pa que veais que no me lo inventaba.
aqui tengo pruebassssss:
05/29/01:
Vender aire
Por: deabruak
¿Saben cuál es el juguete de moda entre los niños británicos? Se trata ni más ni menos que de Invisible Jim, un fantástico muñeco que, como su propio nombre indica, no lo puede uno ver si no utiliza, para ello, grandes dosis de imaginación. Invisible Jim, cuya espeluznante misión se trata de, agárrense a la silla, "save the world from crap dolls", es un trozo de aire encerrado en un envoltorio de plástico. Por tan sólo dos libras esterlinas (aunque, bien mirado, es un poco caro dado lo que se ofrece a cambio), cualquier muchacho de ocho años puede pasar horas y horas ante un juego creativo y perspicaz: su propia mente. Porque, la verdad, poco más nos ofrecen los fabricantes del juguete: aire, puro aire Made in America.
Parece ser que los años de la burbuja puntocom han creado escuela entre los modos y maneras de hacer de los ejecutivos de las grandes -y no tan grandes- compañías estadounidenses. ¿Por qué demonios vamos a desgastarnos fabricando productos si podemos vender lo que tenemos delante de nuestras narices? A fin de cuentas, muchos lo hicieron y el negocio les salió redondo. Los Jims de la burbuja tecnológica funcionaron a las mil maravillas. Todo el mundo encontraba financiación hasta para las más disparatadas ideas. Se creyó que las reglas del mercado no iban con ellos. ¿Por qué no ahora? Aprendamos de los que han hecho historia, sigamos su lúcido camino y hagamos lo imposible: vendamos aire. ¿Que algunos padres descontentos protestan airados cuando se sienten estafados? Qué sabrán ellos de la vanguardia comercial en la Nueva Economía...
Ahora en ingles...
Invisible Jim Proves That
Even Nothing Can Sell
By CASSELL BRYAN-LOW
Staff Reporter of The Wall Street Journal.
From The Wall Street Journal
Ever wondered how to make money out of thin air?
Meet "Invisible Jim," the toy no one can see. As Jim's box describes him, he is "completely devoid of darting eyes" and boasts non-gripping hands "as not seen on TV." And of course, "camouflage suit sold separately."
Dreamed up by a reclusive Australian designer, the non-doll is being distributed by Hurst Marler Ltd. in the United Kingdom (not "What-if-Atlas-got-an-itchy-bum" Corp., as detailed on the box). Pitched as an alternative greeting card, the item's retail price is about $3. The packaging -- printed cardboard wrapped in a clear plastic cover -- costs about 10 cents to make.
Of course, the notion of paying something for nothing has "taken a minute to catch the imagination," says Christopher Marler, head of Hurst Marler, and also purveyor of the "Misfortune Cookie," which holds frank messages such as: "You are not a hottie." Since introducing the toy late last year, the company has fielded calls from customers complaining the doll was missing from their box. But interest recently has taken off, says Mr. Marler, as increased media attention has helped improve Invisible Jim's visibility.
In the U.S., the toy is being distributed by New York wholesaler Streamline Inc. to novelty gift shops nationwide. Invisible Jim is set to appear, or not, at U.S. gift shows this summer.