Lo siento mucho por todos los afectados; es muy triste que todavía haya quien crea en la violencia -del tipo que sea- para llegar a algo, sea lo que sea ese objetivo, político o personal o laboral o lo que sea, grande o pequeño, cualquier cosa que se quiera hacer, se puede hacer sin recurrir a algo tan feo como hacerle daño a los demás. Ojalá todo vuelva a su sitio para todos, y todos estemos contentos con nosotros mismos y con los demás...
Lo que a veces pienso es... a ver, no me gustaría que nadie empiece a ladrar sacando conclusiones o suposiciones que no son, y mis disculpas si es eso lo que provoco. Solo lo expongo de forma simple y llana, dando a conocer mi postura general, pero sin más pretensiones que exponerlo:
Todo el mundo -es un decir- está harto de la violencia, el llamado conflicto vasco, etc. Los políticos se lamentan por los muertos, se busca una solución, se invierte mucho dinero en investigar a gente, encarcelarlos, etc... y habrá quien se plantee si realmente merece la pena. Me refiero: Yo muchas veces esto lo veo como un atraco a un banco, donde hay atracadores matando rehenes, vale? En un caso así, puede que todo el dinero de la caja fuerte no sirva para pagar las vidas de esas personas, así que lo más sensato tal vez sea preguntarle a los atracadores qué quieren, cuál es su objetivo. Si lo que quieren es el dinero, mejor dárselo para evitar males mayores. Es más importante una sola vida que todo el dinero, no?
Pues de la misma manera, realmente merece la pena tener que seguir lamentando muerte tras muerte? Qué quiere ETA? La independencia de Euskadi. ¿Realmente sería tan espantosamente horrible que los estados español y francés renunciaran a una pequeña parte de su territorio -porque es pequeña- si con ello se asegura que ya no habrá más tiros, más bombas, más secuestros, más miedos...?
Repito, es una opción que al menos a mí me parecería de lo más sensato y digna de valoración. De hecho, me sorprende que los políticos ni siquiera se planteen remotamente la posibilidad de pensar en esa renuncia, con lo fácil que a mí me parece...
Mucha gente seguramente dirá que eso es rendirse, que es caer bajo, que sería una derrota, una vergüenza... No sé, si yo fuera uno de esos rehenes en un atraco, o el director el banco... no sé, yo humildemente pienso que Euskadi -como territorio, como sector de un mapa- no tiene apenas valor sopesando el valor de todas las personas que han sufrido. Yo no vería una cesión del territorio vasco como una derrota o una humillación, ni tampoco una victoria por parte de quienes crean en la violencia, sino como una opción que debería contemplarse si lo que verdaderamente valoramos más es la vida de esas personas. Pienso que las cosas bonitas del País Vasco, su cultura, su idioma, su simpatía, sus tradiciones, su naturaleza... tienen un valor maravilloso, igual que tanto Estados Unidos, Afganistán, Corea del Norte, Israel o Irak tienen cosas estupendas y valiosas, dignas de admiración por parte de todos, por encima de a qué estado político pertenezcan. Euskadi tiene una gastronomía y una música tradicional (por decir un par de cosas) muy interesantes. ¿Realmente asegurarse la afirmación de que esas cosas pertenecen a España y/o a Francia es algo TAN importante, TAN inquebrantable como para seguir manteniéndola a pesar de que eso cuesta tantas vidas y tanta desgracia? A mí me gusta igual escuchar una txalaparta pensando que es algo tradicional de mi país que de otro país detrás de una frontera...
¿Que donde estaría entonces el castigo para quienes han hecho tanto daño? Eso ya se vería. Yo tiendo a pensar que las cosas tarde o temprano acaban en su sitio por su propia naturaleza. Ya se pondrían las medidas adecuadas y a la larga creo que sería un asunto secundario en comparación con poder decir que ya hay una organización violenta menos en el mundo. ¿A pesar de haberse perdido parte del territorio y haya aparecido otro país? Pues no sé... a mí me parece que la vida de un ser humano está por encima de cualquier orgullo patrio.
Si una pierna se empieza a gangrenar y se pudre, podremos valorar muchísimo esa pierna y lamentarnos ante la visión de poder perderla, pero es mejor plantearse la posibilidad de amputarla, si con eso evitamos que se pudra el cuerpo entero y muera del todo.