Asocia "cabezota" con "Tauro" --------> pobre ilusa.
De verdad, ¿creeis que soy Tauro?
¿No te has podido preguntar el significado de "¿?" que iba después?
Sin quererlo has caído en tus "asociaciones astrológicas"....para llegar a una conclusión FALSA. ¿Ahora coincides "vuestra" astrología?
ei...¿Por qué no adivinais en qué mes nací? Os resultará fácil....sabeis algunas de mis características personales (o creeis que la sabeis, mejor dicho).
Habeis estado tan acertado como el ejemplo que puse:
Un científico llamado Geoffrey Dena realizó, no hace demasiados años, el siguiente experimento. REunió a un grupo de personas y les repartió a cada uno de ellos dos cartas astrales. Se les dijo que la primera de ellas (a la que denominaremos A) era su auténtica carta astral, la que correspondía a sus datos personales, mientras que la segunda ( a la que obviamente llamaremos B) era una carta astral que no tenía nada que ver con la persona en cuestión. Una vez repartidas, se les preguntó a cada uno de ellos si se sentían identificados con dichas cartas astrales. El noventa y siete por cien reconoció identificarse con la carta A y solamente el doce por cien lo hicieron con la carta B (hay que precisar que cada individuo podía identificarse con ambas cartas).
Hasta aquí todo parecía correcto y, de hecho, muy favorable para la astrología. Sin embargo había un problema y no precisamente insignificante. Geoffrey Dean había MENTIDO a sus "cobayas": la carta astral A, que les había sido dada como la que les correspondía a cada uno de ellos, pertenecía en realidad a otras personas distintas, mientras que la carta astral B, que en principio era una carta extraña para ellos, era la que realmente le correspondía.
En definitiva, los "cobayas" se identificaron con la carta A porque era la que CREÍAN que les correspondía, ya que precisamente así se los habían dado a entender, y no por ninguna otra razón.
Qué casualidad, no? ¿Por qué no os preguntais que "algo falla"?
Ahora, EL EJEMPLO HABEIS SIDO USTEDES MISMOS.......
Saludos.