pussycontrol
HideOuter Gayhetero
En realidad a pesar de lo mucho que me gustan-o mejor dicho me gustaban-el lapso de tiempo en que las frecuenté fué mas bien corto.
Hasta que no cumplí los 16 por lo menos no pisé una ¿cúal es la edad que dejan ya entrar por cierto los 16 no? no lo recuerdo ahora mismo. Luego las abandoné como lugar frecuentado sobre los 20 como mucho tiempo que coincidió con el advenimiento del acid house y después el-¡horreur!-bakaluti.:miedo:
Antes algún disco-pub pero de manera digamos testimonial=enseguida me piré y me acuerdo bien que me causó impresión el hecho de ver al personal bailando y el menda bastante cortao de por sí miraba con incomodidad y por ese mismo sentimiento que me quería marchar me acuerdo perfectamente la rigidez del cuerpo provocada por la total reticencia de esbozar el mas mínimo movimiento rítmico del cuerpo ante mi total desconocimiento del baile.
Hoy dia esta situación no me deja de ser harto curiosa e incluso extraña dada mi querencia absoluta por el bailoteo una vez me solté gracias a ver a-sí, lo habéis adivinado-MJ bailar en la actuación de los Grammy del 88 esa fué la primera vez que me solté la melena en lo que a esta práctica se refiere. A partir de ese momento todo fué rodado básicamente un no parar, recuerdo ya entonces ir a las discos sobre todo por la zona de Moncloa (una zona de marcha-no militar- de Madrid) en la que como ya he comentado en alguna que otra ocasión en el foro, llegaban a poner en una al menos dos temas de MJ: SC y Leave me alone porque sencillamente los disc-jockeys me conocían y sabían que iba a hacer el numerito en el buen sentido, jejee: asi es cuando me quería dar cuenta ya habían hecho el corrillo de rigor alrededor mio y yo dándolo todo lo que podía haciendo el Michael como me gusta decir.
Pero como no sólo de Michael Jackson vive el pussylolailo pues también disfrutaba tela el resto de temas pop/rock que por aquellos en verdad maravillosos años ponían en todas y cada una de las discos daba igual: Erasure, Eurythmics, DelaSoul, Kylie Minogue, Rick Astley, Madonna, Snap y su famoso: I got the power, Bananarama, Modern Talking, Europe, Simple Red... y pop nacional desde luego desde Mecano a Dinamita pa' los pollos e incluso el momento pachanga con las mas o menos graciosas patochadas de Los Inhumanos -o mejor- los No me pises que llevo chanclas.
En fin un ambiente pop mainstream que hacían las delicias de todo melómano de pro en el lugar ideal y apropiado para escuchar y bailar buena música, en buenas condiciones de sonido que evidentemente son las discos en las que cualquiera podía sacar su Tony Manero si así lo quería: momentos inolvidables y-¡aiiiins! (suspiro)-irrepetibles en el sentido mas literal pues como sabemos y en mi caso sufro entre el bakala, la música pachanguera latina, l@s triunfit@s y demás ralea horteroide se han cargao ese espíritu pop al que he hecho referencia.
Y es que me da especialmente coraje el que hoy dia existan esas mega-discotecas del copón con esos juegos de luces lásers, estroboscópicas, esas megapistas en diversos niveles de altura incluso...es decir unas instalaciones de ensueño para l@s bailong@s y que- ¡aiiins! de nuevo suspiro-se vean invadidos por esos ritmos tecno-dance machacones hasta el paroxismo que particularmente en mi caso hace que a pesar de ese escenario supermolón que describo en los dance-clubs, macro-discos sean de los últimos sitios ( de ocio o negocio) donde quiera poner mis pies de veras y absolutamente: tanto es así que se puede decir que nunca he llegado a estar en una macro-discoteca que puede haber por mi comunidad y/o territorio nacional. ¡Hasta ese punto, imaginad!
En definitiva en mi caso se da aquello de haber el mejor sitio (las macro-discos) pero en el peor momento que-¡aiins! último suspiro-seguro será permanente en el tiempo por venir.
Hasta que no cumplí los 16 por lo menos no pisé una ¿cúal es la edad que dejan ya entrar por cierto los 16 no? no lo recuerdo ahora mismo. Luego las abandoné como lugar frecuentado sobre los 20 como mucho tiempo que coincidió con el advenimiento del acid house y después el-¡horreur!-bakaluti.:miedo:
Antes algún disco-pub pero de manera digamos testimonial=enseguida me piré y me acuerdo bien que me causó impresión el hecho de ver al personal bailando y el menda bastante cortao de por sí miraba con incomodidad y por ese mismo sentimiento que me quería marchar me acuerdo perfectamente la rigidez del cuerpo provocada por la total reticencia de esbozar el mas mínimo movimiento rítmico del cuerpo ante mi total desconocimiento del baile.
Hoy dia esta situación no me deja de ser harto curiosa e incluso extraña dada mi querencia absoluta por el bailoteo una vez me solté gracias a ver a-sí, lo habéis adivinado-MJ bailar en la actuación de los Grammy del 88 esa fué la primera vez que me solté la melena en lo que a esta práctica se refiere. A partir de ese momento todo fué rodado básicamente un no parar, recuerdo ya entonces ir a las discos sobre todo por la zona de Moncloa (una zona de marcha-no militar- de Madrid) en la que como ya he comentado en alguna que otra ocasión en el foro, llegaban a poner en una al menos dos temas de MJ: SC y Leave me alone porque sencillamente los disc-jockeys me conocían y sabían que iba a hacer el numerito en el buen sentido, jejee: asi es cuando me quería dar cuenta ya habían hecho el corrillo de rigor alrededor mio y yo dándolo todo lo que podía haciendo el Michael como me gusta decir.
Pero como no sólo de Michael Jackson vive el pussylolailo pues también disfrutaba tela el resto de temas pop/rock que por aquellos en verdad maravillosos años ponían en todas y cada una de las discos daba igual: Erasure, Eurythmics, DelaSoul, Kylie Minogue, Rick Astley, Madonna, Snap y su famoso: I got the power, Bananarama, Modern Talking, Europe, Simple Red... y pop nacional desde luego desde Mecano a Dinamita pa' los pollos e incluso el momento pachanga con las mas o menos graciosas patochadas de Los Inhumanos -o mejor- los No me pises que llevo chanclas.
En fin un ambiente pop mainstream que hacían las delicias de todo melómano de pro en el lugar ideal y apropiado para escuchar y bailar buena música, en buenas condiciones de sonido que evidentemente son las discos en las que cualquiera podía sacar su Tony Manero si así lo quería: momentos inolvidables y-¡aiiiins! (suspiro)-irrepetibles en el sentido mas literal pues como sabemos y en mi caso sufro entre el bakala, la música pachanguera latina, l@s triunfit@s y demás ralea horteroide se han cargao ese espíritu pop al que he hecho referencia.
Y es que me da especialmente coraje el que hoy dia existan esas mega-discotecas del copón con esos juegos de luces lásers, estroboscópicas, esas megapistas en diversos niveles de altura incluso...es decir unas instalaciones de ensueño para l@s bailong@s y que- ¡aiiins! de nuevo suspiro-se vean invadidos por esos ritmos tecno-dance machacones hasta el paroxismo que particularmente en mi caso hace que a pesar de ese escenario supermolón que describo en los dance-clubs, macro-discos sean de los últimos sitios ( de ocio o negocio) donde quiera poner mis pies de veras y absolutamente: tanto es así que se puede decir que nunca he llegado a estar en una macro-discoteca que puede haber por mi comunidad y/o territorio nacional. ¡Hasta ese punto, imaginad!
En definitiva en mi caso se da aquello de haber el mejor sitio (las macro-discos) pero en el peor momento que-¡aiins! último suspiro-seguro será permanente en el tiempo por venir.
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