ABC -- MADRID. Los últimos diez años (1995-2004), con la excepción de 1996, fueron los más cálidos jamás registrados. Si 2004 fue el cuarto más caluroso de la historia, 2005 parece que no va a quedarse a la zaga, de acuerdo a las predicciones de la NASA. Según el director del Instituto Goddard de Estudios Espaciales, James E. Hansen, un episodio cálido de El Niño, aunque débil, se ha desarrollado en los últimos cinco meses, y podría hacer que 2005 sea al menos el segundo año más cálido de la historia e, incluso, superar a 1998 en los rigores del termómetro.
Precisamente, la razón para que 1998 registrara la temperatura media global más alta estuvo en que ese año se desarrolló un episodio muy fuerte de El Niño en el océano Pacífico, mientras que los años 2002 y 2003 se sitúan en segundo y tercer lugar respectivamente debido también a este fenómeno aunque más debilitado. El Niño es un fenómeno de interacción entre la atmósfera y el océano Pacífico tropical, y su manifestación más llamativa es el aumento de la temperatura de la superficie del mar en una extensa área del Pacífico ecuatorial.
Efecto de la actividad humana
Pero además de eventos climáticos como El Niño, que afectan a las temperaturas globales del planeta, el incremento de los contaminantes que proceden de la actividad humana juegan una parte importante, advierte Hansen. Así, explica que ahora la superficie de la Tierra está absorbiendo más energía del Sol de la que se refleja de vuelta al espacio. Por tanto, «esta energía extra, junto a El Niño, podrían hacer a 2005 no sólo más cálido que 2003 y 2004, sino también que 1998».
Hay que tener en cuenta que durante el siglo pasado, la temperatura en superficie a nivel mundial aumentó en más de 0,6 grados centígrados. Sólo las variaciones observadas desde 1976 hasta la fecha son aproximadamente tres veces superiores a las que se han registrado en conjunto en los últimos cien años, según datos de la Organización Meteorológica Mundial. Así, en el hemisferio norte, los años 90 han sido los más cálidos, con un aumento medio de 0,38 grados centígrados. Sin embargo, entre 2000 y 2004 las temperaturas medias en superficie han sido mucho más elevadas (0,58 grados).
Precisamente, la razón para que 1998 registrara la temperatura media global más alta estuvo en que ese año se desarrolló un episodio muy fuerte de El Niño en el océano Pacífico, mientras que los años 2002 y 2003 se sitúan en segundo y tercer lugar respectivamente debido también a este fenómeno aunque más debilitado. El Niño es un fenómeno de interacción entre la atmósfera y el océano Pacífico tropical, y su manifestación más llamativa es el aumento de la temperatura de la superficie del mar en una extensa área del Pacífico ecuatorial.
Efecto de la actividad humana
Pero además de eventos climáticos como El Niño, que afectan a las temperaturas globales del planeta, el incremento de los contaminantes que proceden de la actividad humana juegan una parte importante, advierte Hansen. Así, explica que ahora la superficie de la Tierra está absorbiendo más energía del Sol de la que se refleja de vuelta al espacio. Por tanto, «esta energía extra, junto a El Niño, podrían hacer a 2005 no sólo más cálido que 2003 y 2004, sino también que 1998».
Hay que tener en cuenta que durante el siglo pasado, la temperatura en superficie a nivel mundial aumentó en más de 0,6 grados centígrados. Sólo las variaciones observadas desde 1976 hasta la fecha son aproximadamente tres veces superiores a las que se han registrado en conjunto en los últimos cien años, según datos de la Organización Meteorológica Mundial. Así, en el hemisferio norte, los años 90 han sido los más cálidos, con un aumento medio de 0,38 grados centígrados. Sin embargo, entre 2000 y 2004 las temperaturas medias en superficie han sido mucho más elevadas (0,58 grados).
Última edición: