CapitánAcab, no te preocupes, por supuesto que no me tomo a mal tu reproche y, aunque en parte es acertado, en parte no lo es por lo siguiente:
Primero, hay que partir de la base de que tanto tú como yo estamos especulando porque evidentemente yo no he tenido acceso a la sentencia ni tú tampoco la has leído. En consecuencia, cada uno ha interpretado o ha elegido caminos distintos a partir de una información escasa.
El resultado es que yo he pensado que el Tribunal Supremo no había tenido en cuenta la posibilidad de amenazas diciendo que la víctima, puesto que en teoría se tuvo que desabrochar los pantalones, consintió y punto. Tú, como dices, te has referido a la "fuerza".
Comprendo lógicamente que siendo la amenaza o intimidación un elemento objetivo del tipo, tenga que ser probado. No sabemos si esto ocurrió en el juicio anterior, antes de la apelación, porque entonces hubo veredicto de culpabilidad. ¿Se basó sólo en la "fuerza" que rechazaría luego el Supremo?
Pero es que incluso aunque la acusación sólo hubiese alegado "fuerza" y aunque haya dificultades para probarlo, me parece que no es un buen contraargumento el decir que la víctima tuvo que consentir porque "es de todos conocido" que unos vaqueros no se pueden desabrochar sin ayuda de quien los lleva. Si no está probada la fuerza o las amenazas ¿por qué no decirlo simplemente en lugar de dar por sentado o establecer una regla general absurda (acerca de los vaqueros) que además es determinante de la absolución del acusado y un precedente que muchos presuntos violadores han utilizado después?
Estoy contigo. Yo sólo digo: si sucedió como pienso, entonces son incompetentes y más que machismo, la sentencia rebosaría imbecilidad.
No hay por qué apartar el apasionamiento, puedes ser un apasionado de la justicia y ser igualmente equilibrado y racional.![Stick out tongue :p :p](data:image/gif;base64,R0lGODlhAQABAIAAAAAAAP///yH5BAEAAAAALAAAAAABAAEAAAIBRAA7)
Primero, hay que partir de la base de que tanto tú como yo estamos especulando porque evidentemente yo no he tenido acceso a la sentencia ni tú tampoco la has leído. En consecuencia, cada uno ha interpretado o ha elegido caminos distintos a partir de una información escasa.
El resultado es que yo he pensado que el Tribunal Supremo no había tenido en cuenta la posibilidad de amenazas diciendo que la víctima, puesto que en teoría se tuvo que desabrochar los pantalones, consintió y punto. Tú, como dices, te has referido a la "fuerza".
Comprendo lógicamente que siendo la amenaza o intimidación un elemento objetivo del tipo, tenga que ser probado. No sabemos si esto ocurrió en el juicio anterior, antes de la apelación, porque entonces hubo veredicto de culpabilidad. ¿Se basó sólo en la "fuerza" que rechazaría luego el Supremo?
Pero es que incluso aunque la acusación sólo hubiese alegado "fuerza" y aunque haya dificultades para probarlo, me parece que no es un buen contraargumento el decir que la víctima tuvo que consentir porque "es de todos conocido" que unos vaqueros no se pueden desabrochar sin ayuda de quien los lleva. Si no está probada la fuerza o las amenazas ¿por qué no decirlo simplemente en lugar de dar por sentado o establecer una regla general absurda (acerca de los vaqueros) que además es determinante de la absolución del acusado y un precedente que muchos presuntos violadores han utilizado después?
Sólo se me ocurriría tachar de incompetentes a unos magistrados (o de machistas, si lo prefieres, aunque dicho término es empleado en ocasiones de una manera demasiado elástica y atrevida) después de examinar por entero la sentencia en cuestión, sin párrafos oportunamente seleccionados y después de analizar el asunto con la seriedad y el desapasionamiento que corresponde.
Estoy contigo. Yo sólo digo: si sucedió como pienso, entonces son incompetentes y más que machismo, la sentencia rebosaría imbecilidad.
No hay por qué apartar el apasionamiento, puedes ser un apasionado de la justicia y ser igualmente equilibrado y racional.