Comentarios al teléfono de Geert Van Moorter, médico belga que trabaja en Bagdad:
"Aquí hemos oído hoy de nuevo historias horribles sobre el comportamiento de los soldados americanos: Heridos que hacen signos en vano a los tanques americanos para ser transportados; Personal médico que ya no osa acercarse a los controles americanos para pedir que les dejen pasar con heridos...
Todo iraquí que se acerca de los militares americanos corre el riesgo de recibir un balazo. Se ven obligados a pedirnos a nosotros, los extranjeros, que vayamos a negociar con los soldados americanos el paso de heridos...
Un periodista del London Mail me ha contado hasta qué punto está harto de las tropas americanas. Los había visto abatir a dos iraquís desarmados, sin que hubiera habido un motivo. ¡Mataron también a sangre fría a un hombre que se precipitó para ayudar a los otros dos!
"Hacen como en Vietnam", suspiró el periodista, "disparan sobre todo lo que se mueve". He hablado con un médico del ejército norteamericano. ¿Y sabéis lo que me ha respondido? "Hay que comprender estos actos; son chicos jóvenes, tienen un poco de miedo, y aprietan rápidamente el gatillo".
Aquí los militares americanos gozan de una impunidad total; se lo pueden permitir todo y el riesgo que corren de ser juzgados es nulo. "¡Nadie es perfecto!", dicen entonces. O bien: "Se trata de un 'ataque preventivo' contra el peligro amenazador del uso de armas de destrucción masiva por parte de Sadam". Armas que, hay que recordarlo, ¡ni los inspectores ni las tropas americanas de ocupación han podido encontrar!
De este modo, el ametrallamiento de una ambulancia constituye seguramente también un "ataque preventivo "porque... ¡podría haber explosivos en esa ambulancia! Que ha habido dos muertos y tres heridos graves...? ¡bah! ¡Son "daños colaterales!"
Los soldados americanos se pasean por el sector con increíble arrogancia. Nos vemos obligados a contenernos para no enfrentarnos constantemente a ellos. Los mandamos a paseo regularmente. Como esos militares que estaban troceando una estatua de Sadam para llevársela de recuerdo a casa. Les he gritado: "¡Eh! ¡Sois unos verdaderos héroes, guay, tíos, lo que hacéis es cojonudo!" Los imbéciles se han pensado que hablaba en serio, y me han mirado con un aire de reconocimiento. "¡Sí, es terrible lo que hacéis! ¡Acribilláis un hospital a balazos, hacéis centenares de víctimas civiles, dejáis que se saquee los hospitales y que los heridos mueran! ¡Vamos, que sois unos verdaderos héroes!."
Les ha llevado un rato comprender que me burlaba de ellos, con sus trozos de estatua de Sadam en la mano, y que al mismo tiempo les echaba en cara la sangre que tienen en las manos. Al final, se han puesto a reír, pero mosqueados. A mí, interiormente, ya me hacía falta reírme a carcajadas".
Extraido de Indymedia Madrid: http://madrid.indymedia.org
"Aquí hemos oído hoy de nuevo historias horribles sobre el comportamiento de los soldados americanos: Heridos que hacen signos en vano a los tanques americanos para ser transportados; Personal médico que ya no osa acercarse a los controles americanos para pedir que les dejen pasar con heridos...
Todo iraquí que se acerca de los militares americanos corre el riesgo de recibir un balazo. Se ven obligados a pedirnos a nosotros, los extranjeros, que vayamos a negociar con los soldados americanos el paso de heridos...
Un periodista del London Mail me ha contado hasta qué punto está harto de las tropas americanas. Los había visto abatir a dos iraquís desarmados, sin que hubiera habido un motivo. ¡Mataron también a sangre fría a un hombre que se precipitó para ayudar a los otros dos!
"Hacen como en Vietnam", suspiró el periodista, "disparan sobre todo lo que se mueve". He hablado con un médico del ejército norteamericano. ¿Y sabéis lo que me ha respondido? "Hay que comprender estos actos; son chicos jóvenes, tienen un poco de miedo, y aprietan rápidamente el gatillo".
Aquí los militares americanos gozan de una impunidad total; se lo pueden permitir todo y el riesgo que corren de ser juzgados es nulo. "¡Nadie es perfecto!", dicen entonces. O bien: "Se trata de un 'ataque preventivo' contra el peligro amenazador del uso de armas de destrucción masiva por parte de Sadam". Armas que, hay que recordarlo, ¡ni los inspectores ni las tropas americanas de ocupación han podido encontrar!
De este modo, el ametrallamiento de una ambulancia constituye seguramente también un "ataque preventivo "porque... ¡podría haber explosivos en esa ambulancia! Que ha habido dos muertos y tres heridos graves...? ¡bah! ¡Son "daños colaterales!"
Los soldados americanos se pasean por el sector con increíble arrogancia. Nos vemos obligados a contenernos para no enfrentarnos constantemente a ellos. Los mandamos a paseo regularmente. Como esos militares que estaban troceando una estatua de Sadam para llevársela de recuerdo a casa. Les he gritado: "¡Eh! ¡Sois unos verdaderos héroes, guay, tíos, lo que hacéis es cojonudo!" Los imbéciles se han pensado que hablaba en serio, y me han mirado con un aire de reconocimiento. "¡Sí, es terrible lo que hacéis! ¡Acribilláis un hospital a balazos, hacéis centenares de víctimas civiles, dejáis que se saquee los hospitales y que los heridos mueran! ¡Vamos, que sois unos verdaderos héroes!."
Les ha llevado un rato comprender que me burlaba de ellos, con sus trozos de estatua de Sadam en la mano, y que al mismo tiempo les echaba en cara la sangre que tienen en las manos. Al final, se han puesto a reír, pero mosqueados. A mí, interiormente, ya me hacía falta reírme a carcajadas".
Extraido de Indymedia Madrid: http://madrid.indymedia.org