El concierto del Dangerous Tour en el Calderon fur mi segundo concierto de Michael Jackson tras el del Bad Tour en el verano del 88, tambien en el Vicente Calderon.
Yo no tengo ninguna foto de aquel dia, pero recuerdo que, las 4 o 5 horas previas al concierto, en la cola del estadio, esperando a que abrieran las puertas, fueron de lo mas agobiante que he vivido en mi vida. Miles de personas apelotonadas, yo personalmente no podia ni levantar los brazos porque los tenia pegados al cuerpo y era incapaz de moverme por la gran cantidad de gente que habia.
Cuando por fin abrieron las puertas, recuerdo que todos corrimos como posesos a conseguir un sitio estrategico en las primeras filas, lo cual consegui, no sin problemas.
Despues de un buen rato aparecio la telonera, Rozalla, aquella chica que cantaba "Are you ready to fly", aunque en aquella ocasion lo combinaba con "Are you ready for Michael".
Y, por fin, tras varias horas de espera, se apagaron las luces del escenario y comenzaron a sonar los acordes del inimitable "Carmina Burana" de Carl Orff. En ese momento, la emocion se apodero de mi por completo. Cuando aparecio Michael saltando desde debajo del escenario, tras una explosion de humo, el publico estallo de histeria. Yo, por alguna razon, no. Me quede quieto y pasmado como un tonto. Y eso que ya era la segunda vez que lo veia en directo, y la primera no habia parado de moverme durante todo el concierto!!
Recuerdo que durante todo el concierto la gente gritaba (mas bien chillaba), cantaba, bailaba, etc. y yo me pase las 2 horas largas de concierto inmovil, impavido, como en otro planeta, con el corazon a 1000 por hora y el cerebro y el corazon repleto de emociones, pero incapaz de articular palabra alguna, o siquiera moverme. Quiza fueron los efectos secundarios de los agobios que sufri en larga cola para poder entrar, pero asi fue como sucedio. Mis 2 amigos me miraban y decian, "reacciona!!". Pero no habia forma.
De cualquier forma, que duda cabe que disfrute como un enano, y ha sido sin duda uno de los dias que por supuesto jamas olvidare mientras viva. He estado en otros conciertos de MJ despues, pero jamas he sentido dentro de mi lo que experimente aquel dia, esa sensacion de estar tan ensimismado con lo que ves, que te es imposible tan siquiera mover un dedo.