Hace muchos años que sigo a Michael Jackson: más de siete, ya. Desde que lo descubrí hasta el comienzo de 2009 centré todo mi tiempo de ocio musical en su figura, siéndome innecesario escuchar otro tipo de material, por lo mucho que me llenaban sus canciones.
A mediados de 2006, con los rumores "confirmados" de inminente nuevo álbum con 2Seas Records, la ilusión por un nuevo álbum invadió mi cuerpo, ocupando horas durante todos los días desde entonces el encontrar alguna noticia relacionada con ello.
Con la filtración de "Hold my hand" en verano de 2008 parecía estar cada vez más cerca la llegada del nuevo álbum, pero la publicación de "Thriller 25" a comienzos de aquel año y la ausencia de noticias serias al respecto hacían presagiar un tardío estreno del nuevo material.
En estas circunstancias me abrí camino con nuevos artistas cercanos a Michael, como Akon, Will I Am, Justin Timberlake, Kanye West y Chris Brown, a los que empecé a escuchar como complemento de mis queridos discos de toda la vida.
Entonces, a principios de 2009, me di cuenta que había más vida fuera de Michael Jackson, ilusionándome con discos como "808's & heartbreak" de Kanye West, "Songs about girls", de Will I Am, y "FutureSex / LoveSounds", de Justin Timberlake. No parecía echar tanto de menos el regreso musical de Michael Jackson con la gran cantidad de canciones nuevas que había encontrado.
En primavera la noticia de la gira de despedida de Michael Jackson, "This is it", suponía un agridulce reencuentro con Mi Rey, del que esperaba, ante todo, y como siempre, un nuevo álbum, que poco parecía que podía tardar en salir.
Durante este tiempo regresó mi Michaelmanía, que había perdido fuerza en los últimos meses, y entonces compaginaba la búsqueda de nuevos talentos con el disfrute del buen sabor de siempre, hasta que en junio de 2009, ese maldito día 25, todo se vino abajo, dejando fuera mis sueños de nuevo álbum (nada de obras póstumas), y matando parte de mi corazón con la pérdida HUMANA de Michael Jackson.
Quizás por aquello me mantuve un tiempo distante de su música, ya que me dolía en el alma escucharlo. "Smile" me mataba, y muchas otras como "Little Susie" también. Quería seguir encontrando cantantes que expandiesen mi mundo musical, y encontré a los "Black Eyed Peas", a Rihanna, y a Ne Yo.
Pasó mucho, muchísimo tiempo, hasta que tuvimos noticias del primer álbum póstumo de Michael Jackson. Se titulaba "MICHAEL", y su primer corte mostrado sería "Breakin news", aquél de los Cascio que ya conocíamos por una nota de Friedman. La alegría del momento, que hizo temblar los fuertes muros de los grandes The-Dream, Kid Cudi y Kanye West, se esfumó prontamente, al saber que ese álbum no era más que una basurita compuesta por descartes de otras épocas (si bien de buena calidad), temas relativamente recientes, temas de dudosa autoría, y alguno que otro aprobado de los últimos años, no sumando más de diez en su totalidad.
¿Eso era todo lo que podíamos esperar tras tantos y tantos años de espera?
Escuché "MICHAEL" conforme se iba filtrando, sin ilusión alguna, temiendo encontrarme un fake a cada momento, cosa que gracias a Dios no llegué a sentir para disgusto de muchos vosotros. Pese a todo, las canciones de Cascio nunca deberían haber sido publicadas, porque no huelen bien, y eso lo admite hasta el más pequeño de la casa.
Terminado el fenómeno "MICHAEL", regresé a mi vida musical habitual, con la serie "Love" de The-Dream, el célebre "Born this way" de Lady Gaga, y los "Man on the Moon" de Kid Cudi, acompañados por una pequeña saga de jóvenes talentosos entre los que se incluyen los recién añadidos Frank Ocean, The Weeknd, y otros veteranos como Lupe Fiasco, Robin Thicke, John Legend, Usher, Lil Wayne, Cee Lo Green, Bruno Mars, incluso Enrique Iglesias.
¿Conclusión?
SONY podría habernos mantenido encendida la llama de la pasión por Michael Jackson, pero algunos ya sólo vivimos de su recuerdo, sin pensar en un futuro esperanzador.
La "nueva" música de Michael Jackson murió el día en que Michael Jackson firmó con SONY.
A mediados de 2006, con los rumores "confirmados" de inminente nuevo álbum con 2Seas Records, la ilusión por un nuevo álbum invadió mi cuerpo, ocupando horas durante todos los días desde entonces el encontrar alguna noticia relacionada con ello.
Con la filtración de "Hold my hand" en verano de 2008 parecía estar cada vez más cerca la llegada del nuevo álbum, pero la publicación de "Thriller 25" a comienzos de aquel año y la ausencia de noticias serias al respecto hacían presagiar un tardío estreno del nuevo material.
En estas circunstancias me abrí camino con nuevos artistas cercanos a Michael, como Akon, Will I Am, Justin Timberlake, Kanye West y Chris Brown, a los que empecé a escuchar como complemento de mis queridos discos de toda la vida.
Entonces, a principios de 2009, me di cuenta que había más vida fuera de Michael Jackson, ilusionándome con discos como "808's & heartbreak" de Kanye West, "Songs about girls", de Will I Am, y "FutureSex / LoveSounds", de Justin Timberlake. No parecía echar tanto de menos el regreso musical de Michael Jackson con la gran cantidad de canciones nuevas que había encontrado.
En primavera la noticia de la gira de despedida de Michael Jackson, "This is it", suponía un agridulce reencuentro con Mi Rey, del que esperaba, ante todo, y como siempre, un nuevo álbum, que poco parecía que podía tardar en salir.
Durante este tiempo regresó mi Michaelmanía, que había perdido fuerza en los últimos meses, y entonces compaginaba la búsqueda de nuevos talentos con el disfrute del buen sabor de siempre, hasta que en junio de 2009, ese maldito día 25, todo se vino abajo, dejando fuera mis sueños de nuevo álbum (nada de obras póstumas), y matando parte de mi corazón con la pérdida HUMANA de Michael Jackson.
Quizás por aquello me mantuve un tiempo distante de su música, ya que me dolía en el alma escucharlo. "Smile" me mataba, y muchas otras como "Little Susie" también. Quería seguir encontrando cantantes que expandiesen mi mundo musical, y encontré a los "Black Eyed Peas", a Rihanna, y a Ne Yo.
Pasó mucho, muchísimo tiempo, hasta que tuvimos noticias del primer álbum póstumo de Michael Jackson. Se titulaba "MICHAEL", y su primer corte mostrado sería "Breakin news", aquél de los Cascio que ya conocíamos por una nota de Friedman. La alegría del momento, que hizo temblar los fuertes muros de los grandes The-Dream, Kid Cudi y Kanye West, se esfumó prontamente, al saber que ese álbum no era más que una basurita compuesta por descartes de otras épocas (si bien de buena calidad), temas relativamente recientes, temas de dudosa autoría, y alguno que otro aprobado de los últimos años, no sumando más de diez en su totalidad.
¿Eso era todo lo que podíamos esperar tras tantos y tantos años de espera?
Escuché "MICHAEL" conforme se iba filtrando, sin ilusión alguna, temiendo encontrarme un fake a cada momento, cosa que gracias a Dios no llegué a sentir para disgusto de muchos vosotros. Pese a todo, las canciones de Cascio nunca deberían haber sido publicadas, porque no huelen bien, y eso lo admite hasta el más pequeño de la casa.
Terminado el fenómeno "MICHAEL", regresé a mi vida musical habitual, con la serie "Love" de The-Dream, el célebre "Born this way" de Lady Gaga, y los "Man on the Moon" de Kid Cudi, acompañados por una pequeña saga de jóvenes talentosos entre los que se incluyen los recién añadidos Frank Ocean, The Weeknd, y otros veteranos como Lupe Fiasco, Robin Thicke, John Legend, Usher, Lil Wayne, Cee Lo Green, Bruno Mars, incluso Enrique Iglesias.
¿Conclusión?
SONY podría habernos mantenido encendida la llama de la pasión por Michael Jackson, pero algunos ya sólo vivimos de su recuerdo, sin pensar en un futuro esperanzador.
La "nueva" música de Michael Jackson murió el día en que Michael Jackson firmó con SONY.