19 de agosto de 2002.
A los medios de comunicación nacional e internacional
A la Sociedad Civil
A los Derechos Humanos
Hermanos y Hermanas:
Nosotros y nosotras que formamos el municipio Autónomo en Rebeldía 17 de Noviembre, venimos a este lugar, dejamos nuestras humildes casas y llegamos con dolor porque le violaron su derecho de vida a nuestro compañero José López Santiz. Los asesinos Baltasar Alfonso Utrilla, Benjamín Montoya Oceguera, y Humberto Castellanos Gómez deben entregarse y exigimos que las autoridades gubernamentales los entreguen.
Hasta aquí hemos llegado los hombres y mujeres que luchamos en contra de las injusticias que nacen en las mesas de los gobiernos federal, estatal y municipal, planeando están como acabar esta resistencia indígena, esta unidad indígena, que lucha contra la impunidad y contra la injusticia. Acribillaron a nuestro compañero José López Santiz y se defienden escondiendo la verdad, mintiendo a la opinión pública inventando que el
asesinato fue accidental en cacería.
Nosotros los indígenas no somos como ellos, que engañan y esconden la verdad, nosotros no somos esa clase de gente, prueba de ello es que venimos a Altamirano, para decirles que todo lo que han dicho en los medios de comunicación son mentiras.
El presidente municipal Armando Pinto Kanter dejó claro que su primera preocupación fue planear un sepelio, un ataúd sin investigaciones, en vez de preocuparse por la justicia.
El ministerio público nunca llegó a pararse en el lugar de los hechos, ni se tomó la molestia de levantar algún documento por la investigación del asesinato.
Por radio de comunicación autorizó a los policías municipales para el levantamiento del cuerpo. Nos preguntamos ¿por qué tanto apuro en levantar el cuerpo? ¿Cuál era la prisa? ¿Cuál era el miedo?
Hermanos y hermanas, compañeros y compañeras,
No nos dejemos arrastrar por las declaraciones falsas porque es el método que han venido usando para esconder sus delitos los gobiernos pasados y de hoy. Que no nos lleven a las corrientes de la mentira y del engaño. Varios delitos y violaciones a los derechos humanos de indígenas han cometido estos señores del poder y han quedado en el olvido, nunca hemos recibido justicia digna para nosotros los pobres.
Nosotros no venimos a exigir indemnización, venimos a pedir justicia y castigo a los culpables del asesinato. No encontrarán con nosotros acuerdo sin la justicia, tal vez han encontrado en otras organizaciones baratas y corruptas que están dispuestos a regalar sus conciencias y sus tierras, sus aguas y sus vidas, pero ellos porque así están mal educados se han dejado adoptar con otra cultura que los lleva a la miseria y han podido, obligándolos a aplaudir el miserable regalo que les ofrecen. Nosotros ya no permitiremos más humillación y amenazas como le hicieron a nuestro compañero.
Los mestizos que viven estas tierras vivirán tranquilos si nos ofrecen respeto, de lo contrario tomarán su maleta y que se vayan, porque esta zona urbana es terreno de indígenas.
Las amenazas, persecución y el asesinato que sufrió nuestro compañero José López Santiz nos deja claro que el crimen es una amenaza para todos nosotros, y está planeado por la fuerza del dinero.
La impunidad, sigue aquí en Altamirano como en todo el país, en esta región están desarrollando una banda de paramilitares, que se denomina SISEN, esta organización está en su conocimiento del presidente municipal, la seguridad pública y la base militar.
En la comunidad de Galilea, un grupo de personas del partido PRI y PT ahí tienen y existe un campo de entrenamiento, hasta ahora siguen sin hacer nada en contra de este campo, los líderes José Lino Gómez Hernández, Gerardo Aguilar Gómez, y Floriberto … siguen gozando de su libertad, ellos entran y salen de Altamirano.
Usan uniforme de color azul marino, tanto la camisa, gorra, como el pantalón idéntico al que usa la seguridad pública, contamos con una fotografía del señor Floriberto Morales Vázquez cuando estaba uniformado. Un oficial con grado de capitán segundo de nombre Alfredo Alvarado R. de la base militar de Altamirano, es la persona indicada que tiene contacto directo con los paramilitares, es el que les entrega cámaras fotográficas, videocámaras y radios de comunicación, para que nos rastreen, nos vigilen y tengan en sus manos todo lo que hacemos y como somos. También su contacto les obliga a tomar informes por escrito de lo que sucede dentro de la región y son pagados de acuerdo a la importancia del informe.
Ellos se meten más en las comunidades divididas y ofrecen dos cosas para que abandonen su resistencia, unas veces les ofrecen láminas y dinero pero prefieren dar dinero más que láminas porque es menos visible. Dentro de la región se han visto gentes extrañas uniformadas de color negro, de camisa, gorra y pantalón y portan armas de alto calibre.
Esta estructura del ejército Federal con los paramilitares nos preocupa porque es una prueba de que nos quieren provocar con la intención de sembrar el terror dentro de nuestro municipio autónomo 17 de Noviembre.
Nosotros ya no queremos ver más sangre o muerte e indígenas en nuestros poblados, nosotros estamos trabajando en calma, sembrando nuestra tierra, pero los gobiernos federal, estatal y municipal están dispuestos a romper nuestra unidad y generar violencia y guerra entre indígenas.
-Municipio Autónomo en Rebeldía 17 de Noviembre (Mexico)
A los medios de comunicación nacional e internacional
A la Sociedad Civil
A los Derechos Humanos
Hermanos y Hermanas:
Nosotros y nosotras que formamos el municipio Autónomo en Rebeldía 17 de Noviembre, venimos a este lugar, dejamos nuestras humildes casas y llegamos con dolor porque le violaron su derecho de vida a nuestro compañero José López Santiz. Los asesinos Baltasar Alfonso Utrilla, Benjamín Montoya Oceguera, y Humberto Castellanos Gómez deben entregarse y exigimos que las autoridades gubernamentales los entreguen.
Hasta aquí hemos llegado los hombres y mujeres que luchamos en contra de las injusticias que nacen en las mesas de los gobiernos federal, estatal y municipal, planeando están como acabar esta resistencia indígena, esta unidad indígena, que lucha contra la impunidad y contra la injusticia. Acribillaron a nuestro compañero José López Santiz y se defienden escondiendo la verdad, mintiendo a la opinión pública inventando que el
asesinato fue accidental en cacería.
Nosotros los indígenas no somos como ellos, que engañan y esconden la verdad, nosotros no somos esa clase de gente, prueba de ello es que venimos a Altamirano, para decirles que todo lo que han dicho en los medios de comunicación son mentiras.
El presidente municipal Armando Pinto Kanter dejó claro que su primera preocupación fue planear un sepelio, un ataúd sin investigaciones, en vez de preocuparse por la justicia.
El ministerio público nunca llegó a pararse en el lugar de los hechos, ni se tomó la molestia de levantar algún documento por la investigación del asesinato.
Por radio de comunicación autorizó a los policías municipales para el levantamiento del cuerpo. Nos preguntamos ¿por qué tanto apuro en levantar el cuerpo? ¿Cuál era la prisa? ¿Cuál era el miedo?
Hermanos y hermanas, compañeros y compañeras,
No nos dejemos arrastrar por las declaraciones falsas porque es el método que han venido usando para esconder sus delitos los gobiernos pasados y de hoy. Que no nos lleven a las corrientes de la mentira y del engaño. Varios delitos y violaciones a los derechos humanos de indígenas han cometido estos señores del poder y han quedado en el olvido, nunca hemos recibido justicia digna para nosotros los pobres.
Nosotros no venimos a exigir indemnización, venimos a pedir justicia y castigo a los culpables del asesinato. No encontrarán con nosotros acuerdo sin la justicia, tal vez han encontrado en otras organizaciones baratas y corruptas que están dispuestos a regalar sus conciencias y sus tierras, sus aguas y sus vidas, pero ellos porque así están mal educados se han dejado adoptar con otra cultura que los lleva a la miseria y han podido, obligándolos a aplaudir el miserable regalo que les ofrecen. Nosotros ya no permitiremos más humillación y amenazas como le hicieron a nuestro compañero.
Los mestizos que viven estas tierras vivirán tranquilos si nos ofrecen respeto, de lo contrario tomarán su maleta y que se vayan, porque esta zona urbana es terreno de indígenas.
Las amenazas, persecución y el asesinato que sufrió nuestro compañero José López Santiz nos deja claro que el crimen es una amenaza para todos nosotros, y está planeado por la fuerza del dinero.
La impunidad, sigue aquí en Altamirano como en todo el país, en esta región están desarrollando una banda de paramilitares, que se denomina SISEN, esta organización está en su conocimiento del presidente municipal, la seguridad pública y la base militar.
En la comunidad de Galilea, un grupo de personas del partido PRI y PT ahí tienen y existe un campo de entrenamiento, hasta ahora siguen sin hacer nada en contra de este campo, los líderes José Lino Gómez Hernández, Gerardo Aguilar Gómez, y Floriberto … siguen gozando de su libertad, ellos entran y salen de Altamirano.
Usan uniforme de color azul marino, tanto la camisa, gorra, como el pantalón idéntico al que usa la seguridad pública, contamos con una fotografía del señor Floriberto Morales Vázquez cuando estaba uniformado. Un oficial con grado de capitán segundo de nombre Alfredo Alvarado R. de la base militar de Altamirano, es la persona indicada que tiene contacto directo con los paramilitares, es el que les entrega cámaras fotográficas, videocámaras y radios de comunicación, para que nos rastreen, nos vigilen y tengan en sus manos todo lo que hacemos y como somos. También su contacto les obliga a tomar informes por escrito de lo que sucede dentro de la región y son pagados de acuerdo a la importancia del informe.
Ellos se meten más en las comunidades divididas y ofrecen dos cosas para que abandonen su resistencia, unas veces les ofrecen láminas y dinero pero prefieren dar dinero más que láminas porque es menos visible. Dentro de la región se han visto gentes extrañas uniformadas de color negro, de camisa, gorra y pantalón y portan armas de alto calibre.
Esta estructura del ejército Federal con los paramilitares nos preocupa porque es una prueba de que nos quieren provocar con la intención de sembrar el terror dentro de nuestro municipio autónomo 17 de Noviembre.
Nosotros ya no queremos ver más sangre o muerte e indígenas en nuestros poblados, nosotros estamos trabajando en calma, sembrando nuestra tierra, pero los gobiernos federal, estatal y municipal están dispuestos a romper nuestra unidad y generar violencia y guerra entre indígenas.
-Municipio Autónomo en Rebeldía 17 de Noviembre (Mexico)