Como madre,puedo aportar al tema, que los niños no tiene motivación alguna,en su gran mayoría. Los deberes les abruman, las clases de la asignatura que sea, les son todas un aburrimiento,no van con ganas al cole y es lo que pensamos todas,según las reuniones y tutorías que llevamos desde principio de curso.
Este año, les han hecho las pruebas de diagnóstico al curso de mi hija mayor,niños entre 10-11 años y el fracaso ha sido brutal, según los resultados. Como apunte diré, que es el tercer año consecutivo que la Junta de Andalucía, otorga al colegio de mis hijas el "galardón", de mejor colegio a nivel educativo de toda la provincia, entonces....del resto de colegios, ya ni hablemos.
A mi me educaron en el pensamiento de que estudiar ,era mi obligación y nunca me premiaron por sacar buenas notas, si exceptuamos cuando aprobé la selectividad. Al principio yo hacía lo mismo con mis hijas, pero, hoy puedo asegurar que si no tienen aquel sobre de estampas de High School Musical o aquel bolígrafo de purpurina(por poner ejemplos), las niñas no se motivan para sacarme un sobresaliente. He tenido que ceder, al ver que el resto de los niños, tenían todo lo que querían aún sacando suspensos, y las mías me reclamaban algo "lógico" por su esfuerzo,por tanto, creo que el principal problema radica en el seno de la familia, el primer foco de socialización de una persona.
Antes, la inmensa mayoría de las madres ,no trabajaban y ahora es todo lo contrario y cuando llegamos a casa no tenemos ganas más que de cenar,ver un rato la tele e irnos a dormir. Yo personalmente tengo el privilegio de no trabajar por las tardes y puedo atender a mis hijas, pero sé de muchos de sus compañeros que estan en casa solos, haciendo los deberes o viendo la tele,sin supervisión, porque ya son lo suficientemente mayores como para estar solos hasta las 8-9 que llegan los padres, otros tiene supervisión,pero no les atienden porque es más interesante la novela o serie de turno que echan por este o aquel canal. En definitiva, que por parte de la familia tampoco hay interés en el tema.
El niño si suspende siempre se va a defender, con escusas como el profe me tiene manía, es que no entiendo este tema, es que tal, o pascual...dando a entender que el culpable del suspenso es el profesor, pasándole así la pelota a este.
En definitiva, con todo esto quiero decir, que el tema que nos concierne, es una pescadilla que se muerde la cola, pero que como bien apuntaba SJJ " el problema radica en varios factores", y para mí, sino partimos del primer foco de socialización, es cuando el problema se hace una pelota más y más grande. Hay que educar a los niños desde una base sólida, por lo menos intentarlo, sentarlos y hablar con ellos, abrirle el avanico de valores y de posibilidades que le da la vida si estudian desde pequeños, de que aprendan a ponerse metas, simplemente por el hecho de obtener la mayor gratificación ,que no es nada material, sino la satisfacción personal por un trabajo bien hecho.