, gracias por todo ésto!!!

Es mágico leerlo, me transporta completamente.

No quiero que se termine. Entro, leo un poquito, salgo, hago alguna cosa y al rato vuelvo a leer otro poquito.

Si de por sí era especial estar con Michael y más aún charlar con él, este hombre tiene una capacidad excepcional para describirlo y transmitirlo.

Gracias!!!!!!!
 
La verdad, que cada frase que dice Michael, tienen una profundidad y una belleza que me dejan pensando tantas cosas sobre él, sobre la vida en general.

¡Qué precioso!!!
Cada día se lo extraña más.
 
Arriba