A mí Michael Jackson me parece el artista más completo que ha existido y dentro de toda su amplia y variada gama de recursos es precisamente la voz la que me parece, de largo, lo más extraordinario de todo.
Como bien dice Madrileño la inspiración de Stevie Wonder ha sido muy destacada, de hecho en los primeros discos de los Jackson 5 o del propio Michael hay un buen puñado de versiones de temas de Stevie Wonder, como era habitual entre los artistas de la Motown.
Pero en 1971 y con la salida del álbum “Where I’m Coming From”, que es para Stevie lo que “Off The Wall” para Michael, su paso a adulto y ser dueño de su carrera, donde Wonder añade a su estilo vocal una serie de variaciones y nuevos matices que serán estudiados por Michael (y por decenas de otros cantantes).
Michael era un portento absoluto siendo niño, lleno de soul, tuvo un paso a la adolescencia brillante volviéndose más funky en discos como “Skywriter” o “Get It Together” pero luego vino una etapa complicada en los últimos álbumes de Motown y los 2 primeros de The Jacksons en CBS, donde su voz siguió añadiendo matices pero quizás se tapó un poco debido a ciertas canciones y producciones.
Fue gestando un estilo único que iniciaría con “Things I Do For You” y “Shake Your Body”, explotaría en “Off The Wall”, lo perfeccionaría en “Thriller” y en “Bad” era ya directamente un estilo por sí mismo.
Al igual que Stevie Wonder fue un maestro de maestros, Michael se convertiría en un faro para artistas que vinieron detrás.
La mayor diferencia (vocal) entre ambos, a mi modo de ver, es que lo que Stevie Wonder hacía Michael lo podía hacer, pero no al revés. No imagino a Stevie yendo tan a los extremos como Michael ha ido.
