El sueño y lo desconocido. Si hay algo en común entre este término es su sentido paralelo de algo no fijo, de algo que está en proceso. Lo desconocido tiende siempre al conocimiento, y los sueños se mueven hacia cierto tipo de materialización despierta.
Ahora bien, la responsabilidad no es una palabra con letras mayúsculas que nos imponga una serie de reglas, sino una relación entre nuestras emociones, nuestros pensamientos y nuestros actos. Decir que "en los sueños comienza la responsabilidad" significa precisamente que:
Es un moviento de lo ya conocido a lo desconocido, y un movimiento del sueño hacia lo real. Es también un reconocimiento de lo desconocido y una dislocación y de lo real.
"en los sueños comienza la responsabilidad".
Creo que los sueños se mueven de la misma manera que funcionan las estructuras retóricas en un poema. En ellos tenemos algo muy cercano a narrativas, figuras y tópicos: lo contrario a un discurso lógico. Aparte de todas las teorías sobre el sueño que conozcamos, del psicoanálisis a la neurología y de los mitos a la experiencia diaria, en ellos organizamos experiencias que no son enteramente racionales.
Un sueño nos está diciendo algo a nosotros mismos, y lo podemos interpretar de distintas maneras.
Si seguimos sus propias olas misteriosas nos acercamos a algo que está en nosotros que no puede ser descrito en su totalidad de una manera lógica. Los sueños tienen que ver con las emociones, y estas no son traducibles, sólo experimentadas y, si alcanzamos la responsabilidad, conocidas. Los sueños son el origen de una actitud verdaderamente responsable hacia nuestras propias vidas. La manera en la que lidiamos con ellos es crucial para entender nuestra situación en un momento particular.
Ahora bien, la responsabilidad no es una palabra con letras mayúsculas que nos imponga una serie de reglas, sino una relación entre nuestras emociones, nuestros pensamientos y nuestros actos. Decir que "en los sueños comienza la responsabilidad" significa precisamente que:
ser responsable es tomar nuestras vidas emocionales en nuestras propias manos.
Responsabilidad no significa culpa. La culpa es una falta continua, mientras que la responsabilidad es la confrontación con lo que falta.
"no fracasamos por culpa de nuestros sueños sino por no soñarlos con suficiente intensidad".
Ernst Jünger
Esta subraya el fuerte vínculo entre el sueño y la realidad. También, y más importante aún, muestra que este vínculo no es algo dado, sino algo que tiene que trabajarse y actuarse. Por eso es que no es únicamente una experiencia estética, sino también una experiencia moral. Ernst Jünger
Es un moviento de lo ya conocido a lo desconocido, y un movimiento del sueño hacia lo real. Es también un reconocimiento de lo desconocido y una dislocación y de lo real.