Valdoria
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Poco me queda por decirte, pero hay un pensamiento que he tenido estos días y quería compartirlo contigo precisamente hoy, un día tan especial.
La única verdad en la que ahora puedo creer está representada en unas palabras que empiezan más o menos así:
No estoy... no duermo.
Soy un millar de vientos que soplan,
Soy el brillo del diamante sobre la nieve,
Soy la luz del sol por la semilla madura,
Soy la suave lluvia de otoño.
(...)
La única verdad en la que ahora puedo creer está representada en unas palabras que empiezan más o menos así:
No estoy... no duermo.
Soy un millar de vientos que soplan,
Soy el brillo del diamante sobre la nieve,
Soy la luz del sol por la semilla madura,
Soy la suave lluvia de otoño.
(...)
Soy un millar de vientos que soplan
Estuvo allí todo el tiempo, a nuestro alrededor.
Muchas felicidades. Sé que vas a tener el mágico día que te mereces.
Gracias por darme tanto.
Te quiero
Gracias por darme tanto.
Te quiero