mjj2021
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El 77% de las parejas discute a causa del aparato y uno de cada cuatro entrevistados esconce el mando para que nadie se lo arrebate.
Un estudio de la empresa "Teletext" entre ciudadanos británicos demostró lo que muchos ya sabemos por propia experiencia: el mando a distancia es motivo de grandes disputas y peleas.
Algunos creen firmemente que "quien tiene el mando, tiene el poder" y no van desencaminados.
Según datos extraídos de esta encuesta uno de cada cuatro entrevistados confesó esconderlo para hacer rabiar a su pareja, simplemente castigarlo o evitar que le arrebaten esa sensación de poder que le permite sintonizar aquellas emisiones que le vienen en gana en cualquier momento. Por supuesto esta acción no suele satisfacer a los otros que también desean seguir las emisiones televisivas y así el 77% de las parejas afirmaron enojarse cuando la otra persona cambia de canal sin preguntar o sube excesivamente el volumen. Finalmente, el mando a distancia es también una excelente arma: un 3% lo usa como boomerang doméstico.
Un estudio de la empresa "Teletext" entre ciudadanos británicos demostró lo que muchos ya sabemos por propia experiencia: el mando a distancia es motivo de grandes disputas y peleas.
Algunos creen firmemente que "quien tiene el mando, tiene el poder" y no van desencaminados.
Según datos extraídos de esta encuesta uno de cada cuatro entrevistados confesó esconderlo para hacer rabiar a su pareja, simplemente castigarlo o evitar que le arrebaten esa sensación de poder que le permite sintonizar aquellas emisiones que le vienen en gana en cualquier momento. Por supuesto esta acción no suele satisfacer a los otros que también desean seguir las emisiones televisivas y así el 77% de las parejas afirmaron enojarse cuando la otra persona cambia de canal sin preguntar o sube excesivamente el volumen. Finalmente, el mando a distancia es también una excelente arma: un 3% lo usa como boomerang doméstico.