mjj2021
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Un jubilado que perdió su dentadura postiza durante un crucero marítimo tiene ocupados a dos tribunales civiles de Bonn (oeste) con su demanda.
El anciano había envuelto la pieza dental en un pañuelo de papel que depositó junto al lavabo en el baño de su camarote, antes de que el camarero lo arrojara a la bolsa de los desperdicios durante la limpieza diaria.
Durante las dos semanas que duró el crucero el pasajero no pudo comer ni hablar con otros viajeros, por lo que demandó a su agente de viajes para que le pague una indemnización de 1.000 euros y otros 1.500 euros para una nueva dentadura.
El tribunal de primera instancia de Bonn rechazó la demanda, porque el camarero no pudo reconocer que dentro del pañuelo de papel había una dentadura. Pero el jubilado apeló ahora la sentencia elevándola a una corte superior.
Durante las dos semanas que duró el crucero el pasajero no pudo comer ni hablar con otros viajeros, por lo que demandó a su agente de viajes para que le pague una indemnización de 1.000 euros y otros 1.500 euros para una nueva dentadura.
El tribunal de primera instancia de Bonn rechazó la demanda, porque el camarero no pudo reconocer que dentro del pañuelo de papel había una dentadura. Pero el jubilado apeló ahora la sentencia elevándola a una corte superior.