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LONDRES (Reuters) - Dos hombres encarcelados por su participación en un intento de robo de diamantes en la Cúpula del Milenio de Londres anunciaron el miércoles su intención de recurrir sus condenas, argumentando que el juez se había dormido durante el juicio.
Raymond Betson y William Cockram, hallados culpables en febrero de 2002 por tramar lo que la Policía dijo que hubiera sido el mayor atraco de la historia, dijeron al tribunal de apelaciones que el juez roncó lo suficientemente fuerte como para atraer la atención del jurado.
"Declaraciones de dos personas presentes en el juicio dijeron que el juez se durmió en varias ocasiones", dijo Edmund Romilly, abogado de Betson, al tribunal.
"No sólo se durmió delante del jurado, sino que además roncó".
En una trama digna de James Bond, Betson y Cockram fueron condenados junto con otros dos hombres de conspirar para robar diamantes valorados en 200 millones de dólares de la Cúpula, escapar por el río Támesis en una lancha rápida y sacarlos de contrabando del país.
Entre las piedras que esperaban robar estaba la Estrella del Milenio, de 77 kilates y una de las gemas más grandes del mundo.
El audaz plan fue frustrado por una unidad policial especializada que había cambiado los diamantes verdaderos por otros falsos y les esperó.
Romilly dijo en la apelación el miércoles que el comportamiento del juez había distraido al jurado, dando a sus miembros la impresión de que no estaba interesado en el proceso. Esto había tenido efectos perjudiciales para los acusados, dijo.
El presidente del tribunal Rose, quien está llevando la apelación junto con los jueces Poole y Davis, dijo que el magistrado del juicio había admitido que se durmió pero no reconoció haber "roncado ruidosamente".
Posteriormente, se les negó a los dos hombres condenados a 18 años de cárcel el derecho a apelar sus condenas. Sin embargo, sí se les permitió apelar contra sus penas de prisión.
Raymond Betson y William Cockram, hallados culpables en febrero de 2002 por tramar lo que la Policía dijo que hubiera sido el mayor atraco de la historia, dijeron al tribunal de apelaciones que el juez roncó lo suficientemente fuerte como para atraer la atención del jurado.
"Declaraciones de dos personas presentes en el juicio dijeron que el juez se durmió en varias ocasiones", dijo Edmund Romilly, abogado de Betson, al tribunal.
"No sólo se durmió delante del jurado, sino que además roncó".
En una trama digna de James Bond, Betson y Cockram fueron condenados junto con otros dos hombres de conspirar para robar diamantes valorados en 200 millones de dólares de la Cúpula, escapar por el río Támesis en una lancha rápida y sacarlos de contrabando del país.
Entre las piedras que esperaban robar estaba la Estrella del Milenio, de 77 kilates y una de las gemas más grandes del mundo.
El audaz plan fue frustrado por una unidad policial especializada que había cambiado los diamantes verdaderos por otros falsos y les esperó.
Romilly dijo en la apelación el miércoles que el comportamiento del juez había distraido al jurado, dando a sus miembros la impresión de que no estaba interesado en el proceso. Esto había tenido efectos perjudiciales para los acusados, dijo.
El presidente del tribunal Rose, quien está llevando la apelación junto con los jueces Poole y Davis, dijo que el magistrado del juicio había admitido que se durmió pero no reconoció haber "roncado ruidosamente".
Posteriormente, se les negó a los dos hombres condenados a 18 años de cárcel el derecho a apelar sus condenas. Sin embargo, sí se les permitió apelar contra sus penas de prisión.
