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FBI revela la verdad de los OVNIs: El incidente Roswell parece ser cierto

Roswell



En las cercanias de Roswell, concretamente en Corona, estado de Nuevo Mexico, el 3 de julio de 1947 un objeto desconocido explota produciendo extraños escombros en una finca rural propiedad de Mac Brazel.


Supuesto alien calcinado
Dias despues, el area fue inspeccionada y bloqueada por militares de la base de Roswell, el Coronel William Blanchard participa a la prensa del hallazgo de un platillo volante, pocas horas despues cuando ya la noticia ha trascendido internacionalmente, un desmentido oficial es emitido desde la comandancia de Fort Worth exhibiendo otros restos e identificandolos como pertenecientes a un globo metereologico.

Los habitantes de Roswell no creyeron esto y lo hicieron publico. Incluso surgieron testimonios de personas que no solo vieron a la nave caer, sino tambien de camiones que remolcaba dicho aparato hacia un lugar desconocido. Estas afirmaciones confirmaron los avistamientos reportados dias antes del incidente en Roswell, cuando el piloto civil Kenneth Arnold y parte de la tripulación de un vuelo de United Airlines avistaron tambien platillos voladores. El primero lo hizo en las cercanías del Monte Rainier, en la misma capital de Estados Unidos.

Décadas mas tarde el oficial de inteligencia Jesse Marcel, subordinado de Blanchard, revelara la verdad de los hechos. Las noticias sobre el suceso son reproducidas por los principales diarios del mundo.

Entretanto nuevos hechos se suceden bajo secreto militar, horas mas tarde son descubiertos mas restos de la nave y su tripulacion, un funcionario federal y varios civiles se convierten en incomodos testigos. Los nuevos escombros y los cadaveres son llevados finalmente al Hospital Militar de Roswell y de ahi mas tarde por avion a la Base de Forth Worth y luego a Dayton, Ohio para ser sometidos a examenes que eventualmente incluirian sus autopsias. En Roswell durante el deposito transitorio y reconocimiento de los cadaveres otros civiles entre ellos un proveedor de servicios funebres y una enfermera de la base han sido involuntarios testigos de los hechos y se veran comprometidos por la inteligencia militar, sus testimonios ganaran estado publico nuevamente en 1991.

La reconstruccion y divulgacion de estos hechos es extraoficialmente impedida bajo distintos tipos de presiones, no obstante trascenderan decadas mas tarde por medio del testimonio de testigos directos y obtendran una difusion limitada a traves de medios de prensa alternativos.


http://www.youtube.com/watch?v=QzmmlaZ9b9I&feature=player_embedded
 
EX ASTRONAUTA: "EL HOMBRE NO ESTÁ SOLO EN EL UNIVERSO"
ABR 22, 2009

Lanzamiento del Apolo 14 en enero 31 del 1971
El ex astronauta Edgar Mitchell, quien fué parte de la misión Apolo 14 a la luna, afirmó el 20 de abril del 2009 que sí existe vida extraterrestre, y que la verdad está siendo ocultada por los Estados Unidos y otros gobiernos.

Mitchell pronunció su discurso durante una aparición en el National Press Club, tras la conclusión de la quinta Conferencia anual "X", una reunión de activistas e investigadores del fenómeno OVNI que estudian las posibilidades de la existencia de vidas extraterrestres en el universo. "Desde hace mucho tiempo la humanidad se pregunta si estamos solos en el universo. Pero es sólo en nuestros tiempos cuando finalmente hemos podido colectar pruebas y evidencias. No, no estamos solos", dijo Mitchell.

"Nuestro destino, en mi opinión -y bien pudiéramos empezar con él- es convertirnos en parte de la comunidad interplanetaria. Debemos estar dispuestos a llegar más allá de nuestro planeta y más allá de nuestro sistema solar para encontrar lo que realmente está pasando allá afuera."

Mitchell creció en Roswell, Nuevo México, sitio que muchos creyentes sostienen fué escenario de un accidente donde un OVNI (Objeto Volador No Identificado) se estrelló en el año 1947. Dijo que los residentes de su ciudad natal "fueron amenazados y forzados a no hablar de esta experiencia por parte de las autoridades militares en aquellos tiempos. Testigos y residentes del área fueron advertidos de que tendrían 'graves consecuencias' si así lo hicieran."


El general Roger Ramey (de rodillas) y el jefe de personal Col. Thomas Dubose posan con un globo meteorológico, 8 de julio de 1947, Fort Worth, Texas. Muchos dicen que el documento señalado en la mano de Ramey confirma la recuperación de una nave extraterrestre.

Mitchell reveló sin embargo, que estos testigos "no querían ir a la tumba con sus historias. Ellos querían contarla a alguien fiable. Y siendo un niño local, y tras haber ido a la luna ya de adulto, me consideraron lo suficientemente confiable como para susurrarme al oído sus historias particulares acerca del suceso." Aproximadamente hace 10 años, alegó Mitchell, fué cuando finalmente obtuvo una cita en el Pentágono para discutir lo que le habían dicho.


Un almirante anónimo que trabaja para la Junta de Jefes de Estado Mayor se comprometió a descubrir la verdad detrás de la historia de Roswell, dijo Mitchell. La historia de que un OVNI se estrelló en Roswell "se ha confirmado", pero al almirante le fué negado el acceso al "tratar de entrar en el círculo interno de este asunto." El mismo almirante, Mitchell reclama, ahora niega la historia.


El Roswell Daily Record, Julio 8, 1947 anunciando la captura de un "platillo volador"
"Insto a todos los que tienen dudas: Lean los libros, empiecen a entender lo que verdaderamente está pasando. Porque realmente no hay dudas de que estamos siendo visitados. El universo en que vivimos es mucho más maravilloso, emocionante, complejo y vasto de lo que nunca hemos podido saber hasta este punto en el tiempo" concluyó Mitchell.

Un portavoz de la NASA negó cualquier encubrimiento. "La NASA no realiza un seguimiento de OVNIS. La NASA no participa en ningún tipo de encubrimiento sobre la vida de extraterrestres en este planeta o en cualquier otro lugar, dijo Michael Cabbage el pasado lunes.

El debate sobre lo que pasó en Roswell continúa. En 1994 la Fuerza Aérea de los EE.UU. dijo en un comunicado oficial, que las partes recuperadas en 1947 eran restos y fragmentos de un globo, y que el mismo, era parte de un proyecto 'secreto' del gobierno.

Stephen Bassett, jefe del Grupo de Investigación Paradigma (PRG), y anfitrión de la Conferencia X, dijo que la verdad sobre los extraterrestres siempre ha sido ocultada porque es un tema políticamente explosivo.

Fuente: CNN


 
ESTA INFORMACION ESTA RECOPILADA POR MI...
ES MAS DETALLADA! DISFRUTEN!


El caso Roswell por oscar gales


En las cercanías de Roswell, en Corona, estado de Nuevo México, el 3 de julio de 1947 un objeto desconocido explotó produciendo extraños escombros en una finca rural propiedad de Mac Brazel, el área fue inspeccionada días después por militares de la Base Roswell y mas tarde bloqueada, el Coronel William Blanchard informaría a la prensa sobre el hallazgo de un platillo volador no identificado; pocas horas después cuando ya la noticia había trascendido internacionalmente, un desmentido oficial es emitido desde la comandancia de Fort Worth exhibiendo otros restos e identificándolos como pertenecientes a un globo metereológico. Décadas mas tarde el oficial de inteligencia Jesse Marcel, subordinado de Blanchard, revelaría la verdad de los hechos. Las noticias sobre el increible suceso fueron reproducidas por los principales diarios del mundo.




Entretanto nuevos hechos se sucedieron bajo secreto militar; horas mas tarde fueron descubiertos mas restos de la nave y su tripulación, un funcionario federal y varios civiles se conviertieron en incómodos testigos. Los nuevos escombros y los cadáveres fueron llevados finalmente al Hospital Militar de Roswell y luego trasladados por avión a la Base de Forth Worth y finalmente a Dayton, Ohio para ser sometidos a exámenes que eventualmente incluirían sus autopsias. En Roswell durante el depósito transitorio y reconocimiento de los cadáveres otros civiles entre ellos un proveedor de servicios fúnebres y una enfermera de la base fueron testigos involuntarios de los hechos y se verían comprometidos por la inteligencia militar; Sus testimonios, trascenderían publicamente en el año 1991.

Horas antes del fenómeno Roswell
El día 3 de julio , pocas horas antes de los sucesos de Roswell un avión C-54 del Ejercito de los EE.UU. que había partido en un vuelo nocturno desde las islas Bermudas con destino a Miami desapareció misteriosamente sobre el océano. La amplia búsqueda que iniciaron horas más tarde las unidades militares y los guardacostas no arrojarían resultados postivos y una semana mas tarde la nave y su tripulación serían dadas por perdidas. Un mes antes otro avión C-54 militar se había perdido misteriosamente en la zona de Mount Rainier y las autoridades, incluso, en éste hecho, habrían ofrecido una recompensa de 5,000 dólares a quienes pudieran aportar información relevante sobre la nave. Kenneth Arnold quien se dedicaba a esta búsqueda, no pudo resolver el enigma. Estos extraños sucesos abrieron las puertas a otro enigma aun mayor.

Los avistajes aéreos en Monte Rainier
Pocos días antes de los sucesos de Roswell, el 24 de junio el piloto civil Kenneth Arnold reportó el avistaje en vuelo de varios objetos voladores no identificados en las cercanías del Monte Rainier en el estado de Washington, su testimonio sería corroborado por el avistaje de un fenómeno similar pocos dias mas tarde por parte de la tripulación de un vuelo de United Airlines. Arnold describió la apariencia de los objetos como la de “platos voladores”




Un Secreto de Estado
Los militares se hicieron cargo del territorio del accidente ovni expulsando a los civiles y exigiéndoles el más completo silencio acerca del incidente. Jesse Marcel y el capitán Cavitt, del organismo de contrainteligencia CIC, llegaron al Foster Ranch la noche del domingo y pasaron la noche en bolsas de dormir en una pequeña construcción. Por la mañana, fueron llevados por Brazel al lugar donde éste había encontrado el material. En 1979, Marcel describió su experiencia:

“Cuando llegamos al lugar del accidente, me sorprendió la vastedad de la zona dañada. No era una cosa que hubiera dado contra el suelo o explotado en tierra. Era algo que debió de explotar en el aire, viajando quizás a una alta velocidad. No sabemos. Pero los fragmentos estaban desparramados en una zona de 1.200 metros de largo, y bastante ancha, de decenas de metros de ancho. Así que procedimos a recoger todos los fragmentos que pudimos encontrar y los cargarnos en nuestro jeep. Me resultaba bastante obvio, por mi actividad, que eso no se trataba de un globo meteorológico, ni de un avión ni de un misil. Pero lo que era, no lo sabíamos. Simplemente recogimos los fragmentos. Era algo que nunca había visto antes, y yo estaba bastante familiarizado con todas las actividades aéreas. Cargamos completamente el jeep, pero no me sentí satisfecho. Le dije a Cavitt: -Lleve este vehículo de vuelta a la base, que yo voy a volver allí y recoger todo lo que entre en mi auto-, cosa que hice. Pero en total sólo recogimos una pequeña parte del material que estaba allí desparramado”.

Fotos Secretas del incidente de Roswell
Se conocen pocos nombres de militares y otras personas que visitaron los sitios, y los que sí se conocen, en la mayoría de los casos no se han mostrado dispuestos a hablar. Con una fascinante excepción. En noviembre de 1990, Stanton Friedman pudo coronar meses de negociaciones entrevistando a cierta persona: un hombre que dice, en una forma muy creíble, que estuvo allí. F.B. era un fotógrafo de la Fuerza Aérea que cumplía funciones en la estación naval aeronáutica de Anacostia, en la ciudad de Washington. Un día de comienzos de julio de 1947, él y otro fotógrafo, A.K. fueron embarcados en un bombardero B?25 y llevados al campo aéreo de Roswell. F.B. le contó a Friedrnan:

“Una mañana nos dijeron: -Hagan sus valijas. Tendremos cámaras allá, listas para ustedes-. No sabíamos adónde íbamos. Mi cámara Speed Graphic 4×5 estaba en el avión, y después de unas pocas horas de vuelo, llegamos a Roswell. Subimos a un auto del personal, y parte del equipo que trajimos fue cargado en camiones, viajamos alrededor de una hora y media hacia el norte. Llegamos a uno de los tres sitios de aterrizajes violentos en la zona de Corona, y había una cantidad increíble de gente, en una tienda de campaña cerrada. Prácticamente no se podía ver nada dentro de la carpa. Me dijeron: -Prepare la cámara para tomar una fotografía a cinco metros- A.K. se subió a un camión que se dirigía al lugar donde estaban recogiendo fragmentos.

Había toda clase de metal por ahí. Y nos gritaban lo que debíamos hacer: -¡Tome esto, tome lo otro!- Pude ver cuatro cuerpos cuando el flash hizo explosión, pero estaba casi enceguecido porque era un día tan lindo, tan soleado… Uno entraba en esa tienda de campaña, que estaba terriblemente oscura, y todo lo que se fotografiaba eran cuerpos. Cuerpos que estaban debajo de una lona que ellos levantaban, y uno tomaba la foto; quitábamos el bulbo del flash, poníamos otro, tomábamos otra foto y le dábamos a un oficial el carrete de película (cada carrete tenía sólo dos hojas de filme cortado de 10 x 12 centímetros), y entonces pasábamos a la toma siguiente. Calculo que habría entre diez y doce oficiales y, cuando yo me preparé para entrar, salieron todos. La tienda de campaña medía alrededor de 6 x 9 metros. Los cuerpos parecían estar colocados sobre un lienzo encerado.

El tipo que daba todas las instrucciones agarraba una lámpara de flash y se ponía en un lugar: -¿Ven esta lámpara’, decía. – ¡Sí, señor!. – ¿Están enfoco con ella – ¡Sí, señor – Tomen una foto de esto- Entonces sacaba la lámpara. Nos , movíamos en círculo, tomando fotos. Me parecía que los cuerpos eran idénticos: oscuros, delgados, con una cabeza demasiado grande. Yo torné unas treinta fotos. Creo que tenía unos quince carretes. Había un olor raro allí. A.K. volvió en un camión que estaba cargado de escombros. Un lote de fragmentos que antes no estaban ahí sobresalían de la caja. En el camino de vuelta al aeropuerto (Roswell), nos dijeron que olvidáramos todo lo que habíamos visto. A eso de las cuatro de la mañana siguiente, nos despertaron, desayunamos y subimos al B?52. Una vez en Anacostia, un capitán de corbeta terminó de “lavarnos el cerebro” (tanto a F.B. como a su amigo A.K. se les dijo claramente que lo que fuera que creyeran haber visto en Nuevo México, no lo habían visto jamás).”



Habría cantidades de hombres involucrados de una forma u otra en la recuperación de los cuerpos y los restos de los aparatos accidentados en tres sitios de la zona de Corona: el campo de escombros descubierto primeramente por Brazel, el lugar donde aterrizó el aparato y el punto donde fueron encontrados los cuerpos en sus “cápsulas de escape” y donde suponemos que F.B. tomó sus fotos. Pocos de estos hombres han podido ubicarse, y la mayoría habría muerto mucho antes de que alguien pensara en acercarse a ellos para entrevistarlos.

En cuanto al aterrizaje violento en las Planicies de San Agustín, 240 kilómetros al oeste, la llegada de los militares fue observada por alrededor de doce civiles: Gerald Anderson y su familia, un grupo de estudiantes de arqueología o geología con su profesor, y el ingeniero gubernamental Barnett. De éstos, Barnett les contó a varios amigos algo de esta experiencia, y Anderson entró en grandes detalles sobre lo ocurrido cuando aparecieron los militares mientras él y los otros trataban de darle algún sentido a esta traumatizarte experiencia. Según un amigo cercano de Barnett, Vern Maltais, aquél habría dicho: “Mientras mirábamos los cuerpos, un oficial militar llegó en un camión con el chofer y tomó el control. Le dijo a todo el mundo que el ejército se haría cargo de la situación y que abandonaran el lugar. Otros militares llegaron y acordonaron la nona. Nos dijeron que nos fuéramos y que no habláramos con nadie sobre lo que habíamos visto, que era nuestro `deber patriótico’ permanecer en silencio”.

Gerald Anderson, en su entrevista de setiembre de 1990, describió estos hechos con énfasis: “Los soldados nos indicaban por dónde ir retrocediendo y caminaban al lado del auto. Cuando llegamos a la ruta, vimos que hormigueaba de soldados. Había barricadas y de todo. Y la última vez que vimos al profesor Buskirk y sus estudiantes, estaban parados allí hablando con otro soldado (Glenn dijo que parecía un oficial) y Buskirk señalaba hacia el sitio del aterrizaje. A nosotros nos hicieron tomar hacia el este por la ruta a Datil. Y nos gritaron: `¡No paren, no vuelvan!’. Cuando miré para atrás y vi el plato volador clavado en el suelo, justo cuando dimos la vuelta a los árboles, había un montón de soldados y estaban todos alrededor del aparato, pero ya no pude ver a la tripulación (del plato volador) que antes estaba en el suelo. Estaban llegando más vehículos y maquinaria y parando allí. Como el camión que había llegado primero. “Los soldados se movían alrededor.

Estaban haciendo muchas tareas raras y tirando una especie de cables. También parecía que ponían algo en el suelo, y sacaban cosas de los camiones. Un montón de ellos simplemente estaba parado ahí. Pero la actividad era frenética. Cuando entramos en la ruta principal, ya habían puesto una barrera y estaban trayendo cosas, y me acuerdo que había un jeep que arrastraba un trailer con un motor, como un generador. Cuando estábamos en la ruta, Ted preguntó a un soldado: -¿Podemos volver hasta el almacén y comprar algo para tomar?- ¡No! ¡Váyanse para allá! – El soldado apuntó hacia el este. Fue activo y directo.- Una vez que los Anderson fueron ahuyentados del sitio del accidente y ya estaban camino a casa, los militares pudieron proceder como querían sin nadie que los observara. Los materiales que retiraron fueron llevados con rumbo desconocido, si bien se ha sugerido como posible destino White Sands/Alamogordo, y también Los Álamos y la Base Sandia. Estos lugares tienen instalaciones científicas que permitirían analizar los restos del accidente y hasta los cuerpos, y todos tienen altas condiciones de seguridad. Pero las claves no son lo que uno esperaría… hasta ahora.



En algún lugar hay una gran cantidad de material y probablemente piezas bastante grandes de dos o más ovnis que vinieron a terminar sus días dentro de las fronteras estadounidenses, y tal vez en el territorio de una o más naciones amigas. Donde exactamente, es un misterio. Incluso los fragmentos que fueron a parar a Wright Field desde Roswell y Fort Worth pueden no estar allí hoy. Tal vez fueron trasladados varias veces por razones de seguridad y para la investigación científica top secret. Abundan rumores de que Estados Unidos estuvo involucrado en un intento de hacer volar un ovni capturado, desde una de sus bases secretas en Nevada.

Algunos individuos afirman incluso que hemos trabajado en estrecha colaboración con extraterrestres para adaptar su tecnología a nuestros usos. Y que algunos de nuestros primeros aviones furtivos (en particular el caza Lockhed F-117 y el bombardero Northrop B-2) se beneficiaron del asesoramiento “externo”. Pero no hay absolutamente ningún fundamento para tales afirmaciones; por lo tanto, deben considerarse tan sólo rumores. Los autores creen que puede tratarse incluso de desinformación aportada por representantes gubernamentales anónimos, para confundir aún más la escena del fenómeno ovni.

En un nivel mucho más razonable, se ha sugerido que el primer material extraterrestre recuperado era tan técnicamente avanzado que no podía ser entendido ni siquiera por los más brillantes y experimentados científicos. Se ha hecho una analogía con el hipotético regalo de un moderno reloj digital electrónico a Leonardo da Vinci, uno de los verdaderos genios en la historia de la Humanidad. Da Vinci no sólo hubiera sido incapaz de imaginar cómo funcionaba, sino que además no hubiera tenido ninguna clave para averiguarlo. El chip del tamaño de una estampilla no hubiera significado nada para él, y tampoco el registro de cristal líquido.

No hubiera tenido más remedio que guardarlo con la esperanza de que, en el futuro, alguien averiguara algo que permitiera descifrar el extraño dispositivo. Lo mismo podría decirse de los ovnis que se estrellaron en Nuevo México en 1947: tal vez estaban tan avanzados en comparación con nuestra ciencia y tecnología, que los esfuerzos para entender incluso pequeñas partes de ellos resultaron totalmente inútiles. Entonces se habrían almacenado, controlándose periódicamente para comprobar si los últimos conocimientos arrojaban alguna luz sobre su exótica composición. Podríamos estar esperando todavía que nuestros conocimientos científicos los alcancen. O tal vez sí descubrimos cómo funcionaba el ovni modelo 1947 y estamos empleando ese conocimiento. O quizás aprendimos realmente cómo está construido un aparato extraterrestre, cómo se opera y cómo vuela....


QUE LUEGO DIGAN QUE ESTE POST SE HECHO A PERDER..

ME ENCANTAN ESTOS TEMAS! :)
 
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Gales, eres un Crack! :D

Que bien!!

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Edit: Por cierto, el video de la autopsia del alien es falso.

"Se confirma que la película de la Autopsia Alienígena de Santilli es un fraude"

El 4 de Abril de 2006, el canal de televisión Sky One emitió "Eamon Investiga - Autopsia Alienígena." El documental comienza con Santilli afirmando que vio una película real sobre alienígenas y que la compró a un antiguo cámara del ejército norteamericano. Sin embargo, ahora hay un cambio en la historia. Santilli y su colega Gary Shoefield afirman que les llevó 2 años comprar la película, y que cuando finalmente llegó a Londres, estaba "oxidada" en un 95% y que el 5% restante estaba en muy malas condiciones. Fue entonces cuando decidieron "reconstruirla" basándose en los recuerdos de Santilli y en unos pocos fotogramas que sobrevivieron.

Para hacerlo, contrataron al escultor británico John Humphreys. Humphreys cuenta cómo utilizó sesos de una oveja para el cerebro y una pierna de cordero para la articulación de la pierna.

La entrevista con el supuesto cámara que grabó la película también es falsa. El hombre de la película es alguien al que cogieron literalmente de la calle al que le dieron un guión.

Santilli y Shoefield tratan ahora de insistir en que su película es una restauración, pero en realidad fue realizada por John Humphreys. Para tratar de justificarse, afirman que algunos de los fotogramas originales pueden verse mezclados en la reconstrucción/restauración. Resulta curioso que ni Santilli, así como Shoefield o Humphreys, fueron capaces de señalar cuáles son esos fotogramas viendo su película.

Santilli admitió que los paneles con manos de seis dedos en la película de los restos eran el resultado de una "licencia artística" y que incluso reprodujo una de las barras en forma de I a partir del maletero de su coche. La película de los restos también fue realizada por John Humphreys.

De hecho, Humphreys es el cirujano en la película, y un antiguo empleado de Shoefield quien está detrás de la ventana. Era Gareth Watson, un hombre al que vi varias veces en la oficina de Ray Santilli.

Fuente: - La autopsia extraterrestre ¿definitivamente caso cerrado? - Ikerjimenez.com -

Iker lo sabe todo... :feo:
 
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Repercusiones por el pedido de la Royal Society a la ONU (2011)

Repercusiones por el pedido de la Royal Society a la ONU. Hace unas semanas te contamos que la Royal Society de Londres, Inglaterra, pidió a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que desarrollen un plan con el objetivo de estar preparados en el supuesto caso de que nos visiten seres de otros planetas, haciendo hincapié en que el contacto con seres extraterrestres sería muy peligroso.

Con el paso de los días, fueron muchos quienes dieron su opinión acerca de este pedido de la comunidad científica inglesa, y aquí queremos contarte todas las repercusiones.

Para los investigadores de OVNIS, se trató de una victoria. “Fue algo sin precedentes. La Royal Society es una de las instituciones científicas más serias del planeta Tierra. Se están abriendo, poco a poco”, manifestó el director de una famosarevistasobre OVNIS.


Además, dijo que si bien en la actualidad muchas instituciones relacionadas con esta temática informan a la opinión pública acerca de microbios y procesos biológicos que podrían llegar a generar vida, en privado consideran seriamente la posibilidad de que la Tierra sea visitada por seres de otros planetas.

El profesor e investigador en Astronomía y Astrofísica de Kepler de Souza, señaló que la posibilidad de que una vida extraterrestre fuera agresiva nsiempre existe, aunque no cree en que puedan llegar a haber interacciones agresivas entre civilizaciones, debido a que las distancias entre las estrellas son tan grandes que es imposible viajar de una a la otra.

Otro experto en Astronomía señaló que las declaraciones de los miembros de la Royal Society son útiles porque nos hace pensar acerca de la civilización de la Tierra y en la evaluación de los riesgos de las civilizaciones extraterrestres, lo que refuerza la idea de una civilización humana.
 
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