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¿realidad O Ficcion?

Mensaje de Reflexión para Toda la Humanidad

Tercera Carta de Nuestra Señora de Fátima

La iglesia ha dado permiso de revelar a los fieles la parte más cruda y
fatal del mensaje de Fátima, referente a la gran catástrofe que le espera a
la humanidad y que ya pronto está por venir, solo es cuestión de días,
quizás horas, quizás minutos, nadie lo sabe; pero lo que sí se sabe es
que el mensaje ya esta dado por nuestro Padre Universal, a través de la
VIRGEN MARÍA; para aquellos que no lo sabían y para los que ya se
habían olvidado, les recordamos que la Santísima Virgen se apareció a,
tres niños en 1917. Esto está probado y recomprobado; una de las niñas
aún vive, ahora ya es una persona mayor y se llama LUCIA, es monjita y
se encuentra en un CLAUSTRO EN EUROPA.

La hermana LUCIA dio el mensaje, primeramente al PAPA PIO XII, quien
al terminar de leerlo estaba, temblando, prefirió guardarlo y no darlo a
conocer .

Después, al tiempo al tiempo lo leyó también el papa JUAN XXIII, quien
hizo lo mismo, por que lo consideró tremendo. El PAPA PAULO VI,
también leyó el mensaje y tampoco quiso divulgarlo; Ellos tres sabían que
al ser revelado con anticipación, produciría en la humanidad un caos, una
desesperación o el propio pánico. Es por ello que no lo hicieron, todo en
su intento y afán de unificar al mundo, para que acataran las súplicas de
la VIRGEN MARIA, consistentes en encausar e invitar a toda la
humanidad a la Reconversión y al arrepentimiento, como cumplir y dar
seguimiento a los estatutos y ejemplos que Nuestro Señor JESUCRISTO
nos dejó.

Lamentablemente nadie hacemos caso.

Ahora bien, antes de morir el papa PAULO VI SUGIRIÓ y dio permiso al
Padre Agustín, (persona de confianza), que buscara y visitara a la
hermana LUCIA, para que le preguntara y le informara cómo se estaban
gestando las cosas; Y ella lo recibió muy acongojada y le dijo: "¡PADRE
AGUSTIN!… Nuestra Señora (la VIRGEN MARÍA), esta muy triste, llora
en silencio, su corazón desecho, porque nadie ha tomado interés de
súplicas; una y otra vez ha avisado a los hombres, les ha dado
oportunidades especiales, ofertas, pudiéramos llamarlas, para volver al
verdadero camino, pero cada día estn CIEGOS.

"Sea pues así la Voluntad de DIOS; di a todos los hombres que el
CASTIGO vendrá muy pronto. El mensaje no puede ni debe seguir
permaneciendo oculto". Es por ello que la madre LUCIA le dijo al padre
que habría que difundirlo, como se le dijo así: "Hija Mia, ve por por el
mundo y di lo que pasará entre los años 1950 y 2000.

Los hombres siguen sin entender, empeñados en no escuchar, ciegos y
ocupados tan sólo en las cosas materiales y mundanas, sin poner en
práctica los mandamientos que nuestro Santo Padre nos dejo. Solamente
les mueve la soberbia, la ambición, el odio y van sembrando cizaña por
todas partes. Su supuesta tecnología sólo ha servido para corromper las
almas y fabricar armas mortales que destruirán al mundo en segundos.
Así mismo cada vez hay menos conciencia del pecado, pues todos se
ufanan y se vanaglorian con él difundiéndolo como prototipo normal de
una moda donde proliferan las relaciones contra natura, a la mujer se le
ha desnudado y prostituido, hecha vil objeto de uso y diversión. Los
hogares se van destruyendo y el adulterio se ve como algo natural. El
divorcio se generaliza, aumenta la drogadicción de todo tipo, no se ora en
familia y las divisiones dentro del hogar se acentúan. Los problemas
económicos se agravan en forma generalizada, afectando a todos los
cristianos para ocuparnos de las cosas de DIOS, se les coarta la
inocencia a los niños. La perversidad ha alcanzado su punto máximo y el
CASTIGO NO puede aplazarse; es por ello que el presente PAPA JUAN
PABLO II se ha dedicado andar de peregrino por todos los países del
mundo, llevando el mensaje y su desesperación ultima de unir y hermanar
a todas las naciones, tendrá que sufrir mucho. Su peregrinar cotidiano
tratarán de truncárselo, ¡ASESINÁNDOLO!, aventura de la cual saldrá
librado para posteriormente morir. La humanidad tendrá que caminar sola,
por un camino estrecho y un fin de sacrificios y penurias.

EL CASTIGO VENDRÁ MUY PRONTO. El tiempo se ha terminado y el
momento fatal de las tribulaciones ha llegado para todos.

El mensaje de FÁTIMA lo dice a la letra y es muy claro:

La mitad de la humanidad SERÁ HORRENDAMENTE DESTRUIDA,
estamos cerca del último día, como del último minuto, LA CATASTROFE
ya se aproxima. MUCHAS NACIONES DESAPARECERÁN DE ESTA
TIERRA PRIMERAMENTE, Dios dejará ver indicios de su castigo,
permitiendo que todos los fenómenos naturales se alteren sobre la tierra y
que son los que hoy en día estamos viviendo; Grandes granizadas, fríos y
calores demasiadamente extremos, lluvias torrenciales, inundaciones,
terremotos, huracanes, ciclones, todos inclementes dentro de los
periodos de su tiempo que los rige. Estas cosas se seguirán suscitando
hasta antes del año 2000 y el que no crea, los últimos momentos que
nos quedan pongámoslos en practica de la oración, del amor y la caridad
hacia el prójimo y los que no se amen los unos a los otros, como mi hijo
los ha amado, estos no podrán sobrevivir y los que sobrevivan haber
muerto, pues las calamidades que se avecinan son inimaginables. Estas
están siendo preparadas por el TODO PODEROSO como se le dijo la
VIRGEN MARÍA a LUCIA.

¡MIENTRAS TANTO! Un hombre de puesto muy alto, será asesinado y
esto provocará la 3ª. Será una GUERRA FRÍA. Una armada muy
poderosa caminará a través de toda EUROPA devastando todo a su paso;
inmediatamente empezará la GUERRA ATÓMICA, una guerra sin cuartel;
sin ton ni son, todos contra todos y en revuelta. Esta guerra destruirá
todo, y es AQUÍ cuando el aviso; la señal de todo esto será una gran
CRUZ que aparecerá en el cielo iluminándolo todo, durante veinte
minutos. Este aviso prodigioso lo verán todos los humanos, y es cuando
entonces, solo entonces, reconocerán sus pecados, quizás demasiado
tarde. Posteriormente esta CRUZ se descompondrá, produciendo una
intensísima luz blanca que incluso opacará al Sol durante cuatro horas;
muchos morirán tan solo de la impresión. Luego el GRAN CATACLISMO
o TERREMOTO que dejará sentir simultáneamente al filo de la media
noche sacudida que durará ocho horas.

Esto debido a que el eje del planeta se moverá 23 grados de su posición
normal en determinado sentido, volviendo a regresar en sentido opuesto a
su posición original. Esto por ende afectará a toda la TIERRA, será
terrible, parecerá que es el fin de todo, mas aún no es el final, ya que
después del cataclismo sobrevendrán fuertes y ardientes vientos
huracanados procedentes del Sur. Estos derramarán fuego a través de las
nubes, azotando a toda la tierra.

(BIENAVENTURADOS los que se estén preparados con todas sus
oraciones y penitencias, ya que serán purificados por su estado de gracia
y tendrán el Extasis del Milagro).

Inmediatamente, al flagelante viento le seguirán fuertes tormentones, para
luego escucharse al unísono el rugir de diez estremecedores truenos que
golpearán la Tierra con tal fuerza que ésta volverá a temblar. Ésta será la
señal de la gran tribulación. Un manto negro de obscuridad cubrirá todo el
planeta. Esta obscuridad durará 72 horas, o sea tres días y tres noches.

Un gran silencio prevalecerá; debemos darnos cuenta que es la Justicia
Divina la que está golpeando con todo su furor, pues quisimos ser un
Pueblo sin DIOS y perverso, seremos destruidos sin piedad, como los
habitantes de Sodoma y Gomorra de aquella antigüedad (¡y esto que las
perversidades de estas dos ciudades no fueron tan grandes como las de
los seres humanos actuales!).

¿QUÉ HACER CUANDO ESTÉ PASANDO ESTO? … ¡Arrodillarnos! Y
pedir perdón a DIOS, nos lo dice la Santísima VIRGEN. Una lluvia de
fuego se desatará después del Gran Silencio. ¡Que nadie salga de su
Hogar! ¡El que, de un paso afuera perecerá! ¡No miréis afuera! Entender
que es la Voluntad del Señor, y Él no quiere que vean su furia. ¡No dejes
pasar a nadie! Cierra puertas y ventanas, éstas últimas manténlas bien
cubiertas, para que no veas, pues si ves también perecerás.

¿CÓMO ANTICIPARNOS Y SABER DEL INICIO DE ESTE
CATACLISMO?… No nos atormentemos. La VIRGEN SANTÍSIMA SE LO
DIJO A LUCÍA MUY CLARO: que para que estuviéramos preparados para
el momento y pudiéramos "permanecer con vida como hijos benditos de
DIOS, nos daría las siguientes señales: la noche será muy fría, soplarán
fuertes vientos, habrá angustia y desesperación; es aquí cuando deberán
tomar todas las medidas pertinentes de encerrarse en sus casas, pues al
poco tiempo comenzará el GRAN TERREMOTO antes mencionado. Te
suplicamos no vayas a ser curioso, porque también perecerás.

En vez de ello, enciende velas benditas, pues serán las únicas que darán
luz durante esos días de tinieblas; también las Almas Fieles deberán
tener Agua Bendita, que rociarán abundantemente por toda la casa, en
especial en puertas y ventanas, para que el SEÑOR proteja la propiedad
de los elegidos arrepentidos. Los fieles deberán preparar también para
esos días, un Altar Sagrado con un CRUCIFIJO para tenerlo en casa y
pedirle a DIOS a través de él, su infinita misericordia, rogar por el perdón
de nuestros pecados, y pedirle ser salvados del Fuego.

¿CÓMO SABER LA HORA EXACTA CUANDO SE ACABARÁN LAS
TINIEBLAS? LA SANTÍSIMA VIRGEN TAMBIÉN NO LOS DICE: la única
forma de saberlo será con relojes de cuerda, ya que no habrá electricidad.


Después de pasados estos días, el Sol saldrá reluciente. Va a ser como
una bellísima Primavera permanente. Todo estará VERDE. Todo se habrá
Limpiado y Purificado, el Agua va ser CRISTALINA, no habrá más
contaminación, ni en el AGUA, ni en el AIRE, ni en los RíOS; y lo más
importante y hermoso, es que el HOMBRE va a VIVIR de la labranza de
las Fértiles Tierras, va a Trabajar no para sobrevivir, sino por el puro gusto
de AMAR y APOYARSE el uno para el otro. Ya que en este Nuevo Reino
nada les faltará, se vivirá Alabando y Adorando a DIOS por sus infinitos
Favores. SEA PUES ASÍ, QUE TODO SE HA DICHO.

LA VIRGEN NOS PIDE TENER VALOR, PUES ESTÁ ENTRE
NOSOTROS, pero mientras esto suceda nos está pidiendo que creamos
en sus palabras y llevemos el mensaje a los demás, a nuestros
familiares, a nuestros amigos y a todas las almas del mundo, ahorita que
aún nos queda el tan escaso tiempo.

"Los que no transmitan mi mensaje, se harán responsables por el gran
número de almas que se pierdan por ignorancia. Recen en familia mi
Rosario, hagan Penitencia y Sacrifíquense para alcanzar la protección del
Cielo, y yo los haré morir en paz para que puedan entrar benditos en el
otro mundo. Deseo que todos los fieles vayan a la Iglesia cada primer
Viernes y cada primer Sábado de cada mes, se confiesen y comulguen
para que así, de esta forma, algo de este mundo, se salve de la TOTAL
destrucción. Enseñen a Rezar a todos los niños, porque cuando se
presenten los días de Tinieblas, los Rezos de los niños van a ser muy
milagrosos, serán la misma de las Tinieblas.

"Quiero decir a los Sacerdotes también el mensaje siguiente: ellos
tendrán la responsabilidad de avisar a los feligreses acerca de estos días,
y de animarlos a la CONVERSIÓN y a que no se tenga miedo,
sencillamente advertirlos para que estén preparados. Así mismo quiero
decirle a la gente que ya no estén preocupados por su apariencia física,
por tener trabajo, dinero o poder, o lo que irán a comer mañana, porque
no vale la pena. ¡NO VA Á VALER LA PENA! Pues estas insignificancias,
comparadas con la gran calamidad, ¡NO SON NADA!" .

Los sacerdotes deberán de entregarse a transmitir el mensaje y predicar
sobre el cómo prepáranos para la muerte, es muy importante esto,
deberán predicar sobre la Verdad del Cielo, sobre la Verdad del Infierno, y
sobre las consecuencias del pecado.

Por último, la Virgen nos pidió rezar la siguiente Oración, con mucho
Amor y Respeto, todos los días, mientras que la situación amarga no se
haga presente y que la letra dice así:

Oh, Padre Eterno, en Unión con Vuestro Divino Hijo y el Espíritu Santo,
Por intercesión del Inmaculado Corazón de María, Os suplico destruir el
poder de los espíritus malignos. Arrojadlos a las cavernas del infierno y
encadenadlos allí para siempre.

Tomad posesión de Vuestro Reino, pues ha sido creado Vos Mismo y
justamente Os pertenece.

Padre Celestial, concédenos el Dominio reinante del Sagrado Corazón de
Jesús y del Inmaculado Corazón de María. Acepta Señor, cada uno de
los latidos de mi corazón y cada respiración mía como una repetición de
esta plegaria.

Padre Eterno, Te rogamos con la intercesión de la Santísima Virgen
María, siegues el poder del enemigo y permitas que la Luz de Tu Justicia,
resplandezca. Muéstranos el camino para realizar todos nuestros actos
de acuerdo a Tus Planes Divinos.

Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, Tu Hijo, que siendo Dios vive
y Reina Contigo en la Unidad del Espíritu Santo. Amén
 
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