Bueno, según mis fuentes, que en este caso prefiero no revelar, los propios independentistas saben que en un referendum nunca alcanzarían, en el mejor de los casos, el 17% de votos positivos debido principalmente a que el Pais Vasco tiene una fuerte vinculación empresarial a España y a que, realmente, aquella región está recibiendo bastante dinero procedente de la Unión Europea para muchas cosas.
Ahora bien, mi opinión personal es que ese resultado sí podría ser mayor aunque dudo que llegara a superar el 30%. Allí hay muchos vascos que saben que el día en que su País llegue a ser autónomo pueden ponerse en peligro muchos puestos de trabajo, la participación del su equipo de fútbol en la LFP...
)) y eso sin contar con que el vascuence no es una lengua con mucha aceptación más allá de sus fronteras.
La autonomía traería la desaparición del español en las escuelas lo que, al cabo de unos cuantos años, obligaría a que todos los libros en castellano no llegaran allí al no existir personas que los entendieran. Reforzaría mucho la cultura vasca, sí, pero los alejaría del resto del mundo y los convertiría en otra aldea como la Asterix y Obelix.
Si los vascos dejan de exportar acero, carbón y otras muchas manufacturas al resto de España y a la Unión Europea (que tampoco los aceptaría como Estado Miembro hasta que las auditorías económicas lo hicieran converger con el resto de países...y los demás componentes quisiesen...), su economía se hundiría y en ese caso, ¿qué harían? Volver a pedir la incorporación a España.
Sabino Arana, el pensador en quien se basan todos los defensores del nacionalismo ya dijo en sus últimas obras que la salida del País Vasco NO era la independencia como él mismo había dicho en sus primeros escritos. Lo que ocurre es que la gente sólo dice de su legado lo que le interesa. Así que un independentista que pone a Sabino Arana como respaldo de sus ideas (que son la mayoría), ha sido objeto de un lavado de cerebro, desde mi punto de vista, de nuevo.
Finalmente, y al margen del dinero y de la viabilidad del proyecto, sí soy consciente de que ellos tienen una cultura propia, una lengua propia y una serie de caracteres que los convierte en perfectos acreedores para lograr su independencia. Si no tienen apenas elementos en común con España, a lo mejor sí sería necesario dejarlos que prueben a ver cómo les va con nación autónoma.
Y sobre el Plan Ibarretxe, si no le gusta ni a la ETA, ya nos podemos hacer una idea de cómo es...
Saludos!