Una polémica sobre el tanga invade los institutos franceses en estos días, después de que varios centros hayan prohibido a sus alumnas llevar esta prenda interior, considerada demasiado provocativa. La última moda consiste en combinar esta prenda con unos pantalones de cintura baja, lo que deja una generosa parte de cadera a la vista.
En el instituto de Ribeauvillé (noreste), 10 chicas fueron enviadas a casa, la semana pasada, para cambiar su vestimenta, según informa 'Le Parisien', y el miércoles se prohibió definitivamente llevar 'strings' (tangas) a la vista o descubrir demasiado el vientre, a pesar de las protestas de los alumnos.
Dejar descubierta la mayor parte posible del cuerpo se ha convertido en una tendencia que arrasa entre los jóvenes, y una parte de los responsables escolares ha sancionado también a alumnas que dejan a la vista el ombligo.
El nuevo reglamento del Instituto de Ribeauvillé obliga a que la apariencia y la vestimenta de los alumnos del liceo respeten la "decencia y la seguridad". "Me parece bien que las niñas jóvenes enseñen su ombligo, pero no en un instituto", declaró Claudine Wendling-Brickert, directora del establecimiento, a dicho diario.
Segolène Royal, ex ministra delegada de Enseñanza Escolar en la anterior legislatura socialista, asegura que "es una buena solución". “Los responsables educativos han reaccionado prohibiéndolo en la escuela. A ojos de los chicos, el tanga reduce a las niñas a su parte posterior", analiza Royal, en declaraciones a 'Le Parisien'.
"Luego, nos sorprendemos de que las adolescentes sean víctimas de acosos o violencias sexuales", considera la ex ministra, diputada por el Partido Socialista y compañera sentimental del primer secretario de la formación, François Hollande.
Royal cree que esta polémica es un reflejo de la sociedad actual: "una sociedad en la que el cuerpo de la mujer se exhibe como una vulgar mercancía".
En el instituto de Ribeauvillé (noreste), 10 chicas fueron enviadas a casa, la semana pasada, para cambiar su vestimenta, según informa 'Le Parisien', y el miércoles se prohibió definitivamente llevar 'strings' (tangas) a la vista o descubrir demasiado el vientre, a pesar de las protestas de los alumnos.
Dejar descubierta la mayor parte posible del cuerpo se ha convertido en una tendencia que arrasa entre los jóvenes, y una parte de los responsables escolares ha sancionado también a alumnas que dejan a la vista el ombligo.
El nuevo reglamento del Instituto de Ribeauvillé obliga a que la apariencia y la vestimenta de los alumnos del liceo respeten la "decencia y la seguridad". "Me parece bien que las niñas jóvenes enseñen su ombligo, pero no en un instituto", declaró Claudine Wendling-Brickert, directora del establecimiento, a dicho diario.
Segolène Royal, ex ministra delegada de Enseñanza Escolar en la anterior legislatura socialista, asegura que "es una buena solución". “Los responsables educativos han reaccionado prohibiéndolo en la escuela. A ojos de los chicos, el tanga reduce a las niñas a su parte posterior", analiza Royal, en declaraciones a 'Le Parisien'.
"Luego, nos sorprendemos de que las adolescentes sean víctimas de acosos o violencias sexuales", considera la ex ministra, diputada por el Partido Socialista y compañera sentimental del primer secretario de la formación, François Hollande.
Royal cree que esta polémica es un reflejo de la sociedad actual: "una sociedad en la que el cuerpo de la mujer se exhibe como una vulgar mercancía".