Clinton logra que cinco laboratorios rebajen el precio de sus fármacos contra el sida en los países pobres
MADRID. JOSÉ MARÍA FERNÁNDEZ-RÚA
Las gestiones del ex-presidente estadounidense Bill Clinton con cinco compañías farmacéuticas han sido cruciales para que se reduzcan considerablemente los precios de los medicamentos contra el virus del sida en los países subdesarrollados. Clinton, que preside una Fundación que lleva su nombre, logró también una reducción del 80 por ciento del precio de las pruebas diagnósticas para detectar la presencia del virus en el organismo. «Estoy encantado de haber alcanzado este acuerdo, que nos permitirá ayudar a cientos de miles de personas, que podrán vivir más y con una mayor calidad de vida», reconoció Bill Clinton.
El Foro Mundial contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria hizo público ayer esta bajada de precios, que fueron anunciados a finales de 2003 pero que ahora se harán efectivos en dieciséis países de América del Sur y del continente africano, los más castigados por la pandemia del sida que ya se ha cobrado la vida de veinticinco millones de personas. Los fármacos antirretrovirales que bajan sustancialmente su precio son formulaciones individuales de varias drogas que actúan en las enzimas transcriptasa inversa y proteasa del VIH, así como combinaciones de dos y tres de estos fármacos. Todos ellos cuentan con las garantías de la OMS en lo que se refiere a parámetros de calidad y eficacia.
Falta infraestructura sanitaria
Se trata de componentes fundamentales de los cuatro regímenes terapéuticos recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como de primera línea. Los laboratorios que participan en esta iniciativa son Aspen Pharmacare Holdings (Suráfrica); Cipla, Hetero Drugas Limited, Ranbaxy Laboratories y Matrix Laboratories (India). El precio acordado por estos medicamentos antirretrovirales es de 140 dólares por persona al año. Esta cifra es entre un tercio y la mitad de la fijada para estos fármacos genéricos en el resto del mundo.
Por lo que se refiere a las pruebas de diagnóstico, también contempladas en este acuerdo y que reducen su precio un 80 por ciento con respecto al que tienen en los países desarrollados, serán fabricadas por las empresas Beckman Coulter, Bayer Diagnostic y Roche. En una primera fase, los «kits» de diagnóstico estarán disponibles en esos dieciséis países americanos y africanos, cuyos gobiernos colaboran con la Fundación Clinton en el marco de un programa integrado de cuidados, terapia y prevención de la infección del VIH.
Una de las cuestiones que tendrán que abordarse de forma muy rápida por parte de Naciones Unidas, a través de Onusida, es el establecimiento de las redes básicas de medicina primaria en estos países, ya que una de las premisas fundamentales para detener la progresión del virus del sida en el organismo es seguir de forma continuada el tratamiento terapéutico. Por ello y según analistas internacionales, los gobiernos de estos países tienen ahora una labor fundamental, ya que deberán construir esas redes de atención primaria a los pacientes infectados y de conservación de estos fármacos, que son especialmente sensibles a las altas temperaturas. Igualmente, los médicos y enfermeras que tengan a su cargo la administración de estos medicamentos antirretrovirales tendrán que hacer un seguimiento periódico de los pacientes, con los recuentos obligados de carga viral y de linfocitos CD4, como se viene haciendo en los países desarrollados.
Cuarenta millones de infectados
La OMS estima que, actualmente, sobreviven con la infección del virus de la inmunodeficiencia humana cerca de cuarenta millones de personas, la mayor parte de ellas en África y Asia. Actualmente en África meridional uno de cada cinco adultos vive con el VIH o ha desarrollado la enfermedad. Si bien las tasas de infección varían ampliamente de un país a otro en África subsahariana -desde menos del 1 por ciento en Mauritania hasta casi el 39 por ciento en Botswana y Swazilandia- la amplitud de la pandemia pone de manifiesto que se ha afianzado en la mayor parte del continente negro.
Fuente: ABC
http://www.abc.es/abc/pg040407/prensa/noticias/Sociedad/Sociedad/200404/07/NAC-SOC-069.asp
MADRID. JOSÉ MARÍA FERNÁNDEZ-RÚA
Las gestiones del ex-presidente estadounidense Bill Clinton con cinco compañías farmacéuticas han sido cruciales para que se reduzcan considerablemente los precios de los medicamentos contra el virus del sida en los países subdesarrollados. Clinton, que preside una Fundación que lleva su nombre, logró también una reducción del 80 por ciento del precio de las pruebas diagnósticas para detectar la presencia del virus en el organismo. «Estoy encantado de haber alcanzado este acuerdo, que nos permitirá ayudar a cientos de miles de personas, que podrán vivir más y con una mayor calidad de vida», reconoció Bill Clinton.
El Foro Mundial contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria hizo público ayer esta bajada de precios, que fueron anunciados a finales de 2003 pero que ahora se harán efectivos en dieciséis países de América del Sur y del continente africano, los más castigados por la pandemia del sida que ya se ha cobrado la vida de veinticinco millones de personas. Los fármacos antirretrovirales que bajan sustancialmente su precio son formulaciones individuales de varias drogas que actúan en las enzimas transcriptasa inversa y proteasa del VIH, así como combinaciones de dos y tres de estos fármacos. Todos ellos cuentan con las garantías de la OMS en lo que se refiere a parámetros de calidad y eficacia.
Falta infraestructura sanitaria
Se trata de componentes fundamentales de los cuatro regímenes terapéuticos recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como de primera línea. Los laboratorios que participan en esta iniciativa son Aspen Pharmacare Holdings (Suráfrica); Cipla, Hetero Drugas Limited, Ranbaxy Laboratories y Matrix Laboratories (India). El precio acordado por estos medicamentos antirretrovirales es de 140 dólares por persona al año. Esta cifra es entre un tercio y la mitad de la fijada para estos fármacos genéricos en el resto del mundo.
Por lo que se refiere a las pruebas de diagnóstico, también contempladas en este acuerdo y que reducen su precio un 80 por ciento con respecto al que tienen en los países desarrollados, serán fabricadas por las empresas Beckman Coulter, Bayer Diagnostic y Roche. En una primera fase, los «kits» de diagnóstico estarán disponibles en esos dieciséis países americanos y africanos, cuyos gobiernos colaboran con la Fundación Clinton en el marco de un programa integrado de cuidados, terapia y prevención de la infección del VIH.
Una de las cuestiones que tendrán que abordarse de forma muy rápida por parte de Naciones Unidas, a través de Onusida, es el establecimiento de las redes básicas de medicina primaria en estos países, ya que una de las premisas fundamentales para detener la progresión del virus del sida en el organismo es seguir de forma continuada el tratamiento terapéutico. Por ello y según analistas internacionales, los gobiernos de estos países tienen ahora una labor fundamental, ya que deberán construir esas redes de atención primaria a los pacientes infectados y de conservación de estos fármacos, que son especialmente sensibles a las altas temperaturas. Igualmente, los médicos y enfermeras que tengan a su cargo la administración de estos medicamentos antirretrovirales tendrán que hacer un seguimiento periódico de los pacientes, con los recuentos obligados de carga viral y de linfocitos CD4, como se viene haciendo en los países desarrollados.
Cuarenta millones de infectados
La OMS estima que, actualmente, sobreviven con la infección del virus de la inmunodeficiencia humana cerca de cuarenta millones de personas, la mayor parte de ellas en África y Asia. Actualmente en África meridional uno de cada cinco adultos vive con el VIH o ha desarrollado la enfermedad. Si bien las tasas de infección varían ampliamente de un país a otro en África subsahariana -desde menos del 1 por ciento en Mauritania hasta casi el 39 por ciento en Botswana y Swazilandia- la amplitud de la pandemia pone de manifiesto que se ha afianzado en la mayor parte del continente negro.
Fuente: ABC
http://www.abc.es/abc/pg040407/prensa/noticias/Sociedad/Sociedad/200404/07/NAC-SOC-069.asp