Son tiempos de guerra, de puro conflicto. La estupidez gobierna el planeta, sobre todo la de Bush y sus amigos. De momento podemos contarlo...
Por otro lado, España se sitúa como el segundo país de la Unión Europea en personas infectadas de Sida. Francisco Parras sigue sin ser cesado al frente de un Plan Nacional contra las drogas que sólo sirve para hacer estadísticas y ver lo mal que estamos. ¿Donde está la educación sexual en las escuelas? ¿Qué hay de la concienciación de los jóvenes? Podrían tomar nota del "Barrio Sésamo" sudafricano, donde un nuevo personaje seropositivo rompe las reglas ultraconservadoras de la televisión.
Mientras, a la nueva ministra del ramo, Ana Pastor, si le preguntan le parecerá que qué le vamos a hacer... Podía pedirle a Federico Trillo, a quien lo gay ya le toca en la casa-cuartel, los fondos que piensa pillar de los presupuestos de Ciencia y Tecnología, que son de vergüenza. ¿Por qué no invertir más en vacunas para la segunda población más vulnerable de la Unión Europea?
Aunque mande mucho la moral más inmoral, ya hay quienes sueñan cambiarla desde dentro, como la corriente católica "Somos Iglesia" que aprueba la ordenación sacerdotal de mujeres, castidad opcional y aceptación de la homosexualidad (vaya cambio! ). Pero es una pena que pudiendo estar monseñor Gea, los pocos obispos que la integren sean latinoamericanos.
De cara a las elecciones municipales, Alberto Ruiz Gallardón promete no perder de vista el castizo voto gay-lésbico. Y para terminar, las odiosas revistas del corazón no dejan de casar al Príncipe Felipe con la primera mujer que se le acerca, y así, lo único que van a conseguir es que termine cambiándose de acera...
Por otro lado, España se sitúa como el segundo país de la Unión Europea en personas infectadas de Sida. Francisco Parras sigue sin ser cesado al frente de un Plan Nacional contra las drogas que sólo sirve para hacer estadísticas y ver lo mal que estamos. ¿Donde está la educación sexual en las escuelas? ¿Qué hay de la concienciación de los jóvenes? Podrían tomar nota del "Barrio Sésamo" sudafricano, donde un nuevo personaje seropositivo rompe las reglas ultraconservadoras de la televisión.
Mientras, a la nueva ministra del ramo, Ana Pastor, si le preguntan le parecerá que qué le vamos a hacer... Podía pedirle a Federico Trillo, a quien lo gay ya le toca en la casa-cuartel, los fondos que piensa pillar de los presupuestos de Ciencia y Tecnología, que son de vergüenza. ¿Por qué no invertir más en vacunas para la segunda población más vulnerable de la Unión Europea?
Aunque mande mucho la moral más inmoral, ya hay quienes sueñan cambiarla desde dentro, como la corriente católica "Somos Iglesia" que aprueba la ordenación sacerdotal de mujeres, castidad opcional y aceptación de la homosexualidad (vaya cambio! ). Pero es una pena que pudiendo estar monseñor Gea, los pocos obispos que la integren sean latinoamericanos.
De cara a las elecciones municipales, Alberto Ruiz Gallardón promete no perder de vista el castizo voto gay-lésbico. Y para terminar, las odiosas revistas del corazón no dejan de casar al Príncipe Felipe con la primera mujer que se le acerca, y así, lo único que van a conseguir es que termine cambiándose de acera...
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