Michael es inocente pero las grandes empresas se mueven más por el juicio mediático (del que salió, en mi opinión, más culpable que inocente) que por el juicio real. Michael sigue siendo sinonimo de sospecha y hoy, en la cultura de la cancelación preventiva y del bienquedismo, prefieren ser conservadores. Tienen más que perder que que ganar si se relacionan con la imagen de Michael. Pero esto pasa por la mierda de cultura y de sociedad que nos está quedando.
Yo tengo un cuadro de Michael presidiendo mi escuela de música, a la que asisten muchos niños con sus padres y valoré en su día el quitarlo. Obviamente no lo hice y ahí está. Alguna vez alguien me ha dicho que no es apropiado. Bueno. Es su opinión. Michael es ante todo un prodigio de la música y merece estar en esas paredes. Quien no lo vea es su problema. Si hubiera sido culpable, otro fallo cantaría. Pero no.