Michael Jackson in Bad Homburg
De tiendas con mascarilla
Michael Jackson no se aclaraba con la talla de la ropa de sus hijos.
"Daba igual si eran camisetas o vestidos, siempre los escogía demasiado pequeños "- recordaba Ursula Schmidt.
El problema - no hablarle, ni intentar tocarle, estas fueron las órdenes recibidas del personal de seguridad ante la gran visita con sombrero y mascarilla que en el año 2001 irrumpió en su boutique Me & Mom con todo el equipo de guardaespaldas, niñera, hijo e hija que llevaba pañales.
"Tenia una ligera idea cuando la manager del hotel Falkensteiner Kempinski me llamó un día de primavera hace 8 años y anunciaba algo de una estrella mundial que tenía
deseos de comprar en mi tienda. El nombre no me lo reveló "- dijo Ursula Schmidt. Sólo, que este misterioso personaje de élite quería ir de tiendas después del cierre, y sobretodo que no alertara a la prensa. Por la tarde se pasaron personas que lo supervisaron todo, las habitaciones, las ventanas, los alrededores.
"No será Michael Jackson el que nos visitara "- comentaba Ursula a sus hijas gemelas.
Ursula recuerda aquel día de compras de Michael
Hacia las 20.30 entró por la puerta todo el séquito. "No me lo podía creer"- decía la entonces veintitrés añera Mael Natalie Schmidt y pidió a su hermana Femke que la pellizcara. Eran fans del músico, pero no fanáticas, pero algunas cosas de Michael se encontraban en la estantería y de repente allí estaba su ídolo en su tienda., con pantalones anchos de color negro y calcetines de tenis blancos, pudo observar Femke Schmidt. Al principio resultaba tímido e inseguro. Lo mismo pasaba con las hermanas Schmidt. "No nos atrevimos casi a mirarle"- dijo Ursula. Pero pudo observar como Michael se equivocaba con las tallas y habló con la manager de Michael. Enseguida Michael agradeció la ayuda y el hielo se rompió.
Sorprendido estaba Michael cuando vio por primera vez a Mael y Femke juntas
"Oh, sois gemelas?" exclamó. "No somos trillizos. Tenemos todavía un hermano", dieron por respuesta. A partir de entonces no ceso de hacer preguntas."Si sentíamos del mismo modo, si teníamos los mismos sueños……….. Se quitó evidentemente el sombrero y la mascarilla. Además a sus hijos nada mas entrar en la tienda les quitó las máscaras. "Eran muy buenos y muy bien educados "-recordaba Femke. "Y el era muy cariñoso con ellos"- añadió su hermana Mael.
"Por cierto, era como un niño, pero tan agradable, tan humano, muy diferente a como lo pintan los medios" - dijeron al unísono las hermanas. Incluso su nariz se veía muy normal. Cerca de tres horas pasó Michael en el establecimiento
Compró para sus hijos mucha ropa de colores y recogió incluso los peluches que dejaron los niños por el suelo guardándolos en el armario. A Ursula le dio un beso en la mano como despedida y a las hermanas les dio un corto abrazo, informaron las gemelas.
Su repentina muerte las ha trastocado mucho y sus recuerdos de aquel día volvieron a aflorar en sus mentes. "No tenemos ninguna foto, ni siquiera un autógrafo, pero el recuerdo lo llevaremos eternamente en nuestros corazones".