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_Carácter y Signos del Zodíaco_

Para Núria:*) y demases!


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La Mujer Cáncer


Se desvanecen los ecos y los recuerdos mueren: las heladas de otoño asesinaron a julio. Todavía, como
un fantasma, me obsesiona Alicia, moviéndose bajo cielos que jamás han visto ojos vivientes.


De eso no cabe duda. Al comienzo, te costará darte cuenta de si tu chica Cáncer es una gentil doncella regida por la Luna o una chiflada de remate. Y al final, no lo sabrás todavía. Durante la estación de las lluvias, te ahogará con sus pesares, y cuando el sol vuelva a asomar entre las nubes te hará doblar de risa, y te conmoverá con su ternura.


Ser testigo de sus cambios anímicos es como ver una de esas antiguas películas mudas que anteponen un episodio de humor basado en bofetadas histéricas a la patética historia de los Peligros de Paulina, todo acompañado por la musiquita del piano en el foso de la orquesta. A veces, la melodía es alegre y vivaz; otras se pone melancólica. La música es varia-ble, para acompañar las ocasiones, pero jamás aburrida ni monótona. Lo mismo pasa con la muchacha Cáncer. Es un poquitín chiflada, un poco triste y muy imaginativa. Y también sabe ahorrar los niqueles.


Naturalmente, no podrás mirar debajo del colchón mientras no os hayáis casado. El pudor es una de sus condiciones. Pero puedes apostar sin riesgo a que allí guarda un calcetín viejo, bien lleno de billetes verdes y monedas de plata. Aún cuando tuviera un ascendente manirroto, seguramente guardaría algunas monedas bajo la maceta de las azaleas, o tal vez reservadas entre los pliegues de ese mantel de encaje que le regalaron hace diez años para su cumpleaños, y que todavía no ha estrenado. Si abres uno de sus libros de poesía, es posible que caiga de él un arrugado billete de un dólar, deslumbrado por la luz del día. Una mujer Cáncer puede ceder a un súbito impulso de gastar cuando la han herido y necesita mitigar el dolor de las magulladuras, pero durante la mayor parte del tiempo sus gastos quedarán considerablemente por debajo de sus ingresos.


Es posible que muestre un especial interés por tu cuenta de ahorros, y que el dinero sea uno de sus temas de conversación favoritos. No te mirará con desdén si no lo tienes, siempre y cuando seas de la clase de hombres que se esfuerza por conseguirlo. Ella te ayudará a ganarlo y a ahorrarlo, pero mucho cuidado a la hora de gastarlo. No vayas demasiado lejos si no quieres que ella tenga la sensación de que vuestra seguridad se desmorona. Cuando le hagas a esta muchacha un regalo carísimo, y ella te diga que no deberías haberlo hecho, no dudes que lo dice en serio.


Si quieres que deje de pensar en seguros, hipotecas, alquileres, facturas y el saldo de su club en el banco, llévatela a la playa a medianoche, a dar un paseo a la luz de la luna. Serán sus mejores momentos. La luna hará aflorar todos sus sueños secretos, y es posible que la proximidad del agua le haga olvidar todas sus inhibiciones. Es muy posible que en el espacio de una hora veas toda la gama de sus emociones. Entonces, podrás elegir la que mas te guste y darle ánimos para que la cultive.


Cuando salgas con una chica Cáncer típica a pasear solos por una playa, bajo la luna llena, asistirás a una transformación extraña. Esa dama fría y reservada que conociste durante el día, o esa muchacha desaforada y tentada de risa que se te mostró alguna vez que la llevaste al teatro o a cenar a un restaurante, se convertirá súbitamente en una criatura de otro mundo cuando los magnéticos rayos de la luna iluminen sus ojos y sus oídos se llenen del rumor de las olas. Se convertirá en una ninfa del mar, que puede elevarse contigo tan alto como pueda llegar tu imaginación.


Nueve veces de cada diez, el sistema funcionará, y la décima será probablemente porque acertaste a elegir la luna nueva. Con eso no lograrás lo mismo. Cuando la luna está en menguante, ella se mostrará tímida y dulce, pero lo que necesitas en realidad es una luna lo bastante llena como para movilizar todos sus talentos latentes. Bajo su hechizo, en el momento justo de su propio flujo y reflujo de emociones, Cáncer puede escribir un poema, componer una canción o desgarrar el velo de los misterios que durante siglos han hecho cavilar a los filósofos. Naturalmente, es en esos momentos en los que su conversación es interesante, por decir lo menos.


Es necesario que sepas que hay dos variedades distintas de mujeres Cáncer enamoradas. La primera es suave y femenina, tímida, modesta y conmovedoramente temblorosa. La segunda es más bien pegajosa. Es de las que usarán todas las tretas de Eva para sentarse lo más cerca posible de ti en el reservado, cosa que si ella te interesa de veras, puede resultar muy fascinante. Pero si tú solo estás en plan de amigo y ella te toma deliberadamente de la mano o te besuquea las mejillas en el momento mismo en que pasa por ahí la chica de tus sueños, es posible que el juego pierda un poco de gracia.


Puedes seguir con la broma, pero conozco a alguien que lo hizo y la otra chica, interesada en serio y que no estaba jugando, pasó de largo. Y él se quedó en las garras de un Cangrejo presa de un ataque de risa. Este tipo de mujeres Cáncer pueden ser un verdadero peligro para el auténtico amor y la felicidad de un hogar, aunque por suerte son una minoría. Aun así, una es suficiente para causar mil problemas.


Como ya lo sabes por los otros signos solares, son pocas las mujeres perfectas. La mujer Aries siempre andará llamando ella sola su taxi y dándose de cabeza contra muros de ladrillo, Sagitario te hablará con una franqueza totalmente chocante, Escorpio puede asustarte, ser versátil Géminis y demasiado orgullosa Leo, y así sucesivamente. En las mujeres Cáncer por lo general no encontrarás estos defectos.


Sin embargo, también hay algunas normas que no debes olvidar con ellas. Cáncer no soporta que la critiquen, se siente profundamente herida por el ridículo y, simplemente, no puede aguantar que la rechacen. Una, dos, tres: son reglas básicas. Es raro que se muestre abiertamente agresiva; la nativa típica es vacilante, y la primera jugada tendrás que hacerla tú. Si por casualidad ella llega a moverse, lo hará hacia atrás o de costado. Con la timidez propia de su naturaleza, y el temor de no ser aceptada, es un eco del varón del mismo signo solar.


Sé de un hombre y una mujer de este signo que se pasaron siete horas, una noche, sentados uno junto a otro en el apartamento de ella, como si no les interesara otra cosa que mirar revistas. Mientras sus corazones latían silenciosamente, ellos examinaron una pila de números atrasados, el periódico de la mañana y el de la tarde, y resolvieron unos cuantos crucigramas. Ninguno de los dos quería dar el primer paso.


Si no eres bondadoso y atento con su madre, no te lo perdonará. Mamá es una dama, y a su hija no le gusta que la insulten. Aunque las chicas Cáncer tienen sentido del humor, no reaccionan favorablemente a los chistes sobre la suegra. Tampoco quieras leer nunca su diario de cuando tenía cinco años, aunque es casi seguro que lo tendrá bajo llave. A Cáncer le gusta guardar secretos, y no esperes de ella confesiones auténticas, a menos que quien se confiese seas tú.


Los miedos de tu lunar amada pueden mantenerte realmente con el alma en un hilo, lo mismo que a ella. Tiene miedo de no ser lo bastante bonita, de no ser lo bastante inteligente, de no ser suficientemente joven o suficientemente vieja. No importa que tenga la silueta de la Venus de Milo, el rostro de Helena de Troya y la mente de Aristóteles: ella se sentirá igualmente inadecuada. Asegúrale que es joven, que es hermosa, que está comprometida y que te tiene a ti. Si se lo repites unas veinte veces al día, es probable que empiece a hacerle mella. Su estado de ánimo cambiará como promedio cuatro veces por mes, con los cuartos de la Luna, amén de pequeñas fluctuaciones dos veces por día, reflejo del movimiento de las mareas.


De una manera impredecible, es predecible en cierto modo, y eso puede hacerla fascinante y misteriosa, pero también insoportable hasta el punto de que te entren ganas de propinarle una buena paliza. Durante alguno de sus arranques de melancolía, incluso es posible que tenga miedo de no ser buena cocinera, lo que es un absoluto disparate, porque una Cáncer típica puede hacer que un chef francés quede reducido al nivel del sargento que preparaba el rancho cuando tú hacías la mili.


No es mujer que se arregle con un abrelatas automático o con un congelador: prefiere pelar ella los guisantes y hornear ella los bizcochos. Sus guisados son sensacionales, sus patatas livianísimas, sus verduras frescas y crujientes, y lo corona todo con una mermelada de fresa celestial. Las mujeres Cáncer son muy amigas de su cocina, que en la casa es su lugar favorito (después del cuarto de los niños). Revoloteará en torno de ti como una clueca, y es probable que a ti te encante, como a la mayoría de los hombres.


Aparte del miedo, totalmente injustificado, de su falta de habilidad culinaria, quizá tema que tú no la quieras bastante. Eso no es difícil de remediar para ningún varón con sangre en las venas. Adelante, demuéstraselo todas las veces que quieras, que ella estará totalmente receptiva. Una vez que le hayas encendido la luz verde, ella se sentirá feliz de reconocer la señal, y aunque eso puede borrar su complejo de inferioridad, te creará otro problema. A decir verdad, después que la hayas conquistado, una mujer de Cáncer puede mostrarse un poco tenaz... digamos que no te soltará mientras viva, lo que no está nada mal.


Hay hombres ávidos de lealtades así. Cuando hayas tenido la suerte de ganarte su amor, jamás estarás falto de comida ni de afecto. Y la sonrisa chiflada con que te los ofrecerá también tiene su encanto. Su rico humor se te hará más cálido y mas querido cuando pienses en todas las sirenas sarcásticas que andan por el mundo con su ingenio cínico y su risa hipócrita.


Es bárbaramente injusto jugar con el corazón de una chica de este signo, porque ella te amará, te honrará, te obedecerá y te fastidiará un poco con devoción sincera. ¿Por qué dar alas a un amor así si no tienes la intención de corresponderlo con el mismo ardor? Recuerda la tenacidad de Cáncer. Es posible que tú no hagas más que flirtear, pero tendrás graves problemas cuando quieras dar por terminado el partido: ella no oirá el silbato. En los sentimientos de una mujer Cáncer no hay nada de superficial ni trivial. Cuando llega a ser dueña de un hombre, o de una taza de té, es para siempre.


Es posible que no impresione a tus amigos con su vivacidad y su chispeante capacidad de halagarlos, pero a ti no dejará de seducirte con su encanto. Las mujeres de julio prefieren reservar sus emociones mas profundas para la gente que sienten más próxima. Después que hayas salido con otras chicas y las hayas comparado con ella, es posible que vuelvas corriendo hacia tu Cangrejo hembra, y le pidas que te aferre otra vez. Y con fuerza. En el trato con ella, lo más difícil es evitar que se refugie en el caparazón impenetrable del Cangrejo, siempre tan a mano.


Sus sentimientos son tan sensibles y tiernos que la más leve observación, hecha sin intención alguna, puede producirles una profunda herida. Es difícil saber cuando la ha vulnerado súbitamente algún significado oculto. Es posible que alguna noche llegues a visitarla y le digas: <<Que hermoso es tu cabello>>, y veas que se le llenan los ojos de lágrimas. ¿Por qué? Porque la última vez que estuviste con ella le diste a entender que el pelo se le veía espantoso. Las mujeres Cáncer pueden ser muy quisquillosas y llorar bastante. No te olvides de tener siempre un pañuelo a mano. Las mujeres nacidas bajo el signo del Cangrejo no son necesariamente tacañas, pero tienen sus hábitos ahorrativos.


Hasta se diría que es lisa y llanamente una compulsión. Es raro que una mujer lunar se deshaga de trozos de hilo, botones, frascos, latas, maridos o patrones viejos para vestidos. Y ¿quién eres tú para decir que no sirven de nada esas entradas de teatro rotas, esas viejas cartas de amor o las bolsitas de té usadas? Algún día de ese imprevisible futuro, es posible que le sirvan para algo los fusibles quemados que guarda en el cajón, con los adornos de Navidad rotos. No le preguntes que empleo piensa dar a esas dos-cientas medías y guantes desde hace tiempo divorciados de sus parejas.


"¡Ya lo encontrará, descuida! Cáncer no es mujer que tenga paciencia con quien le queme con el cigarrillo el cubrecamas acolchado que heredó de la tía abuela Matilde. Para ella, todo tiene un valor sentimental, incluso los cheques vencidos de 1952 y las viejas insignias de cuando estuvo en la organización de Girl Scouts. Atesora y guarda celosamente las cosas que tiene, y entre ellas a ti, naturalmente. Y no tanto porque sea celosa; es más que nada posesiva, que es diferente.


Es posible que las mujeres nacidas bajo los signos de fuego se resistan y protesten ante las demoras y las decepciones que trae la vida, pero Cáncer tiene por lo común la sensación de que alborotándolo todo no se puede cambiar ni superar nada. Cuando las cosas no van como ella quisiera, es posible que derrame algunas silenciosas lágrimas furtivas, pero su reacción normal será cruzar serenamente las manos y esperar con paciencia a que las cosas se arreglen solas. La paciencia es una de sus mejores virtudes.


Cuando está deprimida, sin embargo, es posible que seas tú quien tenga que encontrar la manera de salvarla de sí misma. Trata de rescatarla antes de que se haya hundido demasiado. Además, en cierto modo ella quiere que la mimen. El deseo de dejarse malcriar un poco por los seres amados parece tener hondas raíces en la naturaleza de los Cangrejos. Tu muchacha lunar necesita desesperadamente saber que tú no puedes vivir sin ella, y puede llegar muy lejos para despertar tu piedad y tus instintos protectores, simplemente para asegurarse de lo mucho que significa para ti. Para ella es en realidad muy poco pedir, cuando es tanto lo que da a cambio. Pero durante estos episodios, no te dejes engañar por su debilidad.


Ese bebé desvalido que contra un mundo frío y cruel busca la protección de tus fuertes brazos es per-fectamente capaz de valerse por sus propios medios si es necesario. En medio de una rencilla, cuando ella levante hacia ti sus transparentes ojos húmedos y asustados, recuerda que cuando tú te vayas y ella esté segura de que ya has dado la vuelta a la esquina, lo mas probable es que se seque los ojos, ponga una pila de discos en el automático y se dedique tranquilamente a ordenar los armarios. Claro que es cierto que en ocasiones su depresión es auténtica, y no una simple búsqueda de simpatía, típica de Cáncer. Esas noches será mejor que te quedes, que escuches música con ella y la tomes tiernamente de la mano.


El heroico sacrificio de que es capaz una mujer Cáncer por aquellos a quienes ama no reconoce límites. La bravura que aparentemente no puede reunir para vencer sus propios temores se muestra, resplan-deciente, cuando un ser querido necesita de su fortaleza. Cuando las cosas se pongan realmente difíciles, no te abandonará jamás, y entonces te recordará mas a una roca, áspera y gigantesca, que a un tenue rayo de luz plateada. También sus hijos encontrarán en ella un refugio y una torre de fortaleza que con sensibilidad y comprensión les ayudará a encontrar su camino.


Serán muy apegados a ella, y lo cálido de su amor hará que el hogar materno sea para ellos tan rico, confortable y luminoso como un palacio, aunque fuera una choza. Es posible que tú te veas un poco desatendido cuando lleguen los bebés, pero es que Cáncer rige la maternidad, imagínate. Seguirá habiendo lugar para ti, si bien te verás desplazado unos centímetros. (Si no tiene hijos, una mujer Cáncer pondrá en un animal o en sus amigos su reserva de afecto maternal, para mejor suerte de ellos.) Como hacen los pájaros con sus crías, es posible que les dé de comer cada vez que los encuentra con la boca abierta, ofreciéndoles algo rico y nutritivo.


Para su familia, nada le parece demasiado bueno. Cuando uno de los chicos estornude, lo meterá en cama con medicinas, té caliente y caldo de gallina, mientras no tenga edad suficiente para defenderse. Los hijos de una madre Cáncer no conseguirán salir sin ponerse el pullover grueso cuando haga frío, la bufanda y los mitones si ha nevado y las galochas cuando llueva. Un niño tiene que tener una fuerza de voluntad enorme para defenderse de la solicitud protectora del Cangrejo, y también necesitará bastante firmeza para no dejarse malcriar. Para estos niños suele ser todo un choque el contacto con el mundo, que les lleva a descubrir que no son ellos el centro del Universo.


Una dedicación y una devoción tan completas pueden proporcionar a la prole un maravilloso lecho de plumas y fuente de seguridad para cuando la vida llegue a ser demasiado real, pero también pueden hacer que los hijos sean dependientes en un grado anormal de los vínculos hogareños, e incapaces de ver sus propias faltas. Muchas veces es imposible decir si es la madre Cáncer la que mantiene a los hijos atados a sus faldas, o si son ellos mismos los que aseguran el nudo. Son madres que guardan todos los cuadernos de la escuela, cuelgan orgullosamente en las paredes torpes dibujos a lápiz y conservan con ternura los zapatitos envueltos en papel de seda.


Esos ajados trozos de cabritilla blanca son preciosos, porque la ma-dre lunar, con su memoria clara y fotográfica, recordará los primeros pasos de un niño mucho después de que éste haya volado del nido. También el vuelo suele ser doloroso. Las mujeres de este signo se resisten a dejar que sus hijos asuman los lazos matrimoniales. Tienden a sujetarlos demasiado y durante demasiado tiempo, y les parece que nadie es suficientemente bueno para ellos. Hay veces en que la novia –o novio– en potencia del hijo de una madre Cáncer tiene que pasar poco menos que por el test de Rorschach para ser aceptado.


Conocí una vez a una madre Cáncer que solía ir a buscar todos los días a su hijito a la salida de la escuela. El niño salía siempre del aula como propulsado por un cohete y empezaba a correr furiosamente por el patio de la escuela, antes de acercársele. Una vez que fue en compañía de su hermana, la tía empe-zó a correr tras el niño, pero la madre Cáncer la detuvo. <<No, déjalo –le dijo–. Está soltando presión. Cuando ya no necesite correr, vendrá>>. Finalmente, el hijo se le acercó tranquilamente y le dijo, tomándola de la mano: <<Vamos mami, que tengo hambre>>.


Este episodio resume toda la actitud de la mujer lunar hacia todas las formas de amor, y muy especialmente hacia su matrimonio. Es su extraña forma de posesividad, inconmovible, pero nunca agresiva. En lo profundo de su corazón, ella sabe que por mas lejos que te vayas en pos de tu sueño, siempre volverás, y ella estará ahí, esperándote pacientemente. Sus ojos seguirán teniendo la belleza de la mágica Luna que tú recuerdas, de la cocina llegará el delicioso aroma de las especias, y ella te preguntará que tal fueron las cosas, y como te sientes.


Si algo te fue mal y vuelves derrotado, ya encontrará ella la forma de hacerte reír. Después te llenará el estómago y, cuando ya estés relajado, ahuyentarás suavemente tus preocupaciones con sus consejos sensatos y su humor imaginativo. Más tarde, cuando a la luz del fuego mires ese rostro sereno, volverás a preguntarte: <<Realmente, ¿es la doncella lunar de algún jardín nebuloso, o es una encantadora chiflada?>>. Pero la respuesta ya no te importará mucho.

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Para Betty:*) y demases !
Doy fe que este signo es super especial :dime:.


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La Mujer Tauro


Afuera, la escarcha –la nieve cegadora, la furia sombría de la tormenta de viento–, adentro, el rojizo resplandor del fuego y los niños en su nido de alegría.


Recuerdo una conversación que tuve una vez con una escritora cuya madre había nacido en mayo. Mientras hablábamos de los hábitos y del carácter de sus padres, la muchacha comentó que <<Mamá era una mujer alta>>. <<Pues entonces tú debes haber salido a tu padre>>, señalé, ya que la chica era de estatura mediana. Sonrió. Y jamás me olvidaré de lo que dijo. <<No me refería a la estatura física. Mamá era mas baja que yo. Yo hablaba del alma>>. La muchacha era Piscis, el signo que ve más hacia dentro.


Tenía razón. Una mujer Tauro es una mujer alta. Aunque no llegue a medir un metro y medio, puede alcanzar la altura suficiente para hacer frente a casi cualquier emergencia en la que pueda situarla la vida. En muchos sentidos, la mujer Tauro es la sal de la tierra, una combinación de las más preciosas cualidades que todos los hombres buscan, y que rara vez encuentran. Es capaz de exhibir un genio violento que llevará a un fuerte varón a refugiarse corriendo en los bosques (o por lo menos debajo de la mesa), pero no se entregará a un acceso de cólera si no la provocan.


Por lo general, si nadie la atormenta mas de lo que puede soportar un ser humano, o si el destino no le da una mano realmente muy mal barajada, será capaz de jugar con limpieza la partida de la vida, con admirable serenidad. Su candor y su sinceridad básica no conocen la dilución de las lágrimas ni otras tretas femeninas parecidas. La muchacha Tauro aventaja en valor moral y emocional a más de un recio varón, pero tiene suficiente confianza en su sexo para dejar que el jefe seas tú, si eso te gusta.


Si tú no te haces cargo, es posible que tome las riendas y sea ella quien se encargue de dirigir las cosas, aunque preferiría que fuera al revés. Lo que busca es un hombre de cuerpo entero, porque sabe que ella es una auténtica mujer, y está orgullosa de serlo. Para ella, ser mujer no significa necesariamente ser una coqueta incorregible, una cabeza hueca o una gatita que se finge débil para salirse con la suya. No tardarás mucho en darte cuenta de que tiene su propia opinión, y de que es lo bastante fuerte como para no necesitar ponerse fastidiosa para conseguir su objetivo. Generalmente, la mujer Tauro encierra en sí el autodominio suficiente para sujetar un tiro de caballos (lo que da justa idea de la fuerza oculta de su voluntad), si decide ejercitarlo.


Y esperamos que así sea. Con ascendente en Aries, Leo o la Luna puede esperarse de ella alguna que otra crueldad o frecuentes tormentas emocionales, y con fuertes influencias de Piscis o de Géminis en su carta natal es posible que sea mas inquieta e indecisa, pero la típica mujer Tauro practica el dominio de sí en todos los ámbitos de la vida y casi continuamente. Y es bueno que eso ocurra, porque su exterior normalmente plácido oculta una naturaleza sensual que vale la pena investigar un poco.


Los hombres aprecian siempre su generosa tendencia a tomar a la gente como es, sin reticencias. Se siente tan cómoda con un hombre de ciencia que venga de estudiar las moscas tse tse en el Congo como con el tragaespadas del circo. Los dos hacen aquello para lo que nacieron, ninguno de los dos es un impostor, y eso es lo que a ella le interesa. Sus mejores amigos pueden ser criaturas espeluznantes arrancadas directamente del mundo de Toulouse–Lautrec, o pueden ser cuadros de Norman Rockwell que han cobrado vida.


Pero siempre se tratará de seres reales, no maniquíes ni estatuas. Cuando tropieza con alguien que le disgusta, la mujer Tauro no inicia una campaña para destruirlo, ni enfrenta o desafía sus ideales y sus motivos. Lo evita, simplemente. Con sus enemigos puede mostrar una helada indiferencia, pero si tú te cuentas entre sus amigos, te será leal a través de todas las vicisitudes. Su decisión de serte fiel hará que la amistad entre Damon y Pitias parezca una relación circunstancial.


Puedes conducir un Maxwell, subir al mástil de la bandera, descuidar totalmente tu aspecto o ponerte flores en el pelo, si eres su amigo, de alguna manera ella justificará tus acciones. Hay un pequeño detalle, claro: ella espera tercamente de la otra persona su misma fidelidad ciega y su invariable lealtad. Y si a cam-bio de la suya no le ofreces una devoción total, puede enfurruñarse en un rincón como una triste nube gris de resentimiento acumulado.


No confundas eso con los celos, sin embargo. La mujer Tauro normal acepta el masculino deporte de mirar a las muchachas. A diferencia de las mujeres Leo o Aries, Tauro no se pondrá roja de furia cada vez que tú admires abiertamente a una chica bonita. Para encender su cólera hace falta algo más que un simple flirteo o un beso de despedida en la mejilla de una buena amiga. Si sobrepasas los límites de su idea de lo que es jugar limpio, puede llegar a ser temible, pero la línea está trazada con cierta generosidad. Realmen-te, tendrá que sentirse muy acorralada para que estalle con la furia típica del Toro. Está bien, puedes hacerle un guiño a esa cajera tan bonita, pero no pongas demasiado a prueba la paciencia de tu chica Tauro. Por inagotable que parezca, tiene sus límites, y si nunca la has visto enfurecida, mejor déjalo así.


Tauro no es una mujer dominada por objetivos estrictamente mentales, sin que eso quiera decir que no sea inteligente y despierta. En cuanto a seso, está a la altura de los hombres y de las mujeres más dotadas, pero no le preocupa demasiado entender la teoría de la relatividad ni complacerse en abstracciones. Los títulos universitarios múltiples no la fascinan ni la impresionan; uno es suficiente para ganarse su respeto.


Una mentalidad práctica, el sentido común y la capacidad de entender lo fundamental de cualquier tema son lo esencial en ella. Pero la típica muchacha Tauro no es una intelectual que se divierta leyendo a los filósofos, y las ideologías intrincadas no son su fuerte. Su pensamiento es práctico y sólido, sin adornos ni demostraciones de calistenia mental. Tiene los pies bien plantados en la tierra, y en sus firmes talones no hay el menor indicio de que puedan asomar alas. Es raro que las mujeres Tauro sean inquietas; no pierden ni la cabeza ni el equilibrio. Normalmente, la perspectiva taurina es recta y segura, sin deformaciones ni distorsiones (aunque la Luna en Géminis puede provocar en ella algunos remolinos).


Es una criatura estrictamente física, lo que a ti te interesará indudablemente, pero para interesarle a ella, un objeto o una idea tiene que actuar sobre sus afinadísimos sentidos. Tauro se desentiende por completo de cosas que son <<buenas para ella>>, que <<todo el mundo hace>> o que la <<estimularán men-talmente>>. Si acudes a ese tipo de persuasión la harás bostezar. Para que reaccione con auténtico interés, ella tiene que encontrar alguna satisfacción sensual en todo lo que hace.


Es raro encontrar a una mujer Tauro acomodando en un jarrón unas cuantas flores artificiales. Para ella las flores deben ser reales y tener su propia textura o fragancia. En primavera y en otoño recogerá enormes ramos de retama y dulcamara, y en verano llenará la casa de grandes dalias y crisantemos. Su perfume será por lo común exótico y persistente, aunque algunas Tauro se inclinan en sentido opuesto y prefieren la fragancia de un cutis y un cabello limpios hasta la exageración. A las muchachas de este signo les conmueven indudablemente las sábanas recién lavadas e impregnadas del suave olor del sol, o el aroma delicioso del pan que se cuece en el horno.


Les levanta el ánimo el olor del diario de la mañana, la emanación embriagadora de la hierba recién cortada después de una lluvia de primavera, la de una vela de cera al arder o el humo que se eleva de una pila de hojas otoñales. Que esto te sirva de advertencia para usar una buena marca de loción para afeitar, frotarse detrás de las orejas con un trozo de periódico húmedo, meterte una hoja medio quemada bajo la solapa y conectar el sistema de riego antes de darle el beso de las buenas noches. Los olores desagradables la afectan con la misma intensidad, aunque en sentido opuesto.


No es una chica a quien le gustaría tener en su casa un zorrino, aunque lo hubieran desodorizado. No la lleves a comer pescado frito sin llevar contigo un aromatizador de ambientes. El problema está en el olor de la fritura; la fragancia del pescado fresco recién sacado del agua es otra cosa: es natural. Tampoco un establo ofenderá sus delicadas narices. Otra vez, Madre Natura. Si quieres que tu cortejo termine en un éxito olfatorio, tendrás que hacer una lista minuciosa.


También los colores exaltan sus sentidos, cuanto más intensos mejor. Todos los matices del azul te ayudarán a debilitar su resistencia, al igual que el rojo y el rosado. Cuando la vayas a visitar, ponte una corbata azul y una camisa de color rosado fuerte, pero no al mismo tiempo. Recuerda que Tauro también tiene el instinto de la armonía, y no querrás parecer un jardín de infancia mixto.


En la comida exigirá el sabor justo, y generalmente será generosa con los condimentos (a no ser que tenga ascendente en Virgo o en Capricornio). No te olvides de llevarla a lugares donde haya excelentes cocineros, porque una magra hamburguesa y una inexpresiva sopa de guisantes la dejarán emocionalmente fría. Si tienes suerte, será ella quien te invite a comer algo preparado en casa, y lo más probable será que le hayas pedido su mano antes del postre. Cuando una chica de este signo se ata el delantal, no es para preparar tostadas con canela. Siempre será buena idea, si vas a visitarla, ir con el estómago vacío. La Tauro típica puede conquistarte cocinando, y su cocina es una verdadera trampa para cazar hombres.


Los sonidos armoniosos y los efectos visuales bellos la atraen como un imán. La mayoría de las Tauro tienen notable talento para la música y el arte o saben apreciarlos, en todo caso. Es posible que sean muy buenos los dibujitos que hace distraídamente mientras habla por teléfono. Si la invitas a salir, los conciertos y las exposiciones son muy buena idea, y para una luna de miel piensa en las cataratas del Niágara o en el Gran Cañón del Colorado. La majestuosidad de la naturaleza la dejará arrobada.


Si el Niágara resulta demasiado caro, entonces llévala a un parque de diversiones. Probablemente, le encantará andar en la rueda giratoria, sintiendo el viento en las mejillas y escuchando la música del organillo. (La montaña rusa les llamará la atención a sus hermanas de Aries y de Géminis.) Es rara la mujer Tauro que nunca haya estado en una granja ni viajado por el país como autostopista, y a quien no le guste montar a caballo e ir de pesca.


Con toda su sensualidad, la mujer Tauro tiene en el fondo de su corazón una vena retozona. La tierra la atrae con su llamada seductora, y ella responde echando los brazos al cuello de Madre Natura, con auténtico arrebato. Si quieres que con la misma autenticidad te abrace a ti, procura no poner música estridente, no comer ajo sin hacer gárgaras después y no vestir con colores disonantes.


Por último, está el sentido del tacto. Las mujeres Tauro son de las que se quejan de que tu pullover <<raspa>>; su tacto no resulta <<grato>>. Son poco menos que capaces de decir el color de una tela, acariciándola con los ojos cerrados. Los tejidos que usen serán suaves y agradables al tacto, nunca irritantes, y lo más probable es que Tauro se vista con sencillez y buen gusto.


Su naturaleza sensual tal vez no llegue al punto de usar ropa interior de encajes y vestidos rebusca-dos (a no ser que haya un ascendente en Leo o Piscis, o influencia lunar). Prefiere la ropa sencilla y deportiva, los conjuntos caros pero sin exceso de adornos y detalles, y en el vestir persigue ante todo la comodidad; también en las tiendas prevalece su sentido práctico. Si en su carta natal es fuerte la influencia de Acuario, es posible que alguna vez se chifle un poco por los trapos, pero incluso en esas ocasiones lo que elija servirá a algún propósito utilitario.


A medida que la conozcas mejor, te darás cuenta de que esta muchacha puede ser una torre de fuerza. Rara vez se muestra exigente, salvo en lo que se refiere a lealtad, y su disposición es generalmente estable, terrenal y agradable. A la gente le encantan sus modales fáciles y directos; Tauro es tan calmante como un baño templado. Y probablemente a ella le gusten los baños templados, con montones de aceites, lociones y burbujas. Es frecuente que el cuarto de baño de una mujer Tauro parezca el apartamento privado de Cleopatra, y uno puede esperar ver aparecer un esclavo con un abanico de hojas de palmera.


Tal vez tengas que aprender por dura experiencia que a una mujer de este signo no le gusta que la contradigan, especialmente en público; pero eso puedes evitárselo teniendo presente las características de su signo solar. Recuerda que le gusta hacer las cosas con lentitud. Si la urges o la presionas se irritará, y no es prudente hacer irritar a una mujer Tauro. Su tiempo puede ir desde lento a deliberado y persistente; es raro que se muestre impulsiva, pero si la pinchas puede llegar a ser violenta.


La maternidad le sienta a las mil maravillas. Se adecua armoniosamente a su disposición serena y combina a la perfección con lo bovino de su naturaleza. Tauro es tierna con los bebés y adora a los chiquillos, pero a medida que crecen, tiende a mostrarse demasiado estricta y exigente con los niños. En las mu-jeres Tauro hay una vena de inflexible terquedad que hace que les resulte difícil aceptar los múltiples y con-fusos cambios de la adolescencia. La madre Tauro se enoja cuando no se respeta su disciplina.


No aguanta desobediencias ni desafíos, que despiertan toda la furia del Toro. También se le hace difícil tolerar la ociosidad o el desaliño, de modo que lo más probable es que los chicos aprendan a mantener la pulcritud en su cuarto. El amor de este signo por la belleza y la armonía impide que los nativos acepten con calma la falta de esmero y la dejadez. Hijos desordenados y casa desarreglada pueden hacer que la madre Tauro lo vea todo rojo.


Fuera de estas peculiaridades, será probablemente buena madre y, con los años, sus hijos encontrarán en ella más bien una amiga que una imagen materna. La mayoría de los retoños de una mujer de mayo la recuerdan como una madre cálida y maternal durante sus años de infancia, y una compañera con gran sentido del humor con el correr del tiempo. Los años intermedios, aquellos en que la impaciencia juvenil choca con la firme determinación del Toro, pueden dejar algunos recuerdos desagradables.


Pero la madre Tauro defenderá leal y valientemente a sus hijos de los peligros externos y les enseñará a imitar su propia honradez y valentía. Las mujeres Tauro jamás son remilgadas. Es raro verlas llorar o quejarse. Son las mujeres que sin decir palabra se ponen a trabajar hasta que el marido termine sus estudios de medicina o toman un trabajo para hacer en casa si la familia pasa temporalmente por una crisis financiera. Pese a la lenta deliberación de sus movimientos y a su frecuente necesidad de descanso, las mujeres Tauro no tienen nada de holgazanas; trabajan con empeño.


Son capaces de treparse a una escalera para rascar o pintar las paredes con la fuerza de un hombre, pero necesitan de una siesta por las tardes, para recuperar fuerzas. Tauro marcha orgullosamente junto a su hombre, y es raro que intente dejarlo atrás o cobijarse en su sombra. Más de una mujer Tauro ayuda en sus estudios a su marido, si él está siguiendo cursos especiales en su carrera profesional, o le pasa a máquina la correspondencia comercial que él trae de su despacho. En estas cosas, es una compañera excelente. Las Tauro jamás esperan que las mantengan sin aportar algo, y se sienten muy mal con un hombre que a su vez no aporte, aunque tratan de soportar la situación del mejor modo posible. A las mujeres Tauro les disgustan todas las formas de debilidad.


Su impasibilidad ante el dolor o el estrés emocional es casi milagrosa, y en ocasiones supera incluso a la de la mujer Escorpio. Recuerdo una escena que presencie una vez en un hospital. A una mujer Tauro la llevaban al quirófano para una intervención, grave hasta el punto de que sus posibilidades de sobrevivir a la operación eran muy pequeñas, y ella lo sabía. Era un riesgo calculado. Mientras el marido miraba como la ponían en la camilla de ruedas en que la llevarían hasta la sala de operaciones, ella se dio cuenta de que tenía los ojos llenos de lágrimas, pero no hizo el menor comentario.

En cambio, empezó a hacer bromas, hasta conseguir que las enfermeras, e incluso el médico, sonrieran. Lo último que le oyó decir su familia mientras los enfermeros procuraban entrar la camilla en el ascensor fue algo típico de Tauro. En vez de dirigir a sus seres amados una patética mirada de despedida, se apoyó en un codo para decir enérgicamente a los enfermeros: <<Antes de volver a ponerme sobre este armatoste, consigan un poco de aceite para engrasar las condenadas ruedas>>. Una mujer Tauro jamás deja que los sentimientos anulen su sentido práctico.


Quien se case con una mujer nacida en mayo no se casa con un bebé llorón ni con una buscadora de oro. Tauro espera que él se ocupe de ella y administre con sensatez la economía de la familia. Y cuando se trata de muebles y de comida, espera la mejor calidad, pero también está alerta a las gangas y es capaz de esperar para tener los lujos que anhela.


Dado su instinto de estabilidad, no le resulta atractiva una fortuna rápida y sin cimientos firmes. Prefiere ver que construyes cuidadosamente, de cara al futuro. Para ella es importante producir buena impresión, y son muchas las Tauro que respaldan al marido en su búsqueda de seguridad, invitando a cenar a gente influyente. Una esposa Tauro es el espíritu de la hospitalidad. Es de las que se quedan en vela noche tras noche, cuidando a un niño enfermo, y ruegan por su salud con una fe sólida como una roca, y de las que tiernamente pueden devolver la esperanza a un hombre a quien el mundo ha golpeado, infundiéndole confianza con su propia intrepidez.


Es tan confiable y predecible como un reloj de pie, tan capaz de arreglar una tubería rota o de cambiar un fusible quemado como de hornear un pastel de cerezas o coser un botón. En su corazón hay siempre lugar suficiente y amor bastante para acoger en su hogar a amigos y extraños, y su casa será un puerto para quien acaba de salir de una tormenta. Como decía mi amiga, las Tauro son <<mujeres altas>>.


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Hay detalles potentes que me recuerdan a una tauro maravillosa que conozco:*).

Como dice al final es inmensamente "confiable"... de las personas más confiables y correctas que he conocido en mi vida, y posee mucho amor, ambas cosas ya son algo extraordinario en este mundo!.
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Última edición:
¬.¬) Para Pretty, Maru y demases!


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La Mujer Leo


Es un honor verme, y un favor oírme: Es un gran privilegio cenar y
tomar el té con la Reina Roja, con la Reina Blanca y conmigo.



Es probable que la mujer Leo tenga una cosa que a ti no te gustará. Un álbum de recortes, con fotografías y recuerdos de todos sus antiguos novios. De nada sirve intentar que lo queme: la Leona es una sentimental incorregible.En los bailes no se pierde pieza. Lo más probable es que sea ridículamente popular, y que tengas muchísima competencia cuando pretendas convencerla de que adopte tu apellido para el resto de su vida. Llevarás cierta ventaja si eres conde o marqués de algo; cualquier cosa que suene a realeza, a nobleza o a importante. En realidad, no me puedo imaginar que una mujer Leo se case con alguien de apellido Pérez o García. Aunque es posible.


Todo es posible. Pero lo más probable será que firme Pérez de la Guía. Es casi seguro que ella será el líder social de su grupo y que imperará sobre las mujeres de menor categoría como una reina, pero con una gracia tan fascinante y con tan hermosa sonrisa que, en realidad, a nadie le importará. Es posible que otras mujeres acepten que ella nació para ser reina, para imponer modas, estilos y costumbres. De todas maneras, no les servirá de mucho el intento de usurpar su autoridad.


Parecería que la naturaleza se mostró prejuiciada al dotar a la mujer Leo de vivacidad, astucia, gracia, belleza y simple sex appeal para tres por lo menos... y un poco mas. Si eres víctima de un complejo de inferioridad, mas vale que centres tu atención en algún pájaro de plumas menos brillantes. No esperes domesticarla hasta convertirla en una tímida doncella pendiente de la última de tus palabras. El hombre que espera que una mujer Leo viva en adoración a sus pies vive en el paraíso de los tontos.


Considérate afortunado si ella te acepta como a un igual, te respeta, está dispuesta a ser tu pareja y se deja poseer afectivamente. Ten en cuenta que el mero hecho de dejarse amar por ti es prácticamente como si te hubiera armado caballero. En serio, podría haberte ido mucho peor. Una Leona es mucha mujer, una especie de artículo suntuario, que no se encuentra en la sección de oportunidades.


Es conveniente no olvidar que la mujer Leo puede montar una escena tormentosa y también mostrarse tan dulce e inofensiva como un bote de jalea. Es posible que tenga voz suave y susurrante, fascinantes modales y unos ojos enormes y dulces que se iluminan con deliciosas chispas cuando mira entre las pestañas. Una mujer Leo puede parecer tan tersa y serena como un lago fresco y placido. Cuidado: no es más que un papel que representa porque los críticos lo aprueban.


Pero si le quitas el papel estelar en tu producción amorosa, para relegarla al lugar de doble o de figura de segundo plano, ya verás lo tímida y lo sumisa que no es. Claro que la mayor parte de las mujeres Leo a quienes rindas tu homenaje dejarán bien en claro que son demasiado dignas y orgullosas para aceptar necedades. Seria muy triste que dieras el tropezón en complicarte la vida con el otro tipo de Leona, la que esconde las garras pero por si acaso, se las afila todos los días.


Para cortejar a esta chica, asegúrate siempre de que se traten de regalos caros y de excelente gusto, y que vayas correctamente vestido cuando se los ofrezcas. Además, tendrás que practicar diferentes formas de lisonjearla. Muéstrate original y creativo, por favor, que frases del estilo de <<Nena, que bien estás>> o <<Este traje te sienta muy bien>> pueden hacer que te veas inmediatamente arrojado de palacio, entre los labriegos.


Las expresiones vulgares y malsonantes la dejan como un témpano. Acuérdate de que estás corte-jando a la realeza. Homenajes y halagos son para ella una razón de existir, pero ten presente que la mujer Leo admira tu masculinidad y no pretende convertirte en un alfeñique. Una mujer de este signo no podría amarte Si no fueras fuerte, pero tampoco permitirá que la insultes con una actitud de condescendencia. En su forma de verlas cosas, decididamente, ella no es el sexo débil. Son muchas las mujeres Leo de constitución atlética y a quienes les encanta el deporte, pero será mas prudente de tu parte que la lleves al teatro y no al partido. El escenario y las candilejas son infalibles para magnetizarla y transfigurarla. (Mejor que saques plateas, olvídate de los palcos.)


Elige una obra en la que la heroína se comporte como tú quisieras ver que ella se conduce esa noche, y tienes buenas probabilidades de que, inconscien-temente, repita el papel hasta el último detalle. Terminados los festejos, no la lleves a un bar a cenar hamburguesas, en la esperanza de que se siente en un taburete a comer patatas fritas, llevada de su amor por ti. Mas vale que la invites con menos frecuencia, pero a lugares de categoría. No es que sólo le interesen los hombres de dinero; por lo general es generosa, no tiene inconveniente, de vez en cuando, en compartir los gastos, y es probable que te cubra de tantos regalos como tú le hagas a ella.


Simplemente, se siente incómoda en un ambiente mezquino. Aunque sea la mujer mas pobre del mundo, la nativa de Leo se las arreglará para ahorrar las moneditas necesarias para comprar cortinas para las ventanas, anillos para los dedos y ajorcas para los tobillos. Es posible que alguna vez se de una vuelta por los suburbios, pero por curiosidad, como espectadora, manteniéndose a distancia de la multitud. La pobreza la deprime y la hace sentirse físicamente mal. Si vistes con desaliño y le ofreces como vivienda una choza, no te hagas ilusiones.


Hay un cuento de una dama francesa que, en los jardines de Versalles, preguntó a su amante si la gente del pueblo conocía esa exquisita emoción que era el amor. Cuando le aseguraron que sí, exclamó con ofendida sorpresa: <<¡Pero si es demasiado bueno para ellos!>>. Probablemente era una Leo.


No culpes a la Leona si de vez en cuando es arrogante y vanidosa. Por naturaleza, se siente por encima de las masas, y es raro que la gente se resienta, porque cuando se siente amada y respetada, Leo puede ser la más buena y generosa de las mujeres, capaz de mostrar auténtico afecto por los niños, los desvalidos y los desamparados. En realidad, no tienes por que esperar que se baje de un trono que por derecho de nacimiento le pertenece. Si es una típica hija del Sol, será graciosa y deslumbrante y serán muchos los que reconocerán alegremente en ella a un ser extraordinario. Y en verdad lo es. Es inteligente, ingeniosa, fuerte y capaz, sin dejar de ser al mismo tiempo deliciosamente femenina. Nadie que esté en sus cabales podría considerarla vulgar.


Si tu dama es Leo, sabiendo halagarla llegarás donde quieras; ya sabes que esa es su debilidad secreta. Y te diré otro secreto, si es que piensas casarte con ella: terminará por cansarse de su jaula dorada y querrá vagabundear por la selva para ver que es lo que hacen todos los demás felinos. Estar confinada bajo un techo y cuatro paredes puede quitarle rápidamente el brillo.


Déjala que disfrute a su manera. Se te marchitará en la rama si se ve obligada a no ser más que una ama de casa, a menos que tengas el dinero suficiente para que ella pueda recibir continuamente a sus amigos y derrochar en la decoración de su hogar. Por lo general, Leo es una alhaja como esposa. Será raro que la encuentres descuidadamente envuelta en un albornoz, con los rulos puestos y la cara cubierta de crema, y no porque descuide sus tratamientos de belleza.


La mujer típica de este signo se pasa horas frente al espejo y gasta una fortuna en cosméticos, pero lo que quiere que tú veas son los resultados, no la estrategia. En ocasiones, tendrás la sensación de que eres tú quien mantiene a toda la familia de su peluquero. <<Cariño, ¿realmente tienes que gastar tanto en el salón de belleza?>> suele ser el lamento de mas de un hombre casado con una Leo, pero es que realmente a muy pocas de ellas les gusta arreglarse solas el pelo. Con un champú y un marcado se sienten mimadas, y ya sabes lo que es sentirse mimado para Leo.


A menos que tenga ascendente en Cáncer, Virgo o Capricornio, es posible que tengas que vigilar sus créditos. Es fácil que a Leo se le vaya la mano cuando se trata de renovar el plumaje o de comprar artículos para el hogar o regalos para los amigos. Su guardarropa puede ser muy abundante, y aunque su aspecto sea brillante con vestidos de noche, relucientes de lentejuelas y piedras de fantasía, o con elegantes túnicas escotadas, es probable que si es una chica típica de su signo prefiera la vestimenta informal y deportiva. Le gustan las telas suntuosas y el corte perfecto, pero no necesariamente los volados y encajes.


Entre sus favoritos están las sedas naturales, los buenos tejidos italianos y los tweeds ingleses, importados. Por lo general tiene un gusto excelente, aunque un poco caro. A veces te encontrarás con una Leo que se pasa de la raya y cuya intuición del estilo se pierde entre ropas llamativas y chillonas, pero es una excepción a la norma del gusto tradicionalmente exquisito de las mujeres Leo para la moda.


Cuando invites al jefe a cenar a tu casa comprobarás que es una estupenda anfitriona, y quedarás como un genio ante él, por haber sabido conquistarla. También es probable que deje fascinada a la mujer de tu jefe, porque las chicas leoninas saben ganarse igualmente a hombres y mujeres, con su sonrisa amistosa y su personalidad abierta. Cualquiera que acierte a estar cerca de ella recibirá el calor de su sol; Leo rara vez hace sombra. Como madre, derramará generosamente amor y afecto sobre sus hijos.


Aunque no le resultará fácil ver los fallos de los niños, cuando los vea será estricta. Como no puede soportar que la ignoren, Si los niños no la respetan se encerrará, ofendida, en un regio silencio. Muchas madres Leo tienen una peculiar manera de malcriar a los niños sin dejar de imponer disciplina, por contradictorio que pueda parecer. Es capaz de jugar y retozar con los cachorros, de tener con ellos largas charlas de camarada, pero también les exigirá que se pongan en posición de firmes como soldados, les enseñará modales y les hará obedecer a los mayores.


Al mismo tiempo, existe el peligro de que les dé demasiado dinero para sus gastos y de que no se resista a sus peticiones, aunque sean extravagantes. En cierto modo, es como si diera a su progenie el trato de miembros privilegiados de una familia real, amándolos sinceramente pero sin dejar de esperar que se comporten como es debido, especialmente en público.


Estará orgullosísima de sus logros, y guarde el cielo al extraño que intente dañarlos o los juzgue injustamente. Pese a todo esto, no abrumara a los pequeños; ella es demasiado independiente para estar continuamente encima de ellos, y vivirá su propia vida, sin dejar de vigilar desde cierta distancia a los cachorros. Muchas madres Leo trabajan fuera de casa, pero es raro que los niños sufran de falta de atención. Cuando son mujeres de carrera, las nativas de este signo se las arreglan para equilibrar perfectamente la maternidad y el trabajo.


En ocasiones puede perder su dignidad y calma para convertirse en una gata juguetona, capaz de retozar y hasta de hacer alardes de bufonería. Puede rugir de risa, con alegría animal, pero pasado el momento retornarán la voz satinada y la regia prestancia. No hay quien pueda devolver una observación impertinente o una pregunta grosera con el frío desprecio de las mujeres Leo, a quienes disgusta toda familiaridad con extraños. Aunque puedan mostrar su humor y manifestarse sorprendentemente informales en la intimidad, de los extraños esperan siempre que mantengan su lugar.


En cuanto a la fidelidad, la mujer Leo puede hacerte pensar en un viejo brindis ingles: <<Este por mi, y éste por ti, y éste por el amor y la alegría. Te seré fiel mientras lo seas tú; después, ni un solo día>>. ¿Hace falta decir más? No sientas celos ante su don de convertirse en el centro de la atención en un salón lleno de hombres admirativos. Las cabezas siempre giran al contemplar el paso grácil de la Leona, y ella considera ese homenaje de los hombres como la cosa más natural.


Es posible que incluso busque sus atenciones y se complazca en algún leve e inocente flirteo, porque su profunda necesidad de adulación y de aplauso encubre un extraño temor de no ser lo bastante femenina, y tiene que asegurarse constantemente de que la consideran deseable. Eso no significa que no siga enamorada de ti, aunque le dedique una sonrisa a tu mejor amigo y le diga que su nueva chaqueta deportiva es una maravilla. En cambio, no pruebes tú a decirle a la mejor amiga de ella que te encanta la nueva falda que lleva. Eso es muy distinto.


Si oye que te diriges a tu secretaria de manera más cordial e íntima que <<señorita Fulana>>, es posible que tu gatita deje de ronronear y te produzca un rasguño. Ya se que no es justo. Pero si quieres ser el orgulloso poseedor de ese suntuoso y elegante plumaje, tendrás que hacer algunas concesiones. Después de todo, ser dueño de un pavo real no tiene nada que ver con poseer un cuclillo o una paloma arrulladora. Halágala en su vanidad. Es probable que ella sea importante por derecho propio, porque son pocas las mujeres Leo que pueden resistirse a competir con los hombres en cuestiones de prestigio, cuando no de dinero. Tu Leona puede ser cualquier cosa, desde actriz a cirujano.


Una de mis mejores amigas –y una de mis favoritas de este signo– es una conocida psiquiatra neo-yorquina. Admito que es una profesión que le permite dar sermones y consejos (el pasatiempo favorito de Leo), pero lo hace con una sonrisa tan cálida, con tal brillo en los ojos y una simpatía tan profunda, que sus pacientes se sienten mejor por el solo hecho de estar en la misma habitación que ella.


Su marido le brinda todo el respeto y la adoración que ella considera su regio derecho, pero también él tiene una profesión que lo pone a su altura: es un gran escritor y poeta, talentos que siempre impresionan el sentimentalismo de Leo. En escena, comparten igualmente el cartel ante las candilejas, pero entre bambalinas, el hombre y el que manda es él. La fórmula es perfecta para domesticar a la Leona.


Y esa es la clave para una relación sin problemas con Leo. No dejes que ella ahogue tu personalidad pero no intentes tampoco pasar por encima de ella. Pon una estrella grande y brillante en la puerta de su camerino, y tonifica tu propio yo. Bien sabes lo que vales, ¿no? por haberte ganado la mano de la orgullosa Leona. Entre nosotros, ¿cómo lo conseguiste?.


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:p Uys...! Saludos a mis amigas Leo :*)!
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La Mujer Aries


–¿Pero es que no vas corriendo a ayudarla? –preguntó Alicia.
–¡Es inútil, es inútil! –dijo el Rey–.
–Corre con tan tremenda rapidez que sería como intentar dar caza a un Bandersnatch.
¿Con que estás enamorado de una muchacha Aries? Pues no sé si felicitarte o compadecerte.



Cuando Byron escribió que "el amor del hombre es cosa aparte de la vida del hombre; para la mujer es toda su existencia", se olvidó de que había mujeres Aries. Una mujer Aries puede pensar que el amor es toda su existencia, pero está demasiado absorta en el mundo que la rodea, por no hablar de lo vitalmente absorta que está en sí misma, para que el amor sea realmente el comienzo y el final de su vida. Aries puede pasarse sin un hombre más fácilmente que cualquier otra mujer.


Claro que pasarse sin un hombre no significa pasarse sin romance. La mujer Aries necesitará siempre de ese héroe de sus sueños por quien suspira en su corazón. Es posible que esté muy lejos en el tiempo y en el espacio –o simplemente invisible e inaccesible, oculto en las nieblas del mañana–, pero en una lluviosa tarde de abril, nuestra amiga estará pensando en él. Rondará sus pensamientos cuando caiga la primera nevada, cuando ella escuche cierta canción o vea destellar un relámpago.


Sin embargo, por más que suspire por él, si no se da en forma inmediata la presencia física de un varón, la mujer Aries no le echará terriblemente de menos. Cualquier cosa que él pudiera hacer, yo puedo hacerla mejor: eso es lo que ella piensa. La muchacha Aries se abre sola las puertas. También se pone sola el abrigo, libra sus propias batallas, se aparta ella sola la silla, llama el taxi y se enciende el cigarrillo sin necesidad de ayuda masculina. Para ella, hacerlo sola es la manera mas rápida de hacer algo.


Naturalmente, no es una actitud que guste demasiado al vulnerable ego masculino. La joven marciana está decidida a tomar la delantera, a ser la primera en emprender la acción, y en ello incluye tomar la iniciativa para empezar un romance. Entre todos los signos solares, son las mujeres Aries las que más probabilidades tienen de declararse, especialmente si el hombre no se decide a hacerlo. Y, amigo mío, ese es el único momento en que puedes demostrarle sin peligro tus sentimientos: cuando ella se te declare. Si lo haces antes, estás corriendo un albur. Ten mucho cuidado con tus iniciativas cuando la chica es Aries, porque a ellas les gusta dirigir la relación amorosa.


Más vale que te asegures bien de haberte metido su corazón en el bolsillo antes de intentar rodearle la cintura con un brazo y darle un beso de despedida, porque si no, es posible que te lance un gancho de derecha en la mandíbula y huya como una cervatilla asustada. Pero no te confundas. La razón de su huida no es su modestia virginal, ni el miedo a tus apasionadas intenciones. Con eso puede arreglárselas muy bien. Si escapa es por el temor de verse complicada con un esclavo reverente o con un cachorrito enamorado, porque cualquiera de esas cosas le arrancaría lágrimas de aburrimiento.


Muéstrate indiferente, mantenla en la incertidumbre, y lo más probable es que sea ella quien te arrincone. Un hombre que se resiste a su influencia es siempre seductor para una Aries, que no puede entender que él no está fascinado por sus indudables encantos. Entonces, su naturaleza marciana no dejará piedra sin mover para demostrar que ella es deseable, aunque él no le despierte ningún interés duradero.


El arquetipo de la mujer de este signo es Scarlett O'Hara. Como ella, la joven Aries conseguirá tener a sus pies a todos los varones existentes en ciento cincuenta kilómetros a la redonda, mientras su terco corazón se derrite por el único hombre que, por la razón que fuere, le resulta inaccesible. Como Scarlett, la mujer regida por Marte es capaz de adaptarse rápidamente para sobrevivir, para hacer frente a un ejército que avanza y para, con helada tranquilidad, atravesar de un balazo la cabeza de quien signifique una amenaza para sus seres queridos.


El momento en que Scarlett muestra mejor las características del signo es cuando hambrienta, sola y sin amigos, sin aguantar a que un hombre corra en su auxilio, levanta los puños al cielo para gritar: "Sobreviviré, y jamás volveré a tener hambre... ¡Pongo a Dios como testigo de que aunque tenga que mentir, estafar, robar o matar, jamás volveré a tener hambre!". Y mucho después, con el corazón destrozado, muerta la hija que amaba y cuando el único hombre que ha amado en su vida está a punto de abandonarla, esta mujer típica de Aries todavía es capaz de decir: "Ya se me ocurrirá la manera de hacerle volver. Jamás ha habido hombre a quien no pudiera conseguir, si he puesto en él mi mirada... Después de todo, ma-ñana será otro día".


Si, Scarlett O'Hara nos da una nítida imagen del primer signo solar del zodiaco, con toda la fuerza de Marte y con su capacidad para rehacerse de la tragedia; apta para desempeñar hasta sus últimas consecuencias el papel femenino, con sus caídas de ojos y una oportuna lagrimita, pero igualmente capaz de hacer un trabajo de hombre cuando no hay hombre a mano. Un cuidadoso estudio del personaje Scarlett permitirá al lector tener una clarísima imagen de lo que le espera con una Aries... y, naturalmente, también de las recompensas que puede esperar después de haber tenido la valentía de cortejarla. Es posible que su impulso agresivo sea difícil de soportar, pero su radiante optimismo y su fe en el mañana pueden resultar muy estimulantes.


A las muchachas Aries les encanta que las halaguen, pero con sinceridad. Hazle saber a tu chica que la admiras, pero sin ser demasiado florido ni meloso. La lealtad de las Aries en amor es total, siempre que su galán sepa mantener vivo el sentimiento, porque son muy sentimentales. En ellas se da la contradicción típica del signo: no quieren que las persigan, pero pierden rápidamente el interés por quien se muestra demasiado indiferente. Una Aries no quiere un varón completamente dominante, pero tampoco se entusiasmará por un hombre que se eche a sus pies para adorarla.


Antes de que el amor pueda aportarle la felicidad, la mujer Aries debe responder al eterno desafío de Marte: el intenso deseo de controlar al amante, en conflicto con el secreto anhelo de ser controlada por él. Increíblemente idealistas, son mujeres que a veces buscan en vano el valiente caballero de armadura resplandeciente que las embargue de emoción y conquiste el mundo para ofrecérselo en bandeja, sin que eso les haga sacrificar su virilidad. Como tal personaje no existe más que en los cuentos de hadas y en las leyendas de la corte del Rey Arturo, es frecuente que la mujer Aries ande sola, sin estrella que la guíe.


Sus días son luminosos y llenos de emoción, como oscuras y llenas de nostalgia suelen ser sus noches. Sin embargo, cuando sus sueños derrotados se convierten en ardientes cenizas, cuando ya uno piensa que la llama se extingue, Aries se levanta de un salto para encender otro fuego. Para amarte, la mujer Aries debe estar orgullosa de ti, pero no exageres tu importancia hasta el punto de dejar de prestar atención a los talentos y las capacidades de ella. Aunque te exija mucho, te lo devolverá con creces. La joven Aries puede ser generosa en exceso con su tiempo y su compasión, compartir alegremente posesiones y dinero, pero cuando se trata del amor es lista y llanamente avara. En cuanto a las relaciones amorosas, su lema es "lo que es mío, es mío", y no hace falta mucho para provocar una explosión de celos.


No se te ocurra admirar en presencia de ella a tu actriz favorita, ni tener demasiadas atenciones con sus amigas. El hombre casado con una mujer Aries hará bien en buscar un secretario varón. Si no siente que es la primera para ti, en todos los sentidos, no tardarás en preguntarte por que han desaparecido tan rápidamente la intensidad de la pasión y la emoción subyugante. Cuando la mujer Aries se siente realmente herida, su fuego se convierte en hielo. Su fuego arde intensamente y se extingue con rapidez; su hielo puede ser eterno. No lo olvides, si es que ella te interesa en serio... y es poco probable que ella quiera interesarte de ninguna otra manera. Aries juega a todo o nada.


Son mujeres que ponen a su amado en un pedestal y esperan que viva de acuerdo con una imagen de imposible perfección, negándose tercamente a advertir que tiene los pies de arcilla, hasta que se le aflojan de tal modo que incluso ella tiene que notarlo. Jamás critiques al amante, al marido o a los hijos de una mujer Aries, a menos que te hayas puesto un traje de amianto. Son mujeres capaces de ser exigentes, egoístas, y de hacer observaciones hirientes si alguien arroja un cubo de agua fría sobre lo que es suyo. Pero también pueden ser gentiles y delicadas cuando se las sabe tratar.


Como las Aries prefieren la compañía masculina a la femenina, y solicitan la admiración de todos los hombres que las rodean, entre los nueve y los noventa años, con una de ellas te sobrarán las oportunidades de sentir los aguijonazos del pequeño monstruo verde de los celos. Olvídate de ellos. Si ella se mostrara contigo orgullosamente posesiva, ni por un momento aguantará que tú seas posesivo con ella. Una mujer de este signo insiste en tener completa libertad, tanto antes como después de casarse. Vaya donde vaya y haga lo que haga, tendrás que confiar en ella, por más que ella no tenga en ti una fe semejante (a menos que haya aprendido por las malas a controlar sus emociones).


De todos modos, la cosa no es tan dura como parece, porque una vez que Aries se entrega de verdad, es fiel. Es raro que la joven Aries pueda amar a dos hombres al mismo tiempo; simplemente, su honradez no le permite el engaño. Si no median circunstancias excepcionales, te hará saber con toda claridad que su amor ha muerto antes de entablar una relación seria con otra persona. Es una mujer capaz de pasión profunda y de místico idealismo, entretejidos de las maneras mas extrañas. En una relación que ella sienta como auténtica y perdurable, no habrá lugar para reticencias, astucias femeninas, maniobras de coquetería o juegos tontos.


Su amor es directo, como su forma de hablar y de actuar. Hay algo limpio y fresco en la sencillez de sus emociones que, así y todo, la llevan a veces a aguas demasiado profundas para ella. Es posible que tengas que domesticarla un poquito, pero si te ama de verdad, lo aceptará con una docilidad sorprendente. Las mujeres de Marte suelen ser mujeres de carrera, capaces de desenvolverse bien en la misma profesión que un hombre, desde corredor de Bolsa a agente inmobiliario. También pueden lucir un lindo perfil o una pierna bien torneada en ocupaciones estrictamente femeninas, como la de actriz o la de modelo. A veces resulta difícil conseguir que una muchacha así deje su trabajo por un hombre, si es una carrera o una profesión autentica.


Tal vez durante un tiempo lo abandone todo, mientras se sienta inundada por el resplandor del romance y se imagine una casita de novela para los dos solos, junto al mar (ya que es típico de la imaginación Aries ir directamente a las partes gratas e ignorar las aburridas). Pero cuando haya que darle una mano de pintura a la casita, cuando en el techo aparezcan goteras y el resplandor inicial comience a oscurecerse, es posible que Aries se ponga ansiosa por sacar de nuevo a relucir su carta de trabajo. No hay que impedírselo. Será mucho más feliz y se sentirá más enamorada –y hasta más dulce– si se le permite llenar sus ratos de ocio con algo que le interese. Las emociones insatisfechas pueden llevar al marciano a convertir un grano de frustración en una montaña de problemas.


Prácticamente, no hay nada a lo que una mujer de ese signo sea incapaz de hacer frente. Ya se trate de una cosa importante o simplemente de algo que se le ocurra para alegrar su vida, algún intento hará por conseguirlo, sin importarle si es práctico o no. Conozco una mujer Aries que, por razones financieras, se vio obligada a vivir durante varios años en dos habitaciones, con el marido, cinco hijos bien inquietos y un perro. Es una situación bastante sofocante y cuya sola perspectiva puede despertar algunas dudas en una mujer con sentido común. En una marciana, no. Esta se las arregló para enfrentarla, aunque quizás alguna vez sufriera momentos de malhumor.


Cuando estaba en esa situación, un astrólogo le leyó su carta natal y le señaló que sus aspectos planetarios mostraban un largo periodo de gran estrechez en su vida. Ella se quedó muy intrigada. <<¿Y cuando parece que pueda ser eso?>>, quiso saber. La misma impulsiva Aries un día sintió repentinamente la urgencia de agregar un perro más al grupo que acampaba en sus dos habitaciones. Tenía la sensación de que el mimado de la familia necesitaba compañía femenina; se le veía muy solo. Además, a los niños les pareció una idea realmente sensacional.


El descubrimiento de que el segundo perro no sabía comportarse en una casa la arredró sólo temporalmente. Decidida como un sargento instructor, asignó turnos para que todos los miembros de la familia fregaran sucesivamente la alfombra. Cuando comprobó que de todas maneras jamás volvería a quedar como antes, analizó la situación para tomar una decisión. ¿Deshacerse del segundo perro? No faltaba más. Nuestra amiga abrigaba la secreta esperanza de que pronto habría cachorros. De alguna parte tendría que salir el dinero para comprar una alfombra nueva. Y lo raro fue que apareció.


En cuanto a los cachorros, ella estaba segura de que se produciría algún milagro y de que todo el batallón podría ir a vivir a un apartamento nuevo antes del feliz acontecimiento. Y lo raro es que eso ocurrió. Los milagros tienden a sucederle a la gente que cree en ellos, y vaya si las mujeres Aries creen. A veces, hasta el límite de la bobería. Su precipitación puede llevarlas a meterse en líos muy complicados, y es posible que ya tengan algunas canas antes de aprender a no pasar por segunda vez por la misma complicación. Aries no suele aprender de la experiencia. Ganas no le faltan, pero su disposición no le deja. De nada sirve alertar a una mujer típica de Aries con la bíblica advertencia de que <<el orgullo va antes de la caída>>, frase que ella interpreta desde que se la enseñaron por primera vez, en el sentido de que "cuando pierdas el orgullo, caerás".


Nunca te inquietes por la posibilidad de que tu amada Aries sucumba a los encantos de un lobo. Es tan inmune a los lobos como a los playboys, y corre mucho mas peligro de verse seducida por algún idealista que defienda una causa, sobre todo si es una causa perdida. Pero ni siquiera con él se privará de hacer valer con frecuencia su individualidad, rasgo éste que jamás quedará completamente conquistado en la mujer de Marte, por más que el hombre adecuado pueda suavizarlo. Una muchacha Aries te hará regalos, te prestará dinero, te cuidará cuando estés enfermo y te ayudará a conseguir trabajo. Y esperará lo mismo de ti.


Aunque ella lo niegue con vehemencia (con la misma vehemencia que pone en casi todo), cuando se siente triste, tú también tendrás que estarlo. Cuando esté feliz, tendrás que estar feliz. Para Aries, amar es compartir en la igualdad. Tu Aries espera compartir tus hojitas de afeitar, tu cuenta bancaria, tus amigos y tus sueños. A cambio, tú puedes compartir los de ella. Claro que es posible que su hojita de afeitar esté rota, su cuenta bancaria casi en cero, sus amigos un poco dispersos, y que sus sueños sean demasiado fantásticos para que tú te los tragues, pero ella no se mostrará egoísta con sus posesiones.


Que no le cuentes un secreto puede hacerla enfurecer, y no es buena idea hacer enfurecer a Aries. Jamás hagas que se avergüence de tu lenguaje, de tu ropa o de tu conducta en un lugar público. Ella jamás te hará sentir incómodo, por lo menos en esos aspectos. Herir su orgullo o poner freno a su entusiasmo son cosas que pueden poco menos que destrozarle el corazón. Es, ni más ni menos, lo que continuamente le hacen otros. El mundo no perdona a una mujer que no se calla y que se considera mas despierta que nadie. Cuando descubra que, después de todo, la que rige el Universo no es ella, correrá a tus brazos con lágrimas en los ojos, huyendo de su mundo oscuro y desalentador.


Entonces tendrás oportunidad de verla tal como es realmente, indefensa y vulnerable en extremo, pese a toda su confianza exterior. En realidad, no es la mujer invencible, por más que le gustaría serlo. Admira la fuerza y procura imitarla. Es frecuente que la realidad haga pedazos el idealismo de Aries y su fe optimis-ta en la naturaleza humana. Si en esos momentos la consuelas con ternura, es probable que jamás llegues a perderla. Defiéndela siempre contra sus enemigos, porque no te perdonará que no luches en favor de ella o no te pongas de su lado. (Pero prepárate para hacer las paces con ellos cuando Aries las haga, cosa que pue-de suceder en cualquier momento.) Por lo menos, en eso juega limpio: ella también te defenderá.


Una mujer Aries se jugará, desafiante, fama o fortuna frente a cualquiera que lastime a un amigo de ella. Si te ama, su indignación no tendrá límites. Son mujeres de lealtad absoluta. Como esposa, puede ser todo un desafío. Es probable que tenga sus intereses fuera de casa, porque rara vez un hogar será suficiente para sus energías creativas. No esperes que sea un grillito feliz y que se quede cantando alegremente junto al fuego. Como cocinera será bastante competente y mantendrá la casa brillante de limpieza... la parte que se ve, por lo menos. También te coserá los botones y te planchará las camisas, pero a disgusto. Así y todo, si es necesa-rio lo hará. (Una mujer Aries es capaz de hacer casi cualquier cosa cuando es necesario.) Su fuego se parece mas a los destellos de un diamante que al resplandor acogedor y cálido del hogar encendido.


En su naturaleza hay innegablemente cierta fragilidad, y serán mas las veces que te agite que aquellas que te tranquilice. Pero te aportará emoción y sin duda no te aburrirá nunca. Tiene también sus momentos de dulzura que desmienten su impulsividad... para el hombre que tenga la paciencia de sacarlos a la superficie. Las marcianas poseen mayor ternura interior de lo que puede imaginarse quien jamás ha estado en verdad próximo a ellas. Su conversación es muy inteligente y muy frecuente. No te ocultes tras el periódico durante el desayuno. Ella espera encontrar en ti a un compañero; de lo contrario, ya puedes empezar a hacer tú los huevos fritos.


Es raro que se queje de que está enferma o cansada, pero cuando algo le duela esperara compasión por toneladas. Aunque tal vez tengas que sentarte encima de ella para que se quede en cama cuando le consuma la fiebre, prepárate para atenderla como a una inválida si tiene un dolor de muelas. Aries no es mujer a la que se pueda llamar por teléfono para decirle que te quedarás trabajando hasta tarde en el despacho, salvo que te divierta provocar un estallido de fuegos artificiales en pleno invierno. No es que tenga inconveniente en mantener la salsa al calor; lo que en realidad le disgustará es no saber que estás haciendo, y es muy posible que vuelva a llamar para verificarlo. Una esposa Aries le causará probablemente una gran impresión a tu jefe... si puedes convencerla de que no le diga cómo debe administrar el negocio.


Si por un tiempo tú estás sin trabajo, no tendrá inconveniente en ser ella quien traiga el pan a casa, pero jamás podrá respetar a un hombre que gane menos dinero que ella (aunque jamás dejaría a un hombre por esa razón; mas bien se inclinaría a justificarlo con excusas). Si excepcionalmente le da por abando-narse, la primera palabra de desaprobación de su pareja la enviará presurosa frente al espejo y a la botellita de perfume. (En este aspecto, es tan femenina como la propia Eva.) Lo mismo conseguirás si haces un comentario halagador sobre el nuevo peinado de tu secretaria, pero es más peligroso. Además, ya te advertí que es mejor que optes por un secretario.


En la mujer marciana hay una vena de vanidad que la hace sensible a todo –desde su edad a la más inocente observación sobre lo cansada que se la ve– lo que ella puede interpretar como que tú piensas que parece una vieja ajada. Si no mantienes viva la pasión y el romance en tu matrimonio, la harás amargamente desdichada, y como Aries está dispuesta sin demora a cambiar una situación que provoca desdicha, es fácil que se llegue a una separación apresurada o a un divorcio impulsivo. En la mayoría de los casos es una imprudencia permitir que Aries administre los fondos de la familia, pero si eres de los que te tomas las cuestiones económicas con espíritu deportivo, puedes intentarlo.


Como madre, Aries tendrá buen cuidado de que el bebé esté limpio, feliz, sano y amado. No es fácil que lo tome en brazos cada vez que llore, que esté pendiente de él ni lo sobreproteja, pero sus hijos recibirán una lluvia de besos cálidos e impulsivos y de estrechos abrazos. Una madre nacida en abril enseñará a sus hijos a creer en duendes. Los llevará a pasear por el parque y les enseñará los collares rutilantes que se olvidaron sobre el césped las hadas que vinieron a danzar a la luz de la luna, y que para otra gente son simples gotas de rocío sobre la hierba. La madre Aries crea para sus hijos un mundo mágico de fantasía: es el mundo en que ella misma vive.


No será tolerante en exceso, insistirá en una disciplina estricta y probablemente tenga la suerte de ver a sus hijos convertidos en adultos independientes. En psicología infantil, sus armas favoritas son un remo de madera, cuentos a la hora de acostarse y el beso de buenas noches. Es mujer que puede ser temperamental hasta lo irrazonable, y capaz de provocar algunas escenas violentas. Pero con la misma rapidez con que se enciende, su có1era se disipa como una tormenta de verano: Aries es incapaz de guardar rencor, buscar venganza o complacerse en la autocompasión o en la amargura.


Después de una tormenta, su optimista naturaleza de abril reaparecerá como el arco iris que surge súbitamente, pasado el chaparrón. Muchísimas personas afirmarán que la mujer Aries es totalmente masculina, pero no hay que creerles. Por debajo de su cáscara relampagueante y enérgica, es pura femineidad; tal vez demasiado mujer para el hombre medio. Pero no hay duda de que un caballero de reluciente armadura no es un hombre medio. Si hay por ahí algún valiente caballero solitario que me escuche, esta es el hada de sus sueños, digna de todos los dragones que tendrá que vencer para conquistarla.


No hay que olvidar que es sensible, a pesar de su radiante sonrisa de bravura (que no es más que su escudo contra el dolor). Quien pueda transformar al Carnero en cordero, tendrá una mujer honrada y apasionada, leal y fascinante, bien que pueda ser un poco impulsiva, autoritaria e independiente. Bueno, pero es que no se puede tener todo, ¿no? La joven Aries te ayudará, lector, a encontrar tus ilusiones perdidas, y tendrá una fe ciega en todos tus sueños. Y si dices que no tienes ninguno, pídele alguno prestado; ella tiene muchísimos. Si crees en ella la mitad de lo que ella cree en ti, juntos podréis hacer algunos milagros.



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Hay aspectos que siempre me han gustado mucho de... Scarlett O'Hara:p!

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El Hombre Tauro


Vaya, si yo no diría nada aunque me cayera de encima de la casa.
... Solo que sería mejor que no te acercaras mucho. Generalmente,
cuando me excito de veras; ataco todo lo que veo.


Tal vez te imaginas al típico nativo de Tauro como un hombre práctico y callado, tan sensato y a ras de tierra como un par de zapatos viejos. Es verdad; así es. Quizás observes también que es lento para pasar a la acción, deliberado y cuidadoso. También es cierto. Y de todo ello deduces que, lógicamente, no es muy romántico. Decididamente falso.


¿De dónde has sacado la idea de que puedes analizar la naturaleza de Tauro valiéndote únicamente de la lógica? Probablemente de algún Libra que está tratando de impresionarte. Pues se equivoca. La lógica no sirve de mucho cuando estás tratando de resolver el enigma de un símbolo fuerte y masculino como el Toro, regido por un planeta amoroso y pacífico como Venus. A ese nativo de Libra, con su mentalidad despierta, dile que se vuelva a la biblioteca.


El toro puede tardar mucho tiempo en decidir si te quiere como mujer. No será él quien se arroje con un salto olímpico a la piscina del romance, para descubrir cuando ya no está en el trampolín que alguien se olvidó de llenarla de agua. Pero una vez que haya llegado a la decisión de que eres tú, y una vez que su mira sea conquistarte, hará que el enamorado de Libra parezca un aficionado. Puede incluso avergonzar al León flechado y al apasionado Escorpio. Tu sensato, lento, práctico y decidido varón Tauro es capaz de enviarte todos los días una rosa roja hasta que te rindas a su asedio... para casarte, o para lo que fuere.


Incluso puede escribir una oda poética y enviártela tímidamente por correo, sin firmarla, seguro de que tú sabrás quien la manda. Como enamorado, Tauro es tierno, suave y protector. Su naturaleza sensual le hará sensible a tus perfumes exóticos, a la tersura de tu piel y a la suavidad de tu pelo. Es posible que no te lo diga directamente en florido lenguaje, pero encontrará la forma de hacerte llegar el mensaje. En el Toro, el sentido del tacto es una cosa tangible.


Este signo terrestre, fijo y negativo, está lleno de contradicciones en amor. A Tauro le gustará verte envuelta en pieles suntuosas y colores profundos. Puede llevarte un fragante ramillete de violetas recién cortadas para tus pieles, y a la ancianita que las vende le dejará una enorme propina en la cesta, porque le recuerda a su madre. (Sin embargo, tú no le recordarás de ninguna manera a su madre ni a su hermana, salvo a la hora de protegerte de las miradas agresivas de otros Toros que pretendan pasar a la acción.) La música removerá sus emociones y lo pondrá en estado de ánimo más favorable al amor. Es casi seguro que tiene una canción favorita que le hace acordarse de ti cada vez que la oye. Es la que siempre selecciona cuando echa una moneda en el tocadiscos automático.


Si necesitas mas pruebas de lo romántica que es su alma, el hombre típico de este signo te ayudará a formar tu ajuar con regalos de cumpleaños de porcelana y platería, y para Navidad creerás que es el propio Santa Claus cuando le veas llegar cargado de paquetes misteriosos y chucherías sentimentales. Es de los que sugieren nadar a la luz de la luna, ir de picnic a un bosque fresco y tranquilo, y caminar bajo las estrellas por una senda campestre. La suya será la tarjeta más grande, mejor decorada y más elocuente que te traiga el cartero para fin de año. Cuando un hombre Tauro te corteja lo hace de verdad.


Lo más probable es que te lleve a cenar a restaurantes sensacionales, con violines y luz difusa, y que jamás se olvide del día en que os conocisteis o de cualquier otro aniversario de los dos. Dime, por favor, ¿es que te hace falta mas romance? Es totalmente cierto que el Toro no es un soñador desaforado como el varón de Acuario. Tauro no te levantará en el aire como haría Leo, ni te prometerá llevarte en una nube rosada a vivir con él en un castillo, durante toda la eternidad y un día, como Aries. Lo más probable es que algún sábado por la noche llegue, a pie, con los planos de la casa que piensa construir para ti, de manera auténtica y que pagará con verdadero efectivo. Es probable que ya haya pagado la entrada inicial de la compra del terreno, o por lo menos del apartamento, antes de que os hayáis comprometido.


Este hombre se lo toma en serio. Cuando el Toro te levante en brazos para pasar el umbral y te deposite firmemente en su casa, que no se parecerá ni remotamente a un castillo, puedes estar segura de que la hipoteca está en la caja de seguridad del banco. Y realmente, eso no puede ser motivo de queja. Cuando ya te encuentres envuelta en la suave manta de seguridad del Toro, abrigada y cómoda, te preguntarás para qué diablos querías esas nubes rosadas. Estarás demasiado ocupada en disfrutar de tus muebles nuevos y de tu flamante cuenta bancaria (o de la certidumbre de tenerla muy en breve) para llorar por esos sueños nebulosos que, de todas maneras, probablemente no se habrían realizado.


Todo esto, claro, si eres una mujer que aprecia los valores sólidos. El problema es que no todas las mujeres son así, pero las chicas sensatas, de 19 a 80 años, aprecian el comportamiento pacífico y campechano del Toro y su naturaleza estable y tranquila. Sus gestos sentimentales, su galanteo práctico y grato pueden ser tan satisfactorios como los poéticos suspiros de un amante más pintoresco o como los osados arrebatos de un Don Juan... y a veces mucho más. Pregúntale a cualquier mujer que haya tenido la sensatez suficiente para hacerse amar de un Toro, recio y firme.


Tauro planea cuidadosamente para el mañana. Así como las ardillas guardan nueces en verano, cuando abundan, para que no les falten en el frío y estéril invierno, tampoco los placeres temporales de una tarde soleada distraerán a Tauro, que siempre estará preparado para el día en que la basura se amontone sin que él pueda apartarla. Y, cosa curiosa, los maridos que pueden permitirse el derroche económico de ir con su mujer a Florida en enero, o enviarla allí para las vacaciones de invierno, suelen haber nacido en mayo. Naturalmente, una escapada romántica con Tauro tiene sus desventajas... no todo es vino y rosas. Para empezar, tendrás que acentuar tus actitudes más femeninas. Ningún Tauro aguantará a una mujer gritona y masculina, que haga restallar el látigo como un domador.


Si tienes opiniones bien definidas, no se las impongas ni te jactes de ellas en público. En privado, Tauro respeta a la mujer inteligente (aunque para él tiene más valor el simple sentido común), pero será mejor que permitas que él sea el más brillante de los dos cuando salgáis a bailar juntos... e incluso si no hacéis más que estar sentados en un restaurante. Si te jactas de mujer emancipada en presencia de sus amigos, puedes esperar una de dos reacciones. Si es un Toro de los primitivos (y te sorprendería saber cuantos hay), lo más probable es que te de un empujón y te zarandee, y hasta una buena palmada en el lugar adecuado cuando lleguéis a casa... o incluso antes de haber llegado.


Si es del tipo mas sofisticado, simplemente se cerrará como una ostra delante de todo el mundo y se quedará como un gran trozo de piedra, sin volver a decir palabra durante el resto de la noche, hasta que tú te sientas tan incómoda que desees que la tierra te trague. También los amigos estarán incómodos. Una situación así puede llegar a estropear una velada, eso sin contar cómo te corta la inspiración. Tu primer impulso será tratar de arreglar las cosas, pero el intento de sacar a Tauro de su obstinación antes de que esta haya seguido su curso es literalmente inútil; es como empeñarse en mover el peñón de Gibraltar.


Si pretendes burlarte un poco de él para conseguir que adopte de nuevo un comportamiento social normal, es posible que termines pensando que ojala le hubieras dejado con su enfado. Un gran trozo de piedra es infinitamente más aceptable que la reacción de Tauro ante quien procura engatusarlo después de haberle fastidiado. Si insistes demasiado, de esfinge silenciosa se transformará en toro bramante, capaz de decir algunas cosas en lenguaje muy prosaico y hacer que tus mejillas se te pongan más rojas aun. Eso, o si no, dirigirse con toda calma al grupo: <<Les ruego que me disculpen, pero tengo que llevarme a casa a la charlatana de mi mujer y enseñarle un par de cosas>>.


Después de eso, te pasarás semanas escondiéndote de todo el mundo. Y todo porque mientras el mantenía hipnotizado al grupo con su opinión sobre la situación política, a ti se te ocurrió decir algo así como: <<Ay, cariño, no seas ingenuo. Si todo el mundo sabe que a Fulano cualquiera le soborna. Con sus antecedentes, nadie le votaría ni siquiera para presidente del sindicato de vendedores de helados en la playa, y menos para diputado. No sabes lo que dices>>. En ese momento es cuando él clava los talones, se cruza de brazos sobre el pecho musculoso y empieza a poner cara larga, o a partirte la cabeza, lo que sea. Si ves que él busca su abrigo, es mejor que tú también te pongas el tuyo.


Es raro que un Tauro deje a su mujer sola y desprotegida entre los lobos, por muy intenso que sea su enfado. Se la lleva consigo, por los pelos si es necesario, de manera que no te hagas a la idea de quedarte para disfrutar de la comprensión de los demás. Cuando él se vaya, te vas tú. Y permíteme que te aconseje que te disculpes antes de llegar a casa, porque él no lo hará. Refugiarte en brazos de mamá tampoco te servirá de nada. Comparte con él la mesa y la cama, en tanto que él pague el alquiler. La interferencia de la suegra es lo último que está dispuesto a aceptar un Tauro. La primera vez que intentes el recurso de <<irte a casa de mamá>> será probablemente la última. Después de haberlo visto furioso una vez, tus padres preferirán echar llave a la puerta y dejar que resuelvas sola tus propios problemas.


Conozco a un Tauro, casado con una mujer agresiva, que encontró una solución muy especial. Simplemente, se niega a aparecer con ella en público. La fuerza irresistible de ella se encontró con un objeto imposible de mover: él. La mujer puede salir y despojar de su masculinidad a todos los hombres que quiera, pero no a Tauro, el Toro. Él tiene gran afecto por su pareja, y en muchos sentidos sus relaciones son excelentes, se respetan muchísimo el uno al otro, pero si ella no aprende a ser sumisa, callarse la boca y dejar que el hombre sea él, tendrá que ir sola a fiestas, reuniones y teatros. Su marido se ha negado a acompañarla desde la vez que con otras parejas fueron a cenar a un lugar elegante. Ella se apoderó del menú y encargó la cena para todos.


Durante el primer plato hizo comentarios imprudentes sobre la corbata y el corte de pelo de su marido, y a los postres le interrumpió varias veces mientras contaba chistes. Ahora tiene que ir sola a cualquier ocasión social porque su compañero se niega a moverse de casa. En realidad, no se le puede culpar. No hace más que mantenerse fiel a su signo solar. Y aun en este caso, el matrimonio sigue siendo só1ido; pero no siempre se tiene tanta suerte, de manera que mas vale que no hostigues demasiado a tu Tauro. Es sumamente paciente, pero no se dejará poner un anillo en la nariz. Tampoco le gusta sentirse ahogado por una enredadera. El Toro es demasiado práctico, y ama demasiado su libertad, para estar bien con una mujer que se le pegue como un sello y de un grito cuando se le cae un pañuelo.


No tiene inconveniente en que su compañera tenga cierto fuego y temperamento; eso le atrae y equilibra su propia madurez. Con una leve sonrisa divertida, Tauro la observará mientras ella se escabulle alegremente, de manera típicamente femenina, como se miraría a un gatito mimado que juega con un ovillo de hilo de brillantes colores. Pero el gatito sabe que cuando el Toro le da un buen tirón al hilo, hay que dejarse de juegos y bromas para escuchar la voz del amo. Nadie puede ser más bondadoso, gentil y tolerante que Tauro, cuando siente segura su masculinidad. Es capaz de hacer cualquier cosa en el mundo por la mujer que ama, salvo dejar que ella lleve los pantalones.


A veces, Tauro puede conducirse como un torpe oso de circo, y su humor suele ser basto y ridículo. Pero cuando la fiesta termine, el Toro no seguirá haciendo el papel de bufón. Le gustan los estudios de mercado, y es raro que se meta atropelladamente en un galanteo serio. Es posible que la chica a quien invita al cine todos los sábados por la noche, desde hace un año, se pregunte intrigada cuando ira la cosa en serio. Tauro necesita tiempo para que en su caldera se forme el vapor suficiente para que la máquina funcione a toda velocidad, pero una vez que ha puesto sus miras en una mujer determinada, no se desvía de su camino. Hasta es posible que olvide su sensatez y su cautela. El varón típico de Tauro es ciego para cualquier advertencia de incompatibilidad cuando ha sido alcanzado por la flecha de Cupido.


Cuanto más se empeñen sus amigos en señalarle posibles obstáculos, mas obstinado se mostrará... y ya sabemos lo que puede suponer ese "más". Por consiguiente, suele suceder que Tauro cometa el error de enredarse con signos de aire y de fuego, cuando en la mayoría de los casos se lleva mejor con los de tierra y de agua. A veces, la combinación resulta beneficiosa. Los opuestos pueden atraerse y seguir atrayéndose. Pero cuando no sucede así, Tauro necesitará mucho tiempo para superar las cicatrices de un divorcio antes de que esté dispuesto a empezar de nuevo con una mujer que armonice mejor con su propia disposición y con su manera de ver. Las perspectivas financieras con un hombre de Tauro son por lo general excelentes; un cuadro en tonos rosados.


Pocos Tarros dejarán de alcanzar, si no la riqueza, la seguridad por lo menos. Hay entre ellos quienes juegan al juego del Monopolio con dinero de verdad, y ganan. El Toro consigue con igual facilidad bienes raíces y dinero efectivo. Es probable que adore el campo, el fútbol, la pesca y el camping. En todo caso, le gustarán las flores, la jardinería y los largos paseos a pie. Prefiere leer libros sobre los valientes héroes de antaño, o las biografías de los constructores de imperios, antes que novelas rebuscadas o profundos tratados filosóficos. La mayoría de los Tarros se suscriben a varias revistas para hombres, algunas terrenales y prácticas, otras que le ofrezcan arrobadoras imágenes femeninas.


Es hombre de la cabeza a los pies, de modo que jamás le ofrezcas esos pulcros sándwiches de miga con el pan descortezado. A Tauro le gusta la buena cocina casera, a la antigua, con muchas patatas y salsa, y el pastel de manzanas como el que solía hacer mamá. Cómprate un buen libro de cocina, aunque él también estará dispuesto a llevarte con frecuencia a cenar afuera. Un Tauro típico no espera que su mujer sea esclava de la cocina (aunque pueda llenarte de ollas y cazos cuando los domingos juega a cocinero y espera que tú laves los platos).


Como padre, el Toro es perfecto. Aunque piense que es importante tener un varón que perpetúe el apellido, será especialmente tierno con las niñas. El padre Tauro es cariñoso, cálido y tierno. Tauro impondrá elevadas normas a sus hijos y esperará que sepan respetar la propiedad y las posesiones. Es un padre paciente, a quien no le importará que los niños sean lentos para aprender las lecciones, con tal que las aprendan bien. Está convencido de que a las mentes jóvenes hay que llevarlas lentamente hasta la madurez. Tal vez encuentras que pone demasiado el acento en las cosas materiales, y que cubre a los niños de regalos caros, que ellos no saben valorar. Pero también los cubrirá con su tiempo y su dedicación, y cuando sea necesaria no faltará su mano firme para la disciplina.


En general, vivir con papá Tauro puede ser una grata experiencia, llena de amor (salvo en las raras ocasiones en que el Toro carga ciegamente, lleno de furia, y toda la familia corre a esconderse detrás del piano). El marido típico de Tauro es generoso hasta el exceso con su mujer. No te privará de buenas ropas, perfumes y chucherías; tendrás muebles elegantes, pero prácticos, y la despensa siempre llena. Es raro que el Toro ahorre en muebles, ropa o comida, pero tampoco el dinero le hará agujeros en los bolsillos (salvo que en su carta natal haya aspectos impulsivos en lo financiero). Le gusta el lujo, pero no está menos enamorado del dinero, y tomará medidas para que el suyo sirva para comprar algo más que las palabras de un vendedor.


Es un hombre que trabaja mucho y necesita mucho descanso. Ocúpate de que no le falte, porque cuando está cansado y no se siente bien, puede convertirse en un gruñón insoportable. Jamás le fastidies ni le acuses de dejadez, porque sería como agitarle una bandera roja en la cara. Él vive la vida a su propio ritmo, que es tranquilo, y no se deja urgir ni llevar por delante. Su velocímetro no registra más que una velocidad: moderada. Los intentos de hacerle girar alegremente en el tiovivo de una continua actividad social están condenados al fracaso. Al Toro le gusta recibir en su propia casa, pero prefiere unas pocas personas de intereses afines y no una multitud.


Invita a los viejos amigos, o a los que tengan metas y ambiciones importantes, y se mostrará cordial y hospitalario. Si insistes en abarrotar su casa de tipos frívolos y sin nada en la cabeza, es posible que simplemente desaparezca de la escena... a veces para siempre. Cómprale una de esas tumbonas en la que pueda recostarse cómodamente. Nada de ruidos fuertes, radios ni televisores vociferantes, por favor. Que tu casa esté llena de música, belleza y paz. Recuerda que los pantalones le van a él mejor que a ti. Si eres su mujer, no podrás pedir hombre mejor. Nadie te tratará jamás con tan graciosa considera-ción, y por eso, realmente merece ser respetado. El amor de Tauro es simple, llano y sincero.


Su naturaleza afectuosa y la atención con que te halagará harán que te sientas segura de ser amada, pese a todos tus defectos y fallos que otros hombres criticarían sin cesar. Tauro ofrece una lealtad y una dedicación perdurables, con un corazón fiel; y todo eso significa seguridad afectiva. Si a eso se une la seguridad financiera y el espíritu romántico, no tienes nada más que pedir. Estamos de acuerdo en que es obstinado, pero no olvides que la obstinación, según como se la mire, es paciencia, y la paciencia es una virtud rara.


Compra una buena manta, peluda y esponjosa (Tauro adora las cosas que son suaves al tacto), arrópalo con ella cuando se siente en su sillón y léele la información de la Bolsa. Procura que no le falte su baño caliente con sales perfumadas y mucho jabón de su fragancia preferida. Sírvele un buen plato de copos de avena, y estarás segura de que tienes a tu lado a un hombre fuerte y dulce, que te protegerá de todas las tormentas. Satisfacción, se llama eso. ¿No te parece agradable?


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¿Mujeres Leo, Escorpio, etc etc?. Bah, las mujeres solo deberíais de ser Tauro; por aquello de que todas sois unas tarugas :rolleyes:

Crissty, ¿qué hay del hombre Piscis? :dime:

Yo he encontrado lo siguiente (referente a mi signo solar también):

Perfil de los
Signos Solares​
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Piscis
febrero 19 - marzo 20

Piscis es duodécimo signo del Zodíaco. Es el último signo del ciclo zodiacal, y por eso reúne todo que han aprendido los primeros once signos del Zodíaco; o sea, Piscis asiste a la humanidad para alcanzar los más elevados niveles espiritualidad e iluminación. Los que han nacido bajo el signo de Piscis son personas abnegadas y espirituales, con frecuencia son místicos por naturaleza, y receptivos de los mensajes del inconsciente colectivo. Piscis es el signo de los Sueños y los Secretos. Representa lo invisible, y también a los enemigos ocultos.


Como es el signo duodécimo, Piscis también rige la Casa Duodécima: La Casa del Inconsciente. El símbolo astrológico de Piscis son Los Dos Peces. Ellos reflejan la naturaleza dual de la vida: cada pez nada en una dirección opuesta al otro, representando la realidad y el ensueño, las facetas visibles y conscientes y las ocultas e inconscientes. Piscis a veces se comporta de manera sinuosa y actúa sin dirección aparente. Los que han nacido bajo el signo de Piscis no se caracterizan por poseer iniciativas agresivas; tienen facilidad para encontrar una guía en la vida, y se contentan con llegar a los destinos a los que la vida los lleva. De esta manera, Piscis ejemplifica la Cualidad Mutable que se le asigna. Son los adaptables del Zodíaco, receptivos a las influencias de los demás, a veces se pierden su mismo centro. Dentro del Zodíaco, Piscis es el opuesto a Virgo, el Signo de la Salud. Mientras que a Virgo le interesa la vida consciente y los aspectos concretos, los Piscianos tienden a contactar con el inconsciente, con la vida emocional y mental. Ambos signos están al servicio de los otros; los Piscianos son piadosos y sacrificados, a veces se victimizan en exceso.


Piscis está regido por los planetas Júpiter y Neptuno. En antigua Mitología Romana, Júpiter (y su equivalente griego, Zeus) es el Rey de los Dioses. Neptuno (y su equivalente griego, Poseidón) es el Dios del Mar. Júpiter rige a Piscis y Sagitario. Piscis es el aspecto femenino, o nocturno, y Sagitario es el masculino o el aspecto diurno. Ambos son profundamente místicos, pero mientras Sagitario se identifica con el maestro y el pensador, a Piscis le importa ayudar a los demás y ser compasivos de manera irrestricta y espiritual. Cuando se descubrió Neptuno, los astrólogos modernos lo asignaron como regente de Piscis. Neptuno representa todo que es parcialmente irreal, ilusorio: los ensueños y engaños, las fantasías, el drama, el arte y la espiritualidad. Todas estas frecuencias son importantes para los que han nacido bajo el signo de Piscis; muchos de ellos tienden a desarrollar vocación por lo esotérico (no siempre desde lo religioso), y otras veces son grandes artistas. Los Piscianos son idealistas, a veces sus deseos son vagos y utópicos. Cuando la realidad los agobia, pueden llegar a ser pesimistas, aunque tratan de adaptarse, y están abiertos a cambiar sus metas, si fuera necesario.


El Elemento asociado con Piscis es el Agua. Los Signos del Agua son emocionales: tienden a responder al mundo a través de sus sentidos, en lugar de imponerse con acciones físicas, prácticas o mentales. En Piscis, el Agua les aporta conexión con la intuición y el inconsciente colectivo. Los que han nacido bajo el signo de Piscis son compasivos, sutiles e imaginativos; a veces, tratan de convertirse en seres indispensables para los demás. Los Piscianos suelen ser románticos y susceptibles, pueden escaparse a través de sus pensamientos y evadirse de la dura realidad. A veces son desordenados, pueden dilatar los procesos cuando las cosas se ponen difíciles. Los que han nacido bajo el signo de Piscis son fieles y tiernos, frágiles y a veces tímidos, a menudo se sienten lastimados. Los que han nacido bajo el signo de Piscis son cautos y modestos. A veces son evasivos y callados, les cuesta expresarse. Son respetuosos y sensibles, con frecuencia tienen talento notable para la música, la pintura y el baile.
Como rige la Casa Duodécima, la cual simboliza el imperio los sueños, los que han nacido bajo este signo se fascinan con lo onírico y lo sobrenatural. También son más susceptibles que los otros signos las adicciones, y tienden a vivir en mundos invisibles lejanos y fantaseado. Durante el tiempo libre, los Piscianos tratan de aliviar sus tensiones a través del ejercicio. Gozan especialmente con las actividades que se contactan con el elemento del signo, el Agua, como nadar o navegar. Con capacidades artísticas, sobresalen por su sensibilidad musical, cinematográfica y dramática.


En sus relaciones románticas, Piscis es cariñoso, fiel y romántico. Piscis rige los pies. Los que han nacido bajo el signo de Piscis son más susceptibles a tener dolores en los pies que los demás.
Los colores de Piscis son el morado y el blanco.


El Gran Poder de los que han nacido bajo el signo de Piscis es su sensibilidad. El poder de ayudar desinteresadamente y la gran sensibilidad los distinguen. Disfrutan apoyando a los demás para que lleguen al máximo de su potencial. La sensibilidad natural hace de los Piscianos los seres más comprensivos y luminosos del Zodíaco

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Me he sentido identificado en algunos aspectos: que si represento a lo invisible, que si libero tensión haciendo ejercicio, que si tiendo a vivir en mi mundo invisible y fantaseo (siempre fantaseando en el Cosmos: el hogar de las estrellas del firmamento) ...que si soy respetuoso, cariñoso, que si ayudo desinteresadamente, habla del poder de nacerte hacerlo, etc! ...


pero claro, que me haya sentido identificado sobre ciertos aspectos, por muy buenos que fueren, no quita que paralelamente sean menos trascendentales que otros, digamos, más significativos en una persona. Como el hecho de que también habla de tener deseos vagos, ser pesimista, de contentarme con llegar a los destinos a los que la vida me lleva (vamos, no a los destinos que yo quiero, pues a veces soy vago para luchar y apenas tengo ánimo para seguir adelante y me dejo arrastrar, luego, prácticamente soy un conformista)...y etc etc!


En resumen, la gente que realmente me conoce dice que tengo infinidad de cosas buenas, pero las pocas cosas malas que tengo, son casi peores que las buenas, buenas. Pues por las buenas solo brillo temporalmente, pero por las malas, decaigo, me derroto y autodestruyo, en mayor proporción, constantemente!!!


¿será así?... lo malo no supera lo bueno, todavía, pero cierto és que és más fácil dejarse abatir, que luchar arduamente y resistir.




Criss, pon el del hombre piscis para comparar con el mío! :bm:
 
Mistery dijo:
Criss, pon el del hombre piscis para comparar con el mío! :bm:
Tranquilo, los pondré todos... antes iba por peticiones, como acabé con aquello hace rato, ahora voy por orden cronológico:rolleyes:. Estás ansioso eh?:rolleyes:... por qué será? :lalala:. Ya te vas a comparar todo lo que quieras;).


las mujeres solo deberíais de ser Tauro; por aquello de que todas sois unas tarugas :rolleyes:
:7:........Ehhhh, mejor sigo :no:.


En cuanto a tu autoanálisis basado en el perfil de tu signo que agregaste, puedo decirte que todos tenemos cosas, más bien "tendencias" positivas y negativas, lo interesante es lograr ver ambas, sentirnos bien por lo bueno que consumemos en hechos e intentar "positivizar" todo lo malo que tengamos, para finalmente obrar mejor en aquello.


Buenas noches... "noble sensible":p.



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La Mujer Géminis


Aunque consiguió arrancar muy hermosos junquillos mientras el bote pasaba, había siempre uno más bello
que no conseguía alcanzar. ...¡Los más bonitos siempre están lejos!>> exclamó por fin con un suspiro, ante
el empeño de los junquillos por crecer tan lejos.



¿Acaso has pensado siempre en secreto que Brigham Young tuvo una idea sensacional al proponer que cada hombre tuviera varias mujeres? ¿Envidias para tus adentros a los potentados orientales con sus harenes? Pues no necesitas resignarte a ensueños románticos al estilo de Walter Mitty. Cásate con una muchacha Géminis y ya está. Esto te garantiza que tendrás por lo menos dos esposas diferentes y alguna vez, para los fines de semana, hasta tres o cuatro.


Claro que la cosa tiene su bemol. La diferencia entre una chica nacida bajo el signo de los Gemelos y un harén es que a ella, aparentemente, no le interesa la pasión terrenal. Es difícil conseguir que se asiente un poco durante el tiempo suficiente para tomarse en serio la pasión o cualquier otra cosa. Su mente está continuamente viajando, y simultáneamente va haciendo los comentarios. Pero si miras un poco mas hacia dentro, habrá un lugar donde, escondida entre las demás mujeres que forman una Géminis, encontrarás una romántica, capaz de demostrar una pasión intensa, si tú puedes conseguir que la fusión de lo mental, lo espiritual y lo físico sea completa.


Cómo conseguir que tu romántica se desarrolle, sin dejar de disfrutar de todas las otras mujeres encerradas en la personalidad de Géminis puede ser todo un problema. Lo que puedo decirte es que una sola Géminis es igual a varias mujeres, pero temo que seas tú quien tenga que romperse la cabeza para encontrar la forma de separarlas. Cada caso individual es diferente.
La edad puede ser un indicio importante de lo que puedes esperar, porque hasta que las gemelas maduran, el romance no es más que un juego para ellas. Pueden ser impredecibles y veleidosas en una medida increíble.


Primero, Géminis caerá en un arrebato de éxtasis por obra de tu sonrisa, tu voz, tu manera de andar. Después cambiará bruscamente y empezará a criticártelo todo, desde los calcetines hasta la forma en que te cortas el pelo, y por lo general lo hará con tan agudo y cortante sarcasmo que tendrás que aplicar tintura de yodo a tus heridas. Sin embargo, no por eso te retires de la puja por conseguir una esposa Géminis. Recuerda que te darán por lo menos dos por una, lo que indiscutiblemente es buen negocio. Las mujeres mercurianas no son tan falsas de corazón como puede parecer a veces. La actividad de su imaginación crea muchas fantasías.


El romance es la forma de expresarlas mas fácil que encuentran, y una mujer Géminis tiene, por lo menos, el doble de cosas para expresar que otras mujeres. Un hombre del mismo signo puede ser productor, cantante, marinero, abogado, actor, viajante de comercio y presidente de unos cuantos Consejos de Administración, todo al mismo tiempo, y así estará expresándose ad infinitum. Pero una mujer no puede desempeñarse muy bien con todo eso, sin que la consideren un poco rara. Y no porque las mercurianas no sean chicas de carrera. Lo son, y casi sin excepciones. Pero, en las actuales condiciones de la sociedad, todavía una carrera no le ofrece las oportunidades múltiples que le presenta el romance de poner a prueba sus miles de teorías y de hacer su práctica de gimnasia emocional.


La muchacha Géminis necesita que la compadezcas, no que te enojes con ella. Le resulta dolorosamente difícil interesarse por una sola persona a la vez. Al mismo tiempo que le impresiona la capacidad mental de un hombre y su inteligente sentido del humor, otra faceta de ella advierte que a él no le gusta el arte y no tiene sensibilidad para la música y la poesía. Cuando encuentra alguien que es adecuadamente creativo, que se mueve cómodamente en el ambiente del ballet o en el mundillo literario, vuelve a surgir la dualidad. Mientras estén recorriendo el museo, el otro yo de ella empezará a preguntarse si su galán tendrá bastante sentido práctico para ganarse la vida o la sensatez suficiente para saber dónde pisa. Confío en que todo esto te servirá para entender mejor y con mejor disposición cuales son los conflictos propios de los nacidos en Junio.


Concédele crédito. Por lo general, Géminis conseguirá arreglárselas sola con la perplejidad que le ocasiona su propio y complejo carácter, sin cargarte a ti con ella. Es una compañera vivaz y alegre. Durante la mayor parte del tiempo (cuando esté bien de ánimo) será un chisporroteo de vivacidad, te divertirá con sus observaciones despiertas e ingeniosas y conversará con inteligencia de casi todos los temas posibles. La mercuriana disfruta de todos los gestos sentimentales del romance, y no tiene problema en hacer conquistas. Jamás habrás conocido mujer que te deleite más con sus múltiples maneras imaginativas de amar-te y con la atracción de su encanto. Es capaz de mover las pestañas con fascinante feminidad, pero no se encontrará desvalida a la hora de ganarse el sustento.


Una mujer Géminis puede desempeñar a la perfección el papel de muchacha casquivana y halagar a un pobre hombre desvalido que ha caído en la trampa hasta hacerle perder la cabeza y hacerse con su talonario de cheques. Pero con toda facilidad puede convertirse en buena esposa seria y enamorada, sin perjuicio de cambiarse de buenas a primeras en una grave intelectual que estudia a los grandes filósofos y diserta brillantemente de política o poesía, para de pronto volverse un manojo de nervios, lagrimas y miedos, llena de emociones en bruto. Seguramente, no la encontrarás aburrida ni monótona.


Si todo esto te parece una exageración, acuérdate de Marilyn Monroe. Cada uno de los hombres que conoció, desde Carl Sandburg hasta su peluquero, la veía como una persona totalmente diferente de como la veían los demás hombres que también creían conocerla. Coloca una fotografía de ella como la seductora diosa del amor junto a otra en la que se la vea con gafas de gruesa montura, como una babushka, sin maquillaje y absorta en una conferencia sobre los novelistas rusos. Agrégale un par de fotos mas: la tercera con un delantal a cuadros, aprendiendo a hornear un suflé de queso para un marido cuyas cualidades de humana ternura y su capacidad atlética ella admiraba, y la cuarta andando tranquilamente junto a otro marido, a quien respetó y admiró profundamente por sus dotes intelectuales y su talento literario.


Y otras dos fotos. Una que la muestre con la cara surcada de lágrimas, llena de dolor tras haber perdido su tercer bebé, y otra en que se la ve en bikini, riendo alegremente con un apuesto astro del cine francés, en la Riviera. Ninguna de estas fotos fueron preparadas. Fueron todas instantáneas tomadas cuando ella ni miraba siquiera, y menos aún buscaba publicidad. Son el perfecto ejemplo de cómo el ojo de la cámara descubre todas las mujeres contenidas en una sola mujer Géminis, que consiguió con éxito mantener oculta su naturaleza múltiple tras la imagen que se propuso dar con mayor frecuencia.


La muchacha regida por Mercurio anhela estar <<real y verdaderamente enamorada>> pero no lo consigue. Esta ávida de maternidad, pero no pocas veces también la maternidad la elude. Encuentra una perfección diferente en cada hombre que conoce, mientras busca incansablemente a aquel que reúna todas las cualidades que ella necesita para ser feliz. Encontrarás en ella una gran compañera. Una joven mercuriana te seguirá en cualquier cosa, desde el submarinismo hasta las carreras de automóviles, el ciclismo o el bádminton. Se mostrará interesada por todos los deportes al aire libre, sin dejar de aparecer tan suave y femenina como un pompón, ni de tener una mente rápida como un látigo.


La aguda mentalidad de Géminis se mostrará inequívocamente cada vez que un tema nuevo despierte su curiosidad. Su disposición mercuriana le permitirá ver todas las complejidades de tus ideas creativas, y es probable que te aporte algunas sugerencias de su cosecha. Con tal de que no esperes de ella que se muestre constante, te parecerá absolutamente fascinante. Tienes derecho a que te advierta que esta chica puede creer sinceramente que está enamorada, y al mismo tiempo encontrar que otros hombres son atractivos. A menos que esté cerca de ti todo el tiempo, es capaz de olvidarte con más rapidez que una mujer nacida bajo cualquier otro signo solar.


Esté en su naturaleza aceptar el cambio, y buscarlo incluso. Hasta que aprenda a controlar su tendencia a la actividad constante, su negligencia en el cultivo de la paciencia y la estabilidad, la mujer Géminis puede complicarse tremendamente la vida... y complicártela a ti también. Por suerte para los hombres que se enamoran de ellas, las Géminis se asientan y llegan a tener un conocimiento mas profundo de su propia naturaleza antes de que sea demasiado tarde. Una vez que le hayas declarado tu amor, y que ella te haya aceptado, bien puedes compadecer a todos los hombres que están condenados a una vida entera de monogamia con una sola mujer. Cuando te cases con tu Géminis, tú tendrás varias esposas.


La esposa Número Uno será capaz de adaptarse a todo lo que tú esperes de ella. Podrás tener incluso su fidelidad siempre y cuando seas lo bastante interesante como para haberte ganado su auténtico amor. Me refiero a esa fusión de la compatibilidad mental, espiritual y psíquica, a las que la parte física debe agregarse al final, como la paprika, cuando las otras tres estén bien mezcladas. Esta esposa jamás te pondrá mal gesto si cambias de trabajo y tenéis que ir a vivir a otra ciudad. Con su ingenio, su buen gusto y su sentido del color, puede hacer de tu nuevo hogar algo encantador con un leve toque de su mano pulcra y hábil. Además, le fascinará la aventura, y no te acosará con reproches so pretexto de que estás poniendo en peligro vuestra seguridad futura.


La emoción de los nuevos horizontes le interesa más. Es posible que tenga una cabeza excepcionalmente buena para los negocios, y que apoye todas sus ideas originales. Pue-des contar con que ella vaya a trabajar si necesitáis aumentar vuestros ingresos, y será muy práctica en la forma de gastar el dinero. Aunque exteriormente pueda dar una impresión de traviesa, no lo es tanto como parece. Tiene una cabeza que piensa, y con mucha inteligencia, aparte de todo su brillante parloteo.


Tu esposa Número Dos será caprichosa, es importante que lo sepas. Tendrá sus momentos satíricos en los que podrá mostrarse alternativamente cínica e impertinente. Al mismo tiempo, mentalmente será un desafío para ti. Pero un hombre necesita ese estímulo, ¿o no? Adelante, intenta superarla en una discusión intelectual. (De todas maneras, es lo que secretamente quiere.) Es una esposa a la que la vida no escandalizará fácilmente y que no se dejará llevar por prejuicios ni preconceptos. Es posible que decida incorporarse a una marcha de protesta o a un encierro y se olvide de volver a casa. ¿Y si mientras ella anda por ahí pronunciando un discurso o se fue a la escuela nocturna para seguir un curso mas, tú tienes que salir a ver a tus amigos? Por lo menos, lo más probable es que no te acose con preguntas desconfiadas: con quien estabas, dónde estabais, que estuvisteis haciendo. No le interrogues tú tampoco. Si tú haces honor a tu palabra, ella también. Y es muy individualista y muy independiente.


La esposa Número Tres se sentirá aburrida y deprimida por la rutina del cuidado de la casa. Las camas estarán sin hacer, y los platos dormirán en el fregadero mientras ella sueña despierta, lee o hilvana el argumento de una comedía. Es posible que para la cena te sirva una lata de judías sin molestarse en abrirla siquiera. Pero a las horas más inverosímiles de la noche podrás mantener con ella una conversación para satisfacción de tu alma. Se compadecerá de las frustraciones que te ha impuesto la vida. Satisfará al mismo tiempo tus anhelos intelectuales y emocionales, querrá saber tu opinión sobre el budismo y se entusiasmará con tus intentos de componer una canción. En una palabra, es una excelente compañera. También será muy afectuosa, ya que tú no la atormentas con sacudir el polvo, cocinar y todas esas tonterías. De vez en cuando, esta esposa puede armarte un tremendo lío económico. Pero si le sugieres de pronto que salgáis de camping u os vayáis a pasar unos días en Las Vegas, hará las maletas de todo corazón, sin salirte con un montón de objeciones tontas sobre el golpe que supondrá para vuestro presupuesto o quien le dará de comer al gato siamés o si no se romperá alguna tubería mientras estéis fuera.


Esposa Número Cuatro: será una madre alegre y risueña. No dejará que los niños la frenen, porque, sin duda, siempre estará demasiado llena de proyectos para olvidarlos mostrándose sobreprotectora. Y ellos imitarán su independencia, y les hará bien. Si alguien le pregunta cuanto tiempo está con los niños, lo mas probable será que esta esposa conteste: <<En casa no es cuestión de cuanto tiempo, sino con cuanto amor>>. Y tendrá razón. Es posible que los niños no siempre la obedezcan, porque un día se inclinará a ser enfática y al siguiente se ablandará, pero a los críos les encantará tener largas charlas con ella. Su imaginación estará a la altura de la de ellos, y todos se divertirán juntos. Probablemente será una madre blanda, pero también se preocupará por su actuación en la escuela, y es posible que insista en que saquen buenas notas. Si de ella depende, no se salvarán de hacer los deberes, aunque es posible que no les obligue a que cuelguen la ropa.


Tu esposa Número Cinco será una espléndida ama de casa, experta en las artes de encender velas, disponer flores y hacer lucir los objetos de plata. Puedes invitar a cualquiera a cenar, a tu jefe o al alcalde de la ciudad, y ella se mostrará tan graciosa y encantadora que los invitados se resistirán a irse. Organizará su vida de manera eficiente y sin esfuerzo, se vestirá como una modelo y le encantará el teatro. Puedes ir con ella a exposiciones y conciertos, que en cualquier marco social se sentirá cómoda. Todos te mirarán con envidia, preguntándose quien es esa mujer fascinante que con tanta dulzura se cuelga de tu brazo. Será romántica y ultra femenina, y hasta es posible que para tu cumpleaños te escriba una poesía. Y tú querrás comprarle túnicas de terciopelo y perfumes carísimos, porque la gracia de su estilo te hará sentir como un noble terrateniente. Si le hablas de un viaje a Europa, veras cómo le brillan los ojos. Le atrae tremendamente.


Bueno, pues ya está. Es posible que me haya olvidado de alguna de las chicas que integran tu harén de Géminis. Todos los casados de la ciudad se pondrán verdes de envidia cuando te vean todos los días con una mujer diferente. Y si te preguntan cómo lo conseguiste, hazte el tonto. No olvides que la poligamia no es legal. Tu mujer Géminis jamás viajará en tren cuando pueda ir en avión. Jamás se quedará callada cuando pueda hablar. Jamás esquivará el bulto cuando pueda ayudar. Y si puede correr, jamás caminará. Su mente está llena de tantas ideas, y su corazón de tantas esperanzas, que puede parecer que necesita una computadora para distinguirlas a todas. ¿O necesita simplemente a alguien que sea capaz de correr junto a ella y arrojar con ella sueños al aire, desde aquí a mañana? Si tú eres ese hombre, ella no se atreve a mirar por encima del hombro para ver si estás cerca.


Dentro de ella hay un miedo, profundo y no explicado, que le impide mirar nunca hacia atrás. Cuando finalmente alcances su velocidad, consigue que sea ella quien dis-minuya el paso. Puedes hacerlo, si la tomas firmemente de la mano y no se la sueltas nunca. Aunque los vientos mercurianos del norte la impulsen a seguir, es posible que secretamente esté más deseosa de lo que tú te imaginas de descansar un poco. Date prisa y trata de alcanzarla, que ella te necesita.


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El Hombre Cáncer


..A veces busco panecillos o preparo trampas para cangrejos; a veces busco en las verdes colinas ruedas de cabrioles; y de esa manera –dijo con un guiño–, me gano el dinero... Y con mucho placer brindaré a la noble salud de Su Señoría.


Taciturno experto en circunloquios lo es, pero atolondrado y charlatán, no. No esperes que este hom-bre deje al desnudo su alma el primer día que lo conozcas. Cáncer jamás confía en los extraños, y hay ciertas cosas que ni siquiera sus mejores amigos saben. Llegar a conocerle exige mucho tiempo y una buena dosis de paciencia. Si te presentan a uno de ellos en uno de sus días agrios y quisquillosos, es posible que no te sientas muy deseosa de conocerlo mejor, pero prueba otra vez, no abandones tan fácilmente.


Cáncer puede ser casquivano y voluble, pero también es capaz de lealtad y sensibilidad. Sin previo aviso, ese ceño fruncido puede ceder el paso a una sonrisa. Sus ásperas quejas y sus modales gruñones van suavizándose lentamente hasta convertirse en un tono de ternura, un segundo antes de que le sacuda una risa profunda, o se sofoque en el intento de ahogarla, o estalle en una histérica carcajada lunar. Cuando esté triste y pensativo te sentirás impulsada a abrazarlo para calmar su melancolía. Cuando exhiba su agudeza intuitiva, te quedarás mirándolo con reverencia. Su cautela te impresionará, te deprimirá su pesimismo.


Puede ser tan galante, cortes y considerado que casi esperarás que te invite a bailar un minué. Aunque, desde luego, es un romántico, también es increíblemente práctico y sensato. ¿Qué hacer con un hombre así?
Trata de entenderle. No es que tenga una personalidad cambiante, son simplemente caprichos lunares que atraviesan su conciencia, que hoy están y mañana han desaparecido. Tanto entre esos cambios anímicos como durante el tiempo que cada uno de ellos dura, Cáncer es fiel a su naturaleza. Jamás se aparta de su molde básico, a pesar de los cambios de expresión que modifican sus rasgos.


Trata siempre de recordar que aunque sus modales puedan ser rudos y distantes, el corazón del Cangrejo siempre es tierno y afectuoso, y tan rebosante de sentimiento que es la causa de que a veces se sienta vulnerable. Entonces se retira dentro de su concha (la que continuamente lleva consigo), para protegerse por un tiempo de sus propias emociones. Pensarás que es un verdadero cangrejo, y estarás pronta a abandonar cuando se refugie en un silencio ofendido. Pero cuando vuelva a asomarse cautelosamente para ver si hay sol, volverás a sentir la tentación de acercártele. Lamentablemente, un Cáncer puede ser de vez en cuando un perfecto aguafiestas capaz de hundir a todo el mundo en la depresión y de calarte hasta los huesos con su lluvia de pesimismo.


Pero también en otros momentos resulta tan divertido como un orangután con hipo. No me extraña que no sepas si encogerte de hombros o abrazarle con ternura. Los cambios de temperatura de Cáncer dejan atónito a cualquiera. Primero te hará estremecer con sus ojos helados, después te abrumará con su dedicación. Se mostrará tanto más indiferente cuanto mas miedo tenga de perder algo. Tal vez ese algo seas tú. Vuelve a decirle una y mil veces que eres suya, porque para sus oídos las palabras de amor son música. Claro que es posible que se sumerja en uno de sus ataques de extravagancia en mitad de una esce-na de amor, en una noche de luna llena. En el preciso instante en que tú te dejes llevar por los sueños más deliciosos, tal vez él se ofrecerá a recitarte su poema favorito.


Tú, suspirando, volverás a recostarte en su hombro con los ojos cerrados, y él graznará algo así como: <<La vaca es un animal / todo forrado de cuero / tiene las patas tan largas / que le llegan hasta el suelo>>. Ello quizá te arranque violentamente del mágico hechizo, pero es que la Luna llena puede tener efectos extraños sobre las emociones lunares. A lo que me refiero es a que puede ser tan loco como una cabra, aunque sea lo bastante despierto como para amasar un millón de dólares y conservarlo. Y ya que ha salido el tema del dinero, si tú te cuentas entre las mujeres a quienes les gusta pagar a tiempo el alquiler, has encontrado al hombre adecuado. Ama la seguridad casi tanto como a ti.


Es posible que le lleves una pequeña ventaja, pero puedes considerar que tu peor rival es el dinero, al que Cáncer perseguirá durante la mayor parte de sus días con una dedicación que puede hacer pensar en el fervor religioso. (Es posible que las noches le traigan otras cosas para perseguir.) No es el peor destino que podría haberte correspondido. El dinero le ha fascinado desde que era niño, y para él ahorrar será mucho mas atractivo que gastar. No es exactamente avaro, pero digamos que no es probable que jamás le veas encender la pipa con un billete de un dólar por hacer un truco de prestidigitación. Su sentido del humor rara vez se ejercita sobre el frío tema del dinero; para el Cangrejo, el dinero no es algo que mueva a risa.


Probablemente, antes de haber aprendido el alfabeto ya era capaz de hacer mentalmente una suma, y para los once años tenía decidido su camino. No te sorprendas si descubres que todavía guarda, sin abrir, su primer cerdito hucha. El tintineo de las monedas y el crujido de los billetes verdes le calman los nervios, aunque no se jacte de la cotización de sus acciones. Es raro que Cáncer ahorre dinero pensando en una mejor posición social. Lo hace por el gusto de hacerlo, y hasta es probable que reste importancia a sus condiciones de mago de las finanzas. Él no es mas que <<un muchacho pobre que trata de ganarse la vida, y va tirando lo mejor que puede>>. Puede ser que te sientas tan apenada por él que incluso te ofrezcas para conseguirle un préstamo bancario. No te molestes en hacerlo, que probablemente él es uno de los accionistas.


Un signo de fuego en el ascendente puede provocarle algún impulso a dilapidar, al que resistirá con valor admirable. Aunque de vez en cuando ceda a alguno de esos impulsos derrochones para levantarse el ánimo, ello no será en él un hábito. Y antes de que empieces a tacharle de <<tacaño>> para tus adentros, has de saber que el hombre Cáncer tiene una idea interesante de la economía. Preferirá llevarte a cenar al mejor restaurante y que os atiendan por lo que paga, antes que ofender su sensibilidad y su gusto con chuletas de cordero recocidas y un mal servicio en un lugar de segunda categoría. Le parece una tontería gastar el dinero en un abrigo de lana, cuando el armiño o la chinchilla se amortizarán solos con el tiempo. En su opinión, un buen coche de marca y diseño clásico es mejor inversión que uno mas barato que se te desvaloriza tan pronto has dado la vuelta a la esquina.


Para Cáncer, calidad y economía son sinónimas. ¿Has visto? Estaba segura de que esto te devolvería el brillo a los ojos. Hasta los nativos más poéticos y soñadores de este signo, los que se pasan la vida inmersos en la música, el arte o algún otro empeño cultural, tienen un nítido sentido del valor del dinero. Es posible que un artista lunar pinte en un ático, pero no que necesite de la seguridad social. Es probable que escondidos en las vigas haya unos cuantos bonos y acciones. Tampoco hará donación de sus cuadros, los venderá a buen precio, si es un profesional. Pero es que lo valdrán. Cuando un Cáncer se dedica a una carrera, es seguro que llega a la cúspide.


Está lleno de talento artístico. Le podrías sugerir a tu amado Cáncer que te dibuje las tarjetas de Navidad. Aunque no sea mas que un aficionado, serán encantadoras. Si es un Cáncer auténtico, no enloquecerá por la ropa deportiva. Su atuendo denotará cierta formalidad. No importa que pague por él millones o unos pocos miles, su traje será de corte clásico e impecable-mente cosido. Es frecuente que le gusten los cuellos con botón (si, todavía los venden: a los Cáncer), los puños con gemelos y las camisas caras, que compra al por mayor y por lo general sin monograma (dema-siado ostentoso; él prefiere pasar inadvertido). Por más que durante un breve periodo, mientras amasa su primer millón, pueda andar corto de dinero, llevará los zapatos lustrados y no le verás nunca con los calcetines caídos.


Durante cualquier período de incertidumbre financiera (que en todo caso será transitorio), un varón Cáncer irradiará de alguna manera un aire de digna riqueza, como de alguien que ha conocido días mejores. Y si no los conoció, los conocerá, puedes estar segura. A sus manos llegarán algún día sustanciales sumas de dinero, o encontrará la oportunidad de ganarlas. No siempre será rico, pero un Cangrejo en paro es tan raro como un cocotero en Siberia. Su lema secreto es <<quien juega y no trabaja tiene la cartera flaca>>, y él la prefiere agradablemente regordeta. Esperemos que sepas ganarte la simpatía de su madre o, más bien, roguemos por que te la ganes.


Es bastante seguro que ella aparezca con frecuencia en la conversación de tu amado, en comentarios co-mo: <<Mi madre jamás usa tanto maquillaje, y es una mujer muy hermosa. ¿No te parece, cariño, que llevas demasiada sombra en los ojos?>>. 0: <<¿Tú utilizas comidas congeladas y todas esas cosas? Cuando yo era niño, mamá amasaba el pan en casa>>. También es muy probable que ese dechado de virtudes se te aparezca en persona, cuando tú menos lo esperes. <<Tesoro, esta noche no podré llevarte al teatro. Voy a llevar con el coche a mamá, que se va a pasar unos días al campo. Digámoslo en forma realista: es posible que Cáncer se resista a destronar a mamá para coronarte a ti como su nueva reina.


Pese a todos sus ocasionales impulsos de vagabundeo, es un Cangrejo tremendamente domestica-do, y si su madre ha sabido hacer de su casa un hogar, él no tendrá prisa por abandonarlo. Los Cáncer son muy apegados a la madre, o bien se han alejado completamente de ella. La relación con ella nunca es tibia. Los que no sienten reverencia por la madre son los adoptados, o bien aquellos en que los celos ante el lugar que el padre ocupa en el afecto materno han provocado un bloqueo emocional. En tal caso pueden exhibir una frialdad y un aislamiento antinaturales. Sin embargo, con el Cangrejo típico el problema más probable es el contrario; de nada sirve recurrir a la política del avestruz.


Si te has enamorado del tipo más común de Cáncer, tendrás que hacerte amiga de la madre y ser su rival al mismo tiempo que la cubres de atenciones. No es fácil cultivar una amistad a la vez que se compite, pero es la estrategia que tendrás que usar. Jamás dejes que ella tome la delantera como cocinera y ama de casa. Déjala que te enseñe a hacer el pastel de limón con merengue, pero des-pués ve tú sola y hazte por tu cuenta un estupendo Boeuf Stroganoff. Asegúrate de que le malcrías por lo menos tanto como le malcría ella, que ya puede ser bastante. Es probable que él haya crecido acostumbra-do a sentirse la niña de sus ojos. Si lo tienes muy en cuenta, le alimentas regularmente, le atiendes y no te separas de él cuando esté enfermo, y por la noche le arropas tiernamente en la cama puede convertirse en un tesoro de Cangrejo. Aunque ellos jamás lo admitirán, a los hombres de Cáncer les encanta que las mujeres les cuiden y les mimen.


También hay ciertos rasgos que pueden equilibrar las cosas en vuestra relación. Para empezar, él también será excelente cocinero, y es posible que te sorprenda con su capacidad para preparar una exquisita comida. Cuando este hombre invita a cenar en su apartamento, por lo general lo dice muy en serio. Incluso si te invita a ver su colección de aguafuertes es posible que no haya segundas intenciones. El varón Cáncer típico adora las cosas mejores de la vida; en una palabra, él está en la cultura. Es muy posible que realmente tenga algunos excelentes aguafuertes, o por lo menos una estupenda colección de discos. Y es bastante seguro aventurarte sin otra compañía en su rocosa caverna, porque el hombre lunar típico es la esencia de la galantería con las mujeres. Generalmente, Cáncer será un caballero mientras tú no dejes de ser una dama. Así se hacían las cosas en los días de la abuelita, y para él esos si que eran días. (Es proba-ble que tenga sobre la chimenea la fotografía de la abuelita.)


Pregúntale por su árbol genealógico, que le gustará mucho que lo hagas. A la mayoría de estos nativos les encantan los linajes y los antepasados. Les fascinan las cosas viejas, desde la abuelita a esa mesa de guindo del siglo XVIII que se trajo de su primer viaje a Europa. Si te dice que quiere hacerte una fotografía, no salgas corriendo. La fotografía es un pasatiempo común entre los lunares, y son pocos los Cáncer que se pasan la vida sin tener por lo menos una cámara. Claro que podrían tener a Venus en Escorpio o la Luna en Leo, de modo que tal vez seria mas prudente verificar su carta natal antes de decir que si a nada. Sea lo que fuere, tu dile: <<Me encantaría, cariño, pero ¿no tienes inconveniente en que llame primero a mi astrólogo? Necesito saber cuando es tu cumpleaños>>. Y si cree que estas bromeando, sácale inmediatamente de su error. Simplemente, dile que J. P. Morgan casi nunca hacía una jugada de Bolsa sin consultar a la astróloga Evangeline Adams, que era nieta y bisnieta de John Quincy Adams y de John Adams. La combinación de la historia y el dinero hará que se le agran-den los ojos de interés.


Pero Cáncer puede pasar mucho tiempo sin invitarte a ver sus aguafuertes ni su mesa de guindo. Si bien no se privará de flirteos intrascendentes, pueden transcurrir años antes de que se enamore en serio, porque para él no es fácil encontrar una mujer a la que considere digna de su interés. Cuando la halle, la cubrirá de regalos y de admiración, pero sus normas son exigentes y no cualquier chica puede satisfacerlas. La mayoría de los Cangrejos tienen miedo de quemarse, y no sin motivo. Una pareja frustrada, que para un hombre medio sólo sería causa de unas tristes semanas de readaptación, para él puede ser un desastre. Cuando algo le separa de la pareja con la que ha conseguido establecer intimidad, el duelo puede prolongarse durante muchos años.


Renuente por naturaleza a precipitarse, una vez que está seguro no es fácil que Cáncer se eche atrás. Puede desempeñar hábilmente el papel de enamorado romántico. Después que se te haya declarado y cuando tenga alguna esperanza de conquistarte, su timidez se tornará repentinamente en tenacidad y te encontrarás con un galán serio y decidido, que no aceptará el no por respuesta para la decisión que ha tomado. Es probable que se te meta en el buzón (en sentido figurado, claro), que acampe sobre tu felpudo y te monopolice el teléfono. No es fácil escapar a la tenacidad del Cangrejo, ni tu querrás hacerlo probablemente. Son muchas las chicas que sueñan con un mundo como el de él, iluminado por la luna, para vivir y soñar; un mundo donde alguien las tenga firmemente abrazadas y las proteja del lobo grande y malo que acecha en la puerta.


Ahora que ya sabes que no es descuidado para vestir ni derrochón, que probablemente será un cocinero de ensueño, que tiene excelente gusto y anda en busca de una chica tradicional, como la chica con la que se casó papá, y que puede ser un verdadero tórtolo (siempre que no esté con el ánimo bajo), ¿qué otra información puedes necesitar? ¿Qué tal es como padre? Pues las noticias son inmejorables. Todos los Cáncer son madre de corazón, hasta los hombres. Lo que quiero decir es que será un padre excelente, por esa misma naturaleza atenta, gentil, tierna y comprensiva de la que tú misma te enamoraste. Tendrá infinita paciencia con los niños y se interesará auténticamente por cada dedito magullado, juguete roto o dolor de muelas.


Se pondrá un gorro de papel para las fiestas de cumpleaños, le adorarán todos los chicos del barrio y se pasará las horas entreteniendo a los pequeños. Los papás Cáncer se enorgullecen de sus hijos y velan con fiereza por sus hijas. Cuando sean pequeños, será el mejor papito que puedas imaginarte, aunque las aguas puedan enturbiarse un poco cuando llegue la adolescencia. Como le gustaría que su progenie buscara para siempre apoyo en él, es posible que con los primeros signos de independencia se vuelva a convertir en un Cangrejo lunático por un tiempo, ante el deseo de los chicos de obtener su propia experiencia en el mundo.


Se paseará por la sala hasta gastarse la suela de los zapatos cuando Enriquito salga con el coche después de medianoche o cuando la pizpireta Lucia no vuelva de la fiesta para el toque de queda. ¿Re-cuerdas cómo le impresionan las cifras? Echa mano de la aritmética para hacerle ver que está equivocado. Fíjate, cariño. Ahora tenemos dos hijos. Cuando se casen, podremos tener seis u ocho nietos, como los dividendos en el banco. Y seis u ocho dan mas felicidad que dos, ¿no?>>. (Ahí le ganaste.) <<Me alegro de que estés de acuerdo. Ahora, ¿quieres decirnos por favor donde has escondido el vestido de novia de Lucia, y sacarle a Enrique esas esposas, para que pueda firmar la licencia de matrimonio?>> No lo intentes mientras haya luna llena, porque podría interpretarlo mal; además, ningún Cangrejo puede pensar bien cuando las vibraciones lunares son fuertes.


Le resulta difícil renunciar a su dominio, pero si le haces presente que todavía te tiene a ti para aferrarse, aflojará la presión. Bueno, para el futuro, eso es todo. Tu problema inmediato es engatusar a tu Cangrejo para que avance directamente hacia una propuesta matrimonial, en vez de pasearse astutamente de un lado a otro, esquivando el asunto. Puedes hacer como que vas a dejarlo por uno de esos tipos audaces y cavernarios. Generalmente, el Cangrejo dejará de andar hacia atrás cuando el objeto –tú, en este caso– dé señales de alejarse. Pero eso requiere que busques otro hombre, para que él se despierte. Y como él te vigila tan de cerca, puede ser engorroso.


La manera más fácil de ponerlo en situación de que pique con fuerza y se deje de juegos de salón es jugar con sus emociones, que están siempre por debajo de la superficie de su mente de calculadora. La música, la poesía, las flores, la ropa hermosa, los perfumes caros usados con discreción, las palabras tiernas y las caricias son armas que irán desmoronando su débil resistencia al romance. No olvides que hay una línea directa que comunica su corazón con el estómago. Recorta de las revistas fotografías de bebés, deja fuera la máquina de coser, de manera que se vea bien, levántate un par de centímetros los dobladillos de las faldas y mímale un poco. Ponte una de esas pulseras hechas con monedas extranjeras, que con eso le tocarás dos cuerdas sensibles, la de los viajes a lejanas costas y la del dinero.


Alguna noche te preguntará impulsivamente si no te gustaría conocer a su madre. A la mañana siguiente ya puedes con absoluta seguridad encargar las invitaciones y comprarte el ajuar: no hay duda de que has ganado el corazón de un caprichoso hombre lunar, lleno de mil sueños secretos, y la aprobación de la chica que él prefiere. Ya puedes <<navegar durante un año y un día>>, mientras bailas a la luz de la luna y comer con un pequeño tene-dor para entremeses picantes.


¡Buen viaje! Y no te olvides: no se te ocurra tirarle ese abollado sombrero viejo, ni las zapatillas aquellas de tenis, y tampoco la colección de sellos o los boletines de la escuela primaria. Son sus tesoros. En cuanto a ti, no te vayas sin paraguas, que algunas noches serán muy húmedas. ¿Me permites que te diga que estás muy guapa con el abrigo de chinchilla? Pero claro. Si una mujer siempre está guapa cuando la aman... y a ti te aman.


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Bluelite dijo:
Criss con que orden estas poniendo los signos?
La última petición que puse (porque era la última que me hicieron hasta aquel momento:mareao:) fue la de Maru y pretty, Mujer Leo. de allí en adelante estoy poniendo de acuerdo al orden natural de los signos, partiendo desde Aries hasta el último Piscis, agregando los que me hayan faltado.

Sé que estás ansioso de leer a Piscis:rolleyes:, al igual que el Misterioso noble iluminado:jajaja::p; pero como sabes Piscis va al último de la lista así que falta. Aparte este signo es super especial para mí en lo personal por lo cual yo también estoy deseosa de ponerlo pero... hay que saber esperar, eh?:rolleyes:. Aunque obviamente ya lo tengo leído y analizado :p.




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El Hombre Leo


¡Es el amor... es el amor lo que hace girar el mundo!


El poeta que escribió aquellos versos sobre una flor <<nacida para ruborizarse en secreto y derrochar su fragancia en el aire del desierto>> no pensaba ciertamente en Leo. A este hombre podrás encontrarlo gozando de la ardiente luz del Sol, y también pronunciando floridos discursos, pero nunca en la soledad del desierto. Lo más probable será que esté en un escenario, o frente a un círculo de amigos y familiares en adoración. Es posible que derroche el dinero, pero no que derroche su fragancia en el aire. Leo siempre tendrá público.


Pues ahí lo tienes, en síntesis. El secreto para hacer caer en la trampa al León es así de fácil: conviértete en su público. Totalmente diferente de los remisos varones de Virgo y de Acuario, tu amiguito Leo sucumbirá felizmente a las deliciosas agonías del amor, si tú sabes jugar bien tus cartas, adorarle, halagarle y respetarle. ¿Es uno de los inflamables varones de agosto? Cálate las gafas oscuras y sométete a su brillante luz solar. ¿Es uno de los ejemplares tranquilos y silenciosos? Pues no te dejes engañar por su suavidad. Si le acaricias a contrapelo, ya verás como vuelan las chispas.


Recuerda que no hace mas que representar el papel de alma mansa, y que por debajo de sus modales corteses y de su paciente impasibilidad arden las brasas de una orgullosa dignidad y de una vanidad arrogante que en cualquier momento pueden convertirse en llamas y quemar a la tonta mujercita que se crea capaz de manejarlo. El León será un cortejante galante y caballeresco, tiernamente protector y sentimentalmente afectuoso. No necesitarás tenderle muchas trampas para inducirle a románticas osadías. Se podría decir que Leo está dotado de un potencial de pasión instantánea. Con tener la oportunidad y agregarle –bien mezcladas– unas velas encendidas y una música suave, el amor florecerá como una roja, rojísima rosa.


Y en realidad, si no las tienes a mano, hasta puedes prescindir de las velas y de la música y limitarte al primero de los ingredientes. Lo mismo da. Si en su vida falta el amor, el orgulloso León languidecerá, simplemente... aunque desde luego, de manera muy dramática. Para él es cuestión de adoración o muerte, y puedes tomarlo bastante al pie de la letra. Los hombres de este signo rara vez ahorran gastos en el proceso de su galanteo; te llevará a los mejores restaurantes, te bañará en flores y perfumes, orgullosamente escoltada por el irás al teatro, y atarás con una cinta un puñado de cartas de amor fantásticas. Te diré la verdad: para resistirte, tendrías que tener el corazón de piedra. Es posible que a esta altura estés pensando que te ha tocado la lotería. Piénsalo de nuevo, que un romance leonino no está del todo libre de complicaciones.


Podrías aprender de los mimados favoritos de la realeza. Leo te invitará a su refugio y te entibiarás junto al hogar de su gran corazón, pero la guarida del León puede convertirse en una prisión, confortable y lujosa. ¿Es celoso? La respuesta es <<si>>, y ya puedes hacer con ella un gran letrero luminoso. Tú le perteneces, en cuerpo, alma y mente. Él te dirá que tienes que ponerte, en que lado debes hacerte la raya del pelo, que libros leer, que amigos son los que mas te convienen y cual es la mejor forma de organizar tu día. Querrá saber por que tardaste dos horas en hacer las compras cuando dijiste que en una hora volverías, con quien te encontraste por el camino, que hablasteis... y hasta es probable que se enfurruñe si no le cuentas en que estás pensando, con los ojos fijos en la ventana de la cocina, mientras le preparas los huevos revueltos.


Al fin y al cabo, bien podrías estar pensando en otro. Jamás olvides la fuerza que puede alcanzar su temperamento impulsivo cuando alguien le excita. Aguijonearle con un flirteo ocasional para demostrarle que sigues siendo deseable es una absoluta locura. Él sabe que tú eres deseable, y no necesita que se lo demuestren. Además, si se te va la mano, Leo es capaz de dejar a tus inocentes amigos masculi-nos aplastados contra el suelo... si es que no los manda al hospital. En la aventura amorosa con un León no todo son rosas y miel, y no me refiero únicamente a los gatazos inflamables, sino también a los más tímidos.


En cuanto a su naturaleza básica, no son diferentes. Toda mujer que se enamore de un Leo debería hacerse con un ejemplar de Ana y el rey de Siam y estudiárselo bien. El monarca siamés era un Leo típico, y de la técnica de Ana podrás sacar ideas valiosísimas. Primero, provocarlo, desafiante, para ganar su interés: finalmente, la sumisión femenina, no sin haber puesto antes en claro que no te dejarás devorar del todo. Realmente, esa novela es un tesoro; tenla siempre debajo de la almohada. Prepárate para equilibrar sus magníficos entusiasmos con la calma del razonamiento, y para sosegarlo cuando infle los problemas hasta llevarlos a dimensiones increíbles.


Los nativos del tipo apacible lo hacen sin mucho ruido, pero no hay ninguna diferencia. No importa que ruja y se enfurezca porque los empleados no le han obedecido, o que se refugie, taciturno, en el porche del fondo porque los vecinos le han hecho un desaire: el resultado final es el mismo. Leo necesita de tu estabilidad como contrapeso para su orgullo irracional y, si tú no la tienes, vuestro amor puede convertirse en una regia batalla sin pausa. Pasaréis todo el tiempo en rupturas y reconciliaciones, y a tal velocidad que vuestros amigos se preguntaran asombrados donde esta el fuego. ¿Dónde? Pues ahí, dentro de vuestra abrigada guarida leonina.


No trates de dedicarte a una profesión, porque Leo no lo aceptará. Tu profesión es él. El León puede acceder a que su compañera salga a conseguir algunas pieles cuando la cuenta del banco se venga abajo, pero ella tendrá que dejar bien en claro que el trabajo es lo último, después de él y del hogar. Los Leones no toleran la competencia de machos ni de intereses i externos. Si tienes el valor suficiente para aceptar estas condiciones, ve a comprarte el ajuar, pero cuidado: que sea de última moda, porque él querrá exhibir-te en todos sus desfiles privados de verano y de invierno. Si lo avergüenzas apareciendo en público con un porte algo menos que de reina, echarás de menos su rostro familiar en la iglesia, mientras los violines te reciban con la Marcha nupcial.


Cuando ya estéis casados, emparejados y enamoradísimos, estudia tu activo. Tu marido Leo será tan tierno y de buen corazón como el rey Arturo, siempre que tú dejes que toda la familia gire en torno de el. Si cuenta con el respeto que él exige, Leo te retribuirá con una generosidad sin límites. Es posible que te repita una y otra vez lo bella que eres, que te asigne una suculenta mensualidad y –maravilla de las maravi-llas, con su disposición al romance– es probable que te sea fiel. Las posibilidades siempre son mejores después de casados que cuando te las ves con un soltero, y te diré por que. Generalmente, el León es de-masiado haragán para andar a la caza de caras bonitas, una vez que ha encontrado una leona capaz de manejar bien su reino mientras él dormita placenteramente en una hamaca.


Jugará afectuosamente con los cachorros, protegerá de todo peligro a su pareja y la hechizará con su ambición de llegar a un cargo de impresionante superioridad en su carrera. Con un marido Leo llevarás una vida social muy activa, siempre y cuando le deje tiempo para su sueño reparador. Pero algunas noches saldrá con sus amigos, y también es posible que haya algunos problemas económicos, debido a súbitas urgencias del azar, o a alguna inversión arriesgada que en opinión de tu amado debía haber rendido muchísimo. Una vez conocí a un Leo que se compró diez acciones de un pozo petrolero. Aunque entre los miles de accionistas, él fuera uno de los más insignificantes, no dejaba de ir un par de veces por mes al lugar de la perforación, con aire de importancia.


Cuando alguien le preguntaba que quería, él contestaba que había ido, simplemente, para ver como andaban las cosas en su pozo. Los perforadores le trataban con gran respeto, pensando que era uno de los miembros del Consejo de Administración. Todo eso se puede soportar porque tendrás compensaciones. ¿Cómo puede rezongar porque tú te hayas comprado el carísimo sombrerito de visón, cuando él ha perdido el importe de un abrigo de visón en una partidita con los amigos, o después de haberse gastado tus ahorros en la subasta de dos partidas de envases plegables de cartón de tamaños surtidos, cuando se le ocurrió que la compañía se incorporará al sistema de ventas por correo? (Que después no pudo usar porque resultó que estaban todas impresas con el anuncio de <<Veneno para las ratas>>, con la calavera y las tibias cruzadas.)


Aunque tengas que ponerle bajo llave, mantenle alejado de las subastas, porque su necesidad de ser mejor postor que nadie, en cualquier momento, es irresistible. También será él quien arrebate la cuenta, en público, exclamando alegremente: <<Es mía>>, y te deje sin dinero para la nevera nueva. Leo estaría en su elemento en Texas o en Las Vegas, donde le reconocerían inmediatamente como uno de los que vuelan alto (a no ser que la in-fluencia lunar o la de su ascendente le impongan frugalidad). Hay una cosa en el León que puede resultarte muy útil. Casi todos los de su signo tienen un don maravilloso para arreglar cosas. Cualquier cosa, desde un picaporte roto a uno de esos tercos grifos del baño, hasta un magnetófono o un complicado aparato estéreo de alta fidelidad. Si es un Leo típico, no podrá resistirse a meter mano para hacer funcionar algo que está estropeado. Si no obtiene resultado, con espléndida furia leonina propinará un sonoro puntapié a ese armatoste atrevido, y de pronto el picaporte abrirá, el agua correrá como un torrente, el magnetófono empezará a hablar y el estéreo a tocar música.


Parece como si Leo tuviera alguna virtud mecánica. Muchos de ellos son capaces de desarmar motores y volverlos a armar, sin apenas ensuciarse las manos. Leo no es tipo que deje pasar meses sin ajustar los tornillos de una bisagra o sin asegurar las chinchetas de la moqueta. Es sorprendente la cantidad de Leones que son capaces de hacerse sus propios muebles, y que agregan una habitación a la casa sin ayu-da de un profesional. Es posible que quiera tener su propio taller en el sótano. No te quejes si hay un poco de aserrín en el suelo, que eso le mantiene contento... y en casa por las noches. El León es la vida de muchas fiestas, pero no es ningún bufón. Para llamar la atención, puede ponerse la máscara del comediante, pero por lo general su auditorio comprende que es 1o mejor seguir respetándole aunque durante un momento pueda estar juguetón.


Pese a las apariencias, no hay nada de campechano en la naturaleza íntima de Leo; es mucho más resuelto y tenaz de lo que parece. Sabe lo que quiere, y generalmente lo consigue. Y también es bueno para conservarlo.
Si esperas que te sea fiel durante el noviazgo, asegúrate de darle una buena ración de romanticismo y afecto, porque si no, su enorme necesidad de amor y admiración le llevará a recorrer toda la jungla para buscarlos. Si vuestra relación es auténtica y profunda, es probable que Leo no te mienta, pero los ojos se le desviarán un poco. A menos que se los vendes, no es mucho lo que puedes hacer al respecto. Leo aprecia la belleza, de modo que si tú eres de las que se sienten celosas ante una mirada admirativa dirigida a otra mujer, más vale que trates de ser más tolerante. Un hombre Leo a quien su amada le deje porque le gusta flirtear se sentirá realmente herido y sin entender nada.


En esas circunstancias es muy capaz de simular cualquier cosa, desde un ataque cardíaco hasta una nota de despedida manchada de lágrimas, para con-seguir que tú te compadezcas y vuelvas corriendo a sus fuertes brazos cariñosos...y se mostrará tan convincente que te sentirás un monstruo de crueldad. A menos que a ti también te gusten las escenas dramáticas y emocionales, es mucho menos complicado comprenderle desde el principio. De todas maneras, lo más probable es que, si le sabes tratar, sus travesuras sean inocentes e inofensivas. Como no tienen una sensibilidad especial para los sentimientos ajenos, a pesar de su bondad básica, la mayoría de los hombres de Leo están tan inmersos en si mismos que pueden ser de una franqueza y de una falta de tacto brutales, pero con su sonrisa deslumbrante despejan inmediatamente la atmósfera.


En todo su cuerpo fuerte y grácil, el afectuoso León no tiene ni un huesecillo de maldad. Es posible que despida tremendas nubes de vapor, pero la maldad no entra en su estructura y no es capaz de actuar con auténtica crueldad (a menos que tenga una influencia negativa en su carta natal). Le gustan los deportes, pero a medida que pase el tiempo preferirá ser espectador, desde su cómodo trono tapizado, mientras tú le atiendes.
No siempre, pero con frecuencia, hay un giro raro en los varones Leo. A diferencia de Capricornio, que busca en una alianza un ascenso social, a veces el León tiende a casarse con una mujer por debajo de su condición. Aunque este igualmente deseoso de status social, no puede resistirse al deseo de adquirir un <<súbdito de quien pueda sentirse superior.


A veces se equivoca en la elección, y la tímida violeta que le adoraba sentada a sus pies le toma por sorpresa y consigue hacerle una jugarreta que le sirve para arrancarle el cetro. Cuando así sucede, el León destronado es un infeliz marido que lleva estampada la expresión trágica de un monarca en el exilio. Es triste, pero cierto: es raro que Leo tenga una familia numerosa. Muchos de ellos no tienen hijos, viven separados de ellos o tienen un hijo único. Es una pena, porque son una maravilla de padres, cálidos, a veces un poco demasiado tolerantes, entre uno y otro discurso sobre la seriedad en el comportamiento. Es posible que sus hijos se irriten ante sus exigencias y se harten de sus largas conferencias, pero ya aprenderán a someterle con halagos. Aunque él insista en que le respeten, y lo consiga, ya sabrán ellos sacarle cualquier cosa con un oportuno: <<Si, papá. Tienes razón, papá>>.


Es decir que la verdadera disciplina tendrás que imponerla tú. Es posible que los niños se resientan por su actitud arrogante, pero a los padres Leo se les recuerda casi siempre con afecto a lo largo de los años. Un último consejo: no prestes a los niños mas atención que a él, porque terminaras encontrándote con un problemon entre manos: un gigantesco ego magullado, casi imposible de curar. ¿Cómo puedes evaluar al enigmático varón Leo? ¿Es bondadoso o agresivo, generoso o cruelmente egoísta? ¿Es realmente un tipo sociable a quien le agrada la gente? Su reputación de superioridad, ¿ha sido ganada con falsos méritos o tal vez, como el verdadero León, es digno de que le llamen rey?


Es obvio que, al menos si se le mide con su propia vara por lo menos, se merece ser el amo y señor de su vida amorosa y de su carrera. Hay que admitir que en los dos campos obtiene por lo general grandes éxitos. Si Leo es un rey auténtico o apenas un pretendiente al trono es cosa que no podemos saber. Pero con respecto a tu propio León, hay algunas cosas que si sabes. Tiene apetitos insaciables, y es tan orgulloso como un pavo real. Exhibe una enorme necesidad de mandar y de ser amado por aquellos a quienes manda. Recuerda que Leo teme secretamente el fracaso y el ridículo. Es una constante tortura interna, y la verdadera fuente de su vanidad y de su dignidad exagerada. Sin embargo, cuando una gran causa ha conmovido su nobleza, el León no conoce el miedo.


Solo entonces aprende, él mismo, que la magnifica fuerza y el valor que ha fingido poseer, en realidad, han estado presentes en el durante todo el tiempo. Es posible que Leo te saque de tus casillas con sus extravagancias durante el noviazgo, pero no es de ningún modo mal compañero Si piensas en una relación duradera. Si no tienes inconveniente en postergar tu ego y en construir tu vida en torno a la de él, una vez que lo hayas domado contarás con la adoración de este hombre y jamás volverás a sentirte sola. Piensa, además, que te arreglará todos los grifos del baño.


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El signo que viene lo puse excepcionalmente después que Leo porque no quise poner a Géminis Mujer y Géminis Hombre junto, no era estético:mareao:. Las aclaraciones que me pongo a dar :jajaja:!. Soy única :p!



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El Hombre Géminis


Podría contarte mis aventuras empezando por las de esta mañana...
Por lo menos esta mañana, al levantarme, sabía quien era, pero
creo que debo de haber cambiado varias veces desde entonces.


Estar enamorada es algo que le da a una gran sensación de cálida seguridad. Es un consuelo celestial saber siempre que hay alguien cuando una lo necesita, que ya no hay por que seguir andando sola. Todas las dudas que conociste antes, lectora, se evaporan como el rocío... a menos, claro, que te hayas enamorado de un mercuriano, que puede reducir esa cálida <<seguridad>>. Con Géminis será mucho mas realista que si lo mandas a buscar el pan el lunes, no lo esperes de vuelta hasta el jueves. Nunca lo busques si no le ves venir, ni te le cuelgues de los faldones de la americana cuando quiera irse.


Una vez que te hayas adiestrado en la aceptación de su espíritu inquieto e impredecible, es posible que las cosas funcionen, pero no insistas en el <<consuelo celestial de saber siempre que hay alguien cuando una lo necesita>>. Probablemente jamás estés segura de cuando va a estar este hombre en ninguna parte, de modo que eso puede seguir manteniendo en ti algunas de las dudas que supuestamente se disipan con el romance. Es verdad que si estás enamorada de un Géminis no estarás sola. Eso, seguro que no. Tendrás por lo menos dos hombres que anden contigo... y los dos serán él. Ya sabes que nació bajo el signo de los Gemelos, pero en su caso, no se trata jamás de verdaderos gemelos, de mellizos idénticos.


La naturaleza dual de Géminis combina dos personalidades completamente diferentes. Hasta podría ser que te vieras envuelta con uno de esos mercurianos que son trillizos o quintillizos, y en ese caso no te faltaría abundante compañía, ni siquiera cuando estuvieras sola con él. El Géminis típico es el favorito de las amas de casa. Le gusta la gente; cuanta más gente hay, mas contento está. Es raro el mercuriano que no sea una perfecta delicia como conversador. Tiene un gusto exquisito, es pródigo en comentarios ingeniosos, y sus cumplidos son obras maestras de cálida sinceridad. Con su habitual e impecable dominio de los modales y su instinto social, es quien mantiene la fiesta, en más de un sentido.


¿Conoces ese juego que se llama la caza del tesoro, en que las parejas deben conseguir los objetos de una lista disparatada, como un pelo de la cabeza de una famosa estrella de cine y un trozo de secante que hay sobre el escritorio del jefe de policía, y en el que gana el premio la pareja que ha reunido mas cosas de la lista? Es la diversión favorita de Géminis, porque combina el mayor contacto posible con toda clase de gente con la mayor oportunidad posible de ir de un lugar a otro, y al mercuriano le encantan ambas cosas. Si llegas a conocerlo en una reunión social donde él esté representando su fascinante acto de las personalidades múltiples, no tienes salvación: quedarás convencida de que es el hombre más atractivo, interesante e inteligente que hayas encontrado jamás.


Eso, nadie podría discutírtelo; es probable que lo sea, y no es raro que tú estés excitada e impresionada. Pero antes de que por él te decidas a cambiar de apellido, asegúrate de que eres capaz de hacer frente a un destino incierto con un hombre cuyos caprichos pueden cambiar con el viento, y cuyas metas en la vida pueden ser completamente distintas antes de que hayáis terminado la luna de miel. <<¿Es que me contradigo?>>, escribió una vez el Géminis Walt Whitman, <<...Contengo multitudes>>. Lo supiera o no, estaba resumiendo en esas palabras la naturaleza de Mercurio. Es posible que un día tu galán Géminis aparezca con un mono parlanchín encaramado en un hombro y te invite a ir a un circo de pulgas. Te traerá flores, perfume, un disco o un par de libros, y hasta posiblemente uno del que él es autor.


Las horas pasarán en un soplo mientras tú gozas, feliz, en su cordialidad, te ríes de sus ingeniosos chistes y te derrites bajo su encanto cálido y alegre. Géminis te dirá <<Te amo>> de cien maneras diferentes, como no podría hacerlo nadie mas en el mundo. Al día siguiente te llamará por teléfono para deshacer una cita sin ningún motivo aparente, y tú empezaras a imaginarte toda clase de cosas. ¿Hablaba en broma cuando dijo que te amaba? ¿Estará saliendo con alguna otra chica? ¿Tendrá algún problema? Es posible que tus temores tengan fundamento, pero tam-bién es posible que no lo tengan. Una semana después, Géminis reaparece, lleno de comentarios sarcásticos, malhumorado e irritable. Se mostrará impaciente, crítico y quisquilloso. Es posible que critique tus zapatos, tu lápiz de labios o tu gusto literario, y que esté carcomido por dudas sobre la posibilidad de que lleguéis a ser felices juntos.


Claro que también es posible que se le vea hosco y preocupado, mentalmente distante, lejano. Y de nada sirve preguntarle por qué: no obtendrás ninguna respuesta coherente. Si sobrevives a esa experiencia, al cabo de pocos días mas estarás visitando una galería de arte, un teatro, un museo o biblioteca con tu cortejante Géminis, absolutamente hipnotizada por sus conocimientos y por la amplitud de sus intereses. Le encontrarás excepcionalmente tierno, lleno de sueños frágiles como mariposas y de dulces esperanzas para el mañana. Entonces, te propondrá el matrimonio. Así, con la rapidez del relámpago. Y tú, olvidada de los truenos y de los nubarrones, y de toda la lluvia que ya viste caer, le contestarás que sí antes de que cambie de parecer y... ahí estás, comprometida con un enigma.


Sí, enigma he dicho. Si esperas otra cosa, digamos un hombre estable y paciente que se muestre siempre gentil contigo mientras el amor y la vida se desenvuelven con la calma de una góndola que se pasea por los románticos canales venecianos, entonces van en la misma dirección que una calesita: en círculo. Bájate a toda prisa sin pensar que podías haberte ganado el anillo. No dejes que la música, ligera y alegre, te engatuse y te haga ir en pos de una escena pintada de colores que no son nunca los mismos, y en la que tan pronto puede aparecer un gris deprimente como un radiante amarillo o un sedante azul. Si eres una romántica incurable que pretende encontrar la armonía perfecta, corres algo más que cierto peligro.


Diga lo que diga el resto de su carta natal, si el Sol estaba en Géminis cuando el nació, este hombre no seguirá estando mañana donde está hoy, ni conservará de ayer ningún recuerdo perdurable. De una manera o de otra, cambiará. Es cierto que los cambios pueden ser siempre para mejorar, que es posible que apunte constantemente a metas más altas. Pero eso nunca podrás saberlo con certeza. Si tienes alma de jugadora, es posible que con él tengas suerte y te encuentres celebrando tus bodas de oro en medio de una gloriosa armonía mental y emocional. Pero los buenos jugadores saben cuales son las posibilidades antes de hacer su apuesta. Asegúrate de que tú las sabes. Dos raras excepciones a la inestabilidad geminiana son, aparentemente, el presidente Kennedy o la reina Victoria de Inglaterra.


Sin embargo, no olvides que John Kennedy tuvo siempre múltiples intereses que cambiaban constantemente, y la reina Victoria (que por su posición planetaria se acercaba mucho a Tauro) introdujo muchos cambios importantes en las costumbres de su país. De todas maneras, entre nosotros no hay muchos que se casen con reyes, reinas o presidentes, a quienes las circunstancias han obligado a madurar y a adaptarse a una pauta establecida. Un excelente ejemplo de la dualidad de expresión de Géminis es la confesión de una mujer que fue víctima de ella. El Mercurio era un productor cinematográfico y la mujer una famosa actriz, una morena nacida bajo el signo de Piscis. Después de un fin de semana que ella y otros signos pasaron como invitados en el yate de Géminis, y durante el cual el huésped se mostró con ella abiertamente insultante, grosero y distante, en forma alternativa, la actriz se sentía desalentada e intrigada.


No se que es lo que le pasa –comentó–. Supongo que me odia. Yo jamás le he hecho nada, y sin embargo casi no me ha dirigido la palabra durante todo el fin de semana. Ah, pero es que... vaya si ella le habrá hecho algo: había hecho que Géminis se enamorara de ella, y con la seriedad suficiente para que se casara con la actriz poco después del incidente. ¿Pero cómo reaccionó al tomar por primera vez conciencia del amor que sentía por ella? Como si su amada hubiera sido Lucrecia Borgia. Es probable que esa experiencia no impida que las lectoras se zambullan en un romance con un hombre de Mercurio, pero tal vez les calme el dolor de las heridas a algunas chicas que hayan venido padeciendo la frialdad de un Géminis que está, casi con seguridad, perdidamente enamorado de ellas, pero que lo oculta cuidadosamente por sus propias e insondables razones.


Géminis tiene una necesidad inconsciente de disfrazar sus verdaderas intenciones, de entablar con los otros una suerte de esgrima verbal y de encubrir sus motivos con acciones duales. En general, buscarán confundirte. Después, con la característica incongruencia de Géminis, harán un giro de 180 grados y se mostrarán tan directos que te dejarán poco menos que sin aliento con su franqueza y brusquedad. Con Géminis, el amor es fácil y divertido, siempre que no trates de aproximarte demasiado. Hay un núcleo íntimo que sólo le pertenece a él, que jamás compartirá con otro ser humano, ni siquiera contigo. Mantén las cosas calmas y no te muestres abiertamente apasionada ni dramática. No le aburras, interésale siempre, y tu romance con Géminis puede ser muy especial. No te rebeles contra su versatilidad; cambia con él. Mantente tan alerta, interesante tanto por la vida como él. De otra manera, tu amor podría no ser mas que... una de esas cosas.


Mercurio busca, por encima de todo, una compañera mental, que esté a la altura de su ingenio, que incluso pueda superarle de vez en cuando, porque no es egoísta. Es muy realista y disfruta de los desafíos mentales. Lo último que quiere es un felpudo o una ratita aburrida. Deja que a través de tu imaginación femenina se trasluzca el cerebro, que eso no le asustará, como podría pasar con otros hombres. Le hará girar en la dirección debida: hacia ti. Géminis tiende a dejar a los viejos amigos por otros nuevos, pero eso no significa que no tenga corazón. Su propia personalidad fluctúa y avanza de manera tan inevitable que para los de este signo es natural buscar a quienes armonizan con sus intereses del momento.


Para Géminis, donde cuelga su sombrero está su hogar. Es raro que muestre apego profundo y duradero hacia recuerdos, lugares, personas y cosas del pasado. Durante un largo período de soledad, es posible que el mercuriano vierta algunas lágrimas sentimen-tales, pero la causa esta mas bien en la soledad que en la nostalgia del ayer. Es sociable y le enferma –cuando no le da pavor– estar solo durante mucho tiempo. Si puedes hacerle llegar el mensaje de que tú serás una pareja que esté siempre próxima, pero sin depender de él ni esperar que él dependa de ti, es probable que se avenga a firmar un contrato a largo plazo. Pero ten en cuenta algunas cosas. Muchos Géminis se casan más de una vez, aunque los matrimonios múltiples se darán con más probabilidad si se ca-san demasiado jóvenes que si esperan a la madurez.


No todos los Géminis tienen dos esposas, pero de casi cualquier cosa sí tienen dos: tal vez dos coches, dos apartamentos, dos títulos universitarios, dos traba-jos, dos sueños, dos animales mimados, dos afeitadoras, dos pasatiempos favoritos, dos ambiciones. Para Géminis, el dos es un tic. Tengo un excelente amigo Géminis, Frank Blair, reportero de la NBC, que hasta se toma sus vaca-ciones anuales en dos épocas distintas del año. ¿Sus pasatiempos? Pues, pilotea su propio avión, navega en su propio yate y juega mediocremente al golf. (No estoy segura, pero creo que Frank puede ser uno de los Géminis trillizos.) Toca dos instrumentos musicales, tiene montones de hijos, montones de premios y de trofeos en las paredes de su oficina en la NBC, montones de amigos, dos trabajos en la radio, dos afeitadoras eléctricas en su escritorio y por lo menos una docena de sueños y de proyectos a la vez, que cambian cada seis meses más o menos. En cambio, tiene una sola esposa. (Debe de tener ascendente en Cáncer o en Tauro.)


Observa además que la radio es una ocupación típica de Géminis; Mercurio rige las comunicaciones y las noticias. Indudablemente, Frank tiene el encanto de Géminis y su habilidad manual. Es frecuente que esté sirviéndose un vaso de zumo de tomate, dictándole a su secretaria, telefoneando a su mujer, afeitándose y ordenando sus papeles, y de alguna manera, lo hace todo al mismo tiempo. Los Géminis son expertos en prestidigitación. En asuntos financieros predomina también la dualidad. Un mercuriano puede ser de una generosidad fabulosa y después, bruscamente, mostrarse avaro. Si calibramos las dos actitudes gemelas, yo creo que gana, con mucho, la generosidad. Géminis tiene pocos deseos de acumular, ya sea dinero o conocimientos. En cualquiera de los dos casos, prefiere absorber, seleccionar y devolver mejorado.


Es el comunicador cuya función es crear ideas siempre nuevas y originales y servir a los demás mediante la versatilidad de sus procesos mentales, rápidos y brillantes. ¿Si te será fiel? A su manera si, claro. Hay mil respuestas a esta pregunta, cuando hablamos de Mercurio. A él le gusta conversar y le gusta estar con gente. Tiene también un extraño atractivo para las mujeres, de modo que no faltará ocasión de murmuraciones y sospechas. Pero puedes contar con una cosa: es raro el Géminis a quien su sentido de honestidad, profundamente arraigado, le permita ser falso en sus acciones si tú tienes fe en él. Quiero decir, verdadera fe y verdadera confianza, no de esas que secretamente ocultan una duda. Mercurio percibirá siempre si estás dudando en secreto, es frecuente que su mente intercepte tus pensamientos como si estuvieras enviándole una emisión por radio.


Sin embargo, no es buena idea esperar que un marido Géminis desanime a todas las mujeres, simplemente porque lleva anillo de casado. Las mujeres forman parte de la escena y Géminis no quiere perderse la escena. Si hay mujeres, el mercuriano hablará con ellas, y hasta bromeará o se beberá alguna copa con ellas. Para Mercurio la comunicación es lo mas natural, independientemente del sexo de quien le escucha. Pero eso no significa que deba tener romances con ellos. Es verdad que hay muchísimos Géminis que son lisa y llanamente promiscuos, pero no importa lo que te hayan contado: siempre hay una causa. Ser objeto de desconfianza o de incomprensión, en el terreno que sea, es profundamente perturbador para el hombre de Mercurio, es algo que le frustra y le deprime. Cuando se siente así desdichado, Géminis puede revolotear de un lado a otro, en busca de alivio para la maraña de sus emociones. Cuando se ve libre de la sensación de aislamiento mental y no siente que tenga que demostrar nada a nadie, no cae en la compulsión de experimentar entregándose a fugas caprichosas.


Una mujer que tenga perfecta armonía mental con un Géminis no necesita temer sus infidelidades, ni emocionales ni físicas. Hasta tal punto es ello verdad en los Géminis, que se puede considerar como una regla. Pero Géminis tampoco se dejará encadenar irrazonablemente. Esperar que cuando alguien le sonríe, sea hombre o mujer, niño o adulto, él no le devuelva la sonrisa, es tanto como esperar que el sol no brille. Su naturaleza, amistosa y alegre, lo lleva constantemente a buscar compañía, y esta compañía puede ser el conductor del tren en que viaja todos los días o la camarera del café que está a la vuelta de su oficina. No trates de acorralarlo, pues cuando alguien intenta cercar su espíritu, Géminis puede volverse tan escurridizo e impredecible como el viento.


Con los niños será compinche, pero no esperes que los discipline, aunque les enseñará muchísimas cosas antes de que lleguen siquiera al jardín de infancia. Es probable que les encante confiarse a él, porque muy rara vez se mostrará escandalizado o será duro en sus juicios. Géminis sabe amar sin sofocar. La rela-ción de Géminis con sus hijos es por lo común muy íntima, aunque tal vez poco coherente, por contradictorio que esto pueda parecer. Por mas afectuoso, cálido y vivaz que pueda ser con la gente, es posible que no les insista en la necesidad de ajustarse a rutinas, ya que al propio Géminis no le gustan las rutinas. También mostrará tendencia a criticar el comportamiento de los críos un día y aprobarlo al día siguiente, con lo cual puede crearles confusión. Aunque a veces él consiga pergeñar un sermón, cuando haga falta una palmada o una imposición más seria, tendrás que intervenir tú para ello. Los papás Géminis tienden a malcriar a los chicos.


Es posible que su imaginación le lleve en ocasiones a afirmar algo que no puede mantener. Tú tendrás que hacerle ver lo importante que es que cumpla su palabra. Pese a todas sus buenas intenciones, acabará quebrantando algunas de sus promesas, rápidas e impulsivas. Si los niños no le significan ningún tipo de atadura ni traban sus múltiples actividades, Géminis gozará enormemente con ellos. Una palabra de advertencia: aunque será raro que los castigue físicamente, la propensión geminiana a los comentarios sarcásticos y punzantes puede causar profundas heridas en sus jóvenes corazones, dejando cicatrices que permanecerán toda la vida. También puede mostrarse renuente a expresar su afecto en forma de besos y abrazos, a menos que haga un esfuerzo consciente por superar el natural desapego de Géminis.


Sin embargo, yo he conocido algunos padres de este signo que aparentemente prodigan a sus hijos la ternura que son incapaces de volcar sobre los adultos. Ocúpate de que los pequeños no le abrumen, no le pidas que haga de canguro si a él evidentemente no le gusta, y se desempeñara muy bien como padre, no importa que tengáis un hijo o una docena. Los celos son una preocupación que posiblemente nunca tendrás con un marido Géminis, porque el afán de posesión no se cuenta entre los rasgos típicos del signo. Si en alguna ocasión una sospecha le susurra algo al oído, por lo común la apartará (a menos que una influencia en su carta natal condicione otra cosa). Claro que hasta cierto punto los celos son normales en todo el mundo, pero normalmente, en Gémi-nis no son exagerados. Con este hombre, el amor no es una relación estrictamente física.


Sus sentidos le permiten oír más, ver más y percibir más que otros, y Mercurio le ayuda a registrar vivamente las impresiones más delicadas. Su amor tiene una cualidad tan etérea y fugitiva que puede dar la impresión de que le falta la pasión terrenal de otros signos solares. Pero a menos que lo que busques sea un hombre de las cavernas que te arrastre del pelo por los bosques, Géminis te resultará un amante más que satisfactorio. Te pintará sus emociones con frases románticas e imaginativas, y responderá a la avidez de tu corazón con la extraña belleza de su idealismo. Recuerda que la típica frialdad emocional de Mercurio puede caldearse considerablemente si los dos escucháis la misma música y soñáis los mismos sueños.


Géminis necesita experimentar una fusión total en lo mental y espiritual para que la pasión física cobre intensidad. Aunque parezca tortuoso, es el único cami-no verdadero hacia su corazón. Tendrás que acostumbrarte a la palabra <<si>>. Es posible que te diga: "Si te amara, podríamos..." o: "Si te amara, habría que..." y que a veces deje la oración sin terminar. Empieza por borrar la palabra <<si>>; él la usa únicamente como cortina de humo, por razones de seguridad. Una actitud de crítica áspera y fastidiosa, unida a continuas escenas emocionales, mellará sin duda el filo del delicado y sensible amor de Géminis. Trata de coger con la mano un puñado de mercurio. ¿Qué pasa? Inmediatamente se disuelve en centenares de brillantes pelotillas plateadas que se te escapan sin cesar por entre los dedos contraídos.


Un hombre de este signo, cuya esposa creía conocerle muy bien, escribió las siguientes líneas antes de abandonarla, y ella las encontró después del divorcio entre los papeles de él: Irrumpiste en el sueño y con botas claveteadas pisoteaste la blanda alfombra de mi ensueño... Más de una vez leerás u oirás decir que Géminis necesita siempre dos amores al mismo tiempo. La dualidad geminiana, con su sugestión de engaño, es algo que se menciona con tanta frecuencia que puede causar angustias sin fundamento. Me permitiré modificar esa afirmación. Géminis necesita dos amores, pero no necesariamente dos mujeres. Es una adivinanza, pero si tú lo comprendes de verdad, podrás hallar la respuesta.


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La Mujer Libra


Y así continuó, tomando primero un partido y después otro, y haciendo de todo ello una verdadera conversación... Generalmente le daba excelentes consejos (aunque ella misma rara vez los siguiera)...


Una vez un niño me hizo una pregunta que no era fácil de responder. Quería saber por que las señoras se ponen pantalones y los hombres usan agua de colonia gratamente fragante. Con mi típico estilo Aries, le tranquilicé con una respuesta impulsiva. <<Mira –le dije rápidamente, antes de que se le ocurrieran mas interrogantes fastidiosos–, eso es porque en cada hombre hay un poquito de mujer, y en cada mujer un poquito de hombre. Ahora, vamos a jugar a las damas>>.


Retrospectivamente, me enorgullezco bastante de mi instantánea sabiduría marciana. La afirmación es válida hasta cierto punto para todos los signos solares, y superválida para Libra. En el más viril y recio de los varones Libra encontrarás algún rasgo del sexo opuesto, y la misma jugarreta le hace Venus a sus compañeras femeninas. Libra puede ser tan delicada como un vaporoso conejito blanco, y su voz un dulce susurro persuasivo. Puede vestirse con sedas y encajes, y llevar el pelo fragante de colonia. Hasta puede parecerte una muñequita que podrías levantar con una mano (aunque un ascendente Tauro o Sagitario la haría bastante mas pesada).


Pero con toda su feminidad, la dulzura de sus modales y el encanto de su gracia, esta muchacha se encuentra sorprendentemente cómoda usando pantalones, y le caen perfectamente. Sus procesos mentales siguen una lógica masculina y, en cualquier discusión que se te ocurra emprender, pueden estar a la altura de los tuyos, y hasta superarlos ocasionalmente... aunque el aspecto femenino de Libra es, generalmente, demasiado astuto para permitir que te des cuenta de eso hasta no haber pasado sana y salva la meta de la luna de miel. Durante la estación de conquista Libra se cuidará muy bien de ganarte una partida de ajedrez, pero no se pasará la vida manteniendo su agudeza mental oculta tras los graciosos hoyuelos. En algún momento te verás enfrentado con el despliegue de su potencia cerebral.


La mayoría de las mujeres Libra sacarán a relucir su ingenio tan pronto como se presente un tema que ofrezca la menor posibilidad de discusión. Puede ser cualquier cosa: por que no debes usar cuello con botón, o que es lo que pasa para que no te asciendan en el trabajo. (Respecto a esto último, ella pensará que es en parte por culpa tuya, y en parte de tu jefe. Con Libra, cualquier cosa termina siendo seis de un lado y media docena del otro, de modo que todo resulte igualado.) Si te niegas a morder el anzuelo, ella discutirá consigo misma. Una chica Libra es capaz de empezar sola un altercado, de seguirlo sola y termi-narlo sola, majestuosamente. Es posible que tu única contribución sea un <<pero, ¿por qué?>> o <<a mi no me lo parece>>, pero en ocasiones es todo lo que ella necesita para lanzarse a un brillante monólogo que puede durar una hora, o mas.


Mientras dure, sin embargo, es probable que tú te sientas inundado por su encanto. Cada tres frases, mas o menos, se encenderá esa deliciosa sonrisa, insoportablemente, hasta que termines cambiando de opinión con tan poco esfuerzo como ella cambia de sexo al asumir las prerrogativas del hombre para después convertirse de nuevo en una conejita mimosa. Te convencerá con lógica, pura y clara, sin que tú pierdas mucho, a no ser tu orgullo, que tampoco echaras demasiado de menos, bajo el hechizo de esa fascinante sonrisa. Y por lo general tiene razón, porque sus decisiones son tan cuidadosamente sopesadas como las del Tribunal Supremo. Las mujeres Libra no necesitan que se las empuje mucho para poner en marcha una comparación verbal entre dos puntos de vista cualesquiera.


Una temporada de actividad política le dará montones de oportunidades para aguzar su retórica y pulir su talento discursivo. Es muy capaz de trabajar en política, una vez que haya decidido que partido y que candidato la convencen. Aparte esa tendencia típica de su signo a pesarlo todo dos veces para estar segura de no equivocarse, puede ser una mujer estupenda para un hombre que se sienta atraído por el amor, el compañerismo, o ambas cosas. Su tendencia a discutir se basa en un sincero deseo de llegar a una decisión imparcial. Po-dría ser peor. Por lo menos, no va estableciendo sobre la marcha sus propias reglas, ni se resiste obstinadamente a todo razonamiento, como las mujeres nacidas bajo otros signos solares. Además, la mayoría de sus opiniones van formuladas con un tacto diplomático que en alguna medida suaviza el golpe.


Tal vez la mejor manera de hacer que valores a tu mujer Libra sea darte un rápido panorama de lo que pasaría con los otros signos solares en una situación simple. Supongamos que se está hablando de tarjetas de visita. ¿Habría que usarlas actualmente, o están ya anticuadas? Además, ¿que aspecto deberían tener? Hagamos un rápido recorrido del zodiaco, suponiendo que tú eres el único hombre en una habitación, con doce mujeres. (Espero que te resulte una suposición agradable.) La discusión sería más o menos en estos términos:

Aries: Yo no las necesito. Me basta el teléfono.

Tauro: Yo rara vez voy de visita. A mi me visitan.

Géminis: ¡Tarjetas de visita! ¿Quién tiene tiempo para eso?

Leo: Bueno, si fueran realmente muy locas y de aspecto impresionante

Virgo: Tendré que ver en el Consejero Social que es lo que dicen...

Sagitario: ¡Ay Dios! ¿Queréis decir que la gente todavía encuentra tiempo para esas minucias?

Escorpio: Si no están en casa, peor para ellos. Los que se lo pierden son ellos, no yo.

Acuario: Pero, ¿estará lloviendo fuera? Me pareció que oía un trueno.

Cáncer: Las tarjetas son tan impersonales... Yo prefiero dejar una nota.

Piscis: Yo percibo siempre cuando no está la gente, y las visito únicamente cuando por un mensaje subliminal se que me quieren ver.

Capricornio: La costumbre es correctísima, pero no tiene ningún sentido hablar del diseño. Si no esta impresa, no es una tarjeta de visita.

Libra: Bueno, todo depende, si uno quiere hacer lo que es correcto, hay que tener tarjetas.


Como gesto es encantador. Por otra parte, en nuestros tiempos podría parecer rebuscado usarlas, y una mujer moderna está demasiado ocupada para preocuparse por esas cosas. Claro que hay que considerar las razones que hay tras la costumbre. Y además, hay gente para quien las tarjetas son un lujo; si constituyen una carga para el presupuesto, no son necesarias. Sin embargo, si uno lo mira desde otro ángulo, no se puede dejar de pensar que en nuestro ritmo frenético actual faltan la belleza y la gracia del ayer, así que podría ser un dinero bien gastado. Y claro que tienen que ser impresas, aunque también algo diferente podría reflejar la personalidad individual.


Una persona creativa podría diseñar sus propias tarjetas... pero la gente muy sociable podría interpretar mal esas tarjetas tan individualistas. Quiero decir que a los Rockefeller no les parecería bien. Pero, si uno lo piensa, ¿quien va a visitar a los Rockefeller? A los amigos de uno les encan-taría que uno fuera original, pero es probable, que una impresión simple sea más aceptable. Por lo menos es lo que a mi me parece. Pero claro que...
Ahora, cuando ya ha examinado todos los pros y los contras, frunce un poco el ceño, esforzándose por elegir entre sus propios argumentos para llegar a una decisión firme y válida. Ya ves que lo único que se puede decir de Libra es que es justa y que procura llegar en todo a un juicio equilibrado.


Es posible que te aburran un poco sus digresiones sobre temas tan mundanos como las tarjetas de visita, pero cuando se trate de algo que realmente importa, apreciarás sinceramente sus esfuerzos por ser justa y su capacidad de dar un juicio correcto después de haber sopesado todos los factores. Otras mujeres pueden dar cualquier opinión que no refleja más que su naturaleza individual, y tampoco les importa mucho lo que pienses tú o la exactitud de la respuesta. Para una mujer Libra, eso de que lo que ella piensa es lo que está bien, no es válido. Tu opinión es tan digna de respeto como la de ella y la de Platón, mientras no se tome una decisión, tras haber llegado a la conclusión de las imperfecciones de los argumentos de ella, de los tuyos y de los de todos los filósofos.


La mayoría de las chicas Venus trabajan antes y después de casarse. Buscan el dinero por las cosas bellas que con el se pueden comprar. Las aves de Libra necesitan montones de hermosas plumas para su suntuoso nido. Les gusta la ropa buena, los perfumes caros, la música clásica y... ¿no había dicho alguien que Libra era masculina? Si, yo. Es un aspecto de ella. Pero cuando la veas con esos peinados tan bonitos, apenas si advertirás que es tan cabeza dura. Las mujeres Libra necesitan grandes sumas de dinero, sobre todo para poder alejarse de la sordidez y la fealdad de ambientes discordantes, que de hecho pueden llegar a hacerles caer enfermas, emocional y físicamente. Pero hay otra razón para que trabajen, otra razón para que Libra quiera dinero: su hombre. Si hay una cosa que Libra atesora por encima de todas en este mundo temporal, es el hombre a quien decidió amar, honrar y domesticar.


No puede jugar sola y, tanto en los negocios como en el amor, las sociedades constituyen su mas autentica necesidad. No le gusta trabajar sola, y es literalmente incapaz de vivir sola. Cuando visitan a un astrólogo, a las mujeres Libra no les interesan, realmente, más que dos preguntas: Si no es una, es siempre la otra. Ya sea <<¿Cuándo conoceré a alguien a quien realmente ame?>>, o bien <<¿Cuándo encontraré a alguien con quien establecer un negocio?>>. Para ella el matrimonio es una empresa conjunta, y las reglas son casi tan estrictas como las de una organización corporativa. Tú eres el presidente de la asociación y recibes los honores de tal. Ella es la presidenta del Consejo de Administración, la que a su manera, femenina y protectora, impedirá que tú cometas errores. Su naturaleza está hecha para el trabajo en equipo, y querrá participar en la mayor cantidad de intereses y actividades tuyos que le sea posible.


De buen grado abrirá su casa a los invitados de su marido, y es lo bastante femenina como para seguirle cuando él decida cambiar su profesión, mudarse de ciudad o cultivar nuevos amigos. Todo eso es especialidad de ella, que está ahí para allanar el camino y asegurarse de que el no lo eche todo a rodar con alguna acción impulsiva o un juicio mal meditado. Realmente, tendrás que darle crédito. La mujer típica de Libra no tiene deseo alguno de ser una piedra al cuello de su marido; más bien desea apartarle las piedras del camino. No es, ni con mucho, tan dominante en la superficie como lo es por dentro, porque lo último que puede querer Libra es formular una serie de afirmaciones de las cuales tú pudieras hacerla responsable mas adelante. En la mayoría de los casos, pisará con suavidad (a menos que tenga ascendente Aries... y si te metes con una mujer que tenga una doble influencia cardinal como esa en su carta, vas a tener muchos problemas).


Por término medio, las mujeres de Libra son muy intelectuales y están dotadas de sorprendente poder para el análisis, que te puede ser realmente útil para ayudarte a resolver problemas de negocios. Libra rara vez deja que sus emociones le impidan llegar a una decisión desapasionada o a un punto de vista equilibrado, y por lo general podrá asesorarte mejor que tu banquero. Naturalmente, su capacidad en esos aspectos puede llevarla a suplir a muchos, y no solo eso, sino que si es una muchacha típica de Venus ofrecerá las perlas de su sabiduría en la bandeja de plata de su encanto y de su amabilidad para la sugerencia. Su mano de hierro calza leve guante de terciopelo, y es tan suave el codazo con que puede apartarte del mal camino para reencauzarte por el bueno que podrías jurar que el cambio fue idea tuya.


Normalmente, un hombre Aries, Escorpio, Leo o Tauro levantará un pedestal a su mujer Libra, para adorarla. Y no hace mas que justicia, porque ella también le adora. Las visitas que lleguen al nido de amor de una joven Libra felizmente casada tendrán la sensación de encontrarse frente a Adán y Eva, antes de que se les apareciera la serpiente, y lo estropeara todo. (Dos personas Libra, si se casan, se convertirán invariablemente en arrullantes palomas o en adversarios que se muestran los dientes. Se irán a un extremo o al otro ya sea en forma permanente o alternada.)


Son muchas las gratificaciones que se derivan de la convivencia con una mujer Libra. Jamás te abrirá las cartas, porque simplemente no se le ocurriría semejante vileza. Jamás revelará tus secretos comerciales a los amigos ni te pondrá en situación incómoda en presencia de tu jefe. Es posible que su encanto lo so-meta a él también, con esa misma sonrisa que le sirvió para derretir tu corazón la primera vez que la viste. Hay algunas mujeres Libra, con posiciones desfavorables de Marte, que en ocasiones pueden permitirse excesos emocionales, o bien comer y beber mas de lo que les conviene, pero son muy, muy escasas. Aun-que alguna que otra vez una de ellas pueda dar un traspié con su balanza, tarde o temprano volverá graciosamente a su estado normal de celeste armonía.


Habrá momentos en que te preguntarás si es un ángel o un demonio, pero lo mas frecuente es que sean los ángeles quienes juegan de su lado. Probablemente, no te quejarás por falta de demostraciones físicas de su amor, porque es tan senti-mental como el encaje antiguo, y tan afectuosa como tiene derecho a serlo cualquier mujer. Aunque sus mimos y arrullos sean sinceros, esas miradas dulces, la ternura de la caricia, el abrazo cálido y la profusión de besos también son una cortina de humo bastante efectiva para su oculta tendencia masculina. No hay ley que diga que la sinceridad no pueda tener aplicación práctica. Es posible que tu hogar parezca uno de esos anuncios de las revistas, con un alfombrado de pared a pared. Los colores estarán armonizados y los muebles serán de buen gusto.


Los cuadros colgarán derechos, y generalmente las comidas se servirán a la hora en punto. Con la mayoría de las chicas de Venus puedes contar también con: servilletas de hilo, platería sellada, velas encendidas, vino, buena música y un menú equilibrado. Si tienes en cuenta la claridad de su mente y lo chispeante de su ingenio, realmente no puedes pedir mucho más. Para Libra, ser mujer es una especie de trabajo de dedicación exclusiva y dura toda la vida, y en algún momento alcanzará la perfección. Será raro que ese aspecto masculino de su voluntad te resulte molesto, a menos que seas uno de esos machos imposibles que quieren andar por ahí gritando como el rey Enrique VIII, y que esperes que las mujeres de tu vida se conduzcan como consortes obe-dientes y temerosas de perder la cabeza si se les ocurre decir algo mas que <<sí>> o <<no>>. Tu cónyuge Libra, decididamente, dirá algo más que <<sí>> o <<no>>, porque le gusta hablar.


Pero también sabrá halagarte escuchándote, cuando tengas necesidad de un público bien dispuesto. Es a la vez dulce y fuerte, y no son muchas las mujeres que pueden hacer con éxito un número de tan delicado equilibrio. La suavidad de sus modales y su serena capacidad para refrescarte la frente con calentura pueden hacerte pensar que Libra es débil y desvalida, o que se mostrará temblorosa y femenina en momentos de crisis. En ese caso te equivocas de medio a medio. En la composición de su delicada feminidad entran nueve partes de acero. El hecho de que el detalle se te haya escapado cuando ella, valiente y astuta, se esforzaba por hacerte morder el anzuelo durante aquellas primeras partidas de ajedrez en que siempre se dejaba ganar, no es motivo para que sigas toda la vida ciego. La próxima vez que se produzca una situación de emergencia en la familia, abre bien los ojos y ya verás quien es la que mantiene la estabilidad del barco.


En realidad, quiero decir. No es necesario que la verdad te despoje de tu hombría. Nadie más que tú sabrá cuanto necesitas la ayuda de su mano en el timón, cuando las cosas se ponen difíciles. Ella jamás se jactará de lo que hace ni te privará de nada, a no ser de buena parte de la responsabilidad. Da gracias de que sea tan de fiar. Además, ¿no está realmente guapa con sus pantalones, cuando se ocupa del jardín o va al supermercado? Las mujeres con pantalones están muy bien, siempre y cuando tengan la sensatez suficiente para ponerse organza y volados en las fiestas, y sedas crujientes en la intimidad. Y ella la tiene. Una de sus cualidades más valiosas es su capacidad de esconder su mentalidad rápida y aguda tras una increíble feminidad.


Una madre Libra amará y cuidará tiernamente a sus hijos, pero... ¿la verdad?, ellos irán después que tú. Son los socios minoritarios, pero tú eres el presidente de la compañía, y eso es un hecho básico que Libra jamás olvidará. Les dará un gran trozo de su corazón, pero jamás dejará que se adueñen del rincón que te entregó a ti antes de que ellos llegaran. Si con sus juegos perturban tu descanso, puede mostrarse muy estricta, y si te desobedecieran se enojaría mas que si la desobedecen a ella. De pequeños, tus hijos serán dulces y limpios, y pulcros y corteses de adultos... si es que tú no los echas a perder, a lo que ella no se opondrá porque el dueño y señor eres tú. No es más que otra de esas decisiones que posiblemente dejará en tus manos para no correr ella el riesgo de equivocarse. Las madres Libra, generalmente dulces, pue-den ser firmes cuando es necesario. Nunca descuidarán a sus hijos ni los ignorarán, pero la verdad es que si Libra decidió ser madre, fue ante todo para darte a ti más felicidad.


Una de las primeras cosas que les enseñará a decir a los niños cuando aprendan sus oraciones será: <<Dios bendiga a papá>>. Jamás permi-tirá que te falten al respeto, pero si tú te pones un poco demasiado exigente ella les enjugará las lágrimas, y hasta les dará furtivamente un caramelo cuando se te haya ido demasiado la mano. Claro que si los dulces la tientan demasiado puede ponerse gorda. También es posible que se demore mucho en una fiesta, o con una botella de vino. Y habrá veces en que sea un poco mandona, y otras en que los oídos se te cansen de oírla. Pero todas esas cosas sucederán únicamente cuando su balanza emocional esté momentáneamente desequilibrada, y ya volverá a ocupar el justo medio cuando el mal momento haya pasado.


Salvo que alguien le apoye un pie en alguno de los platillos, la balanza de Libra siempre termina por equilibrarse. Si uno de los platillos baja un poquito, añade algo de afecto en el otro, y ya subirá. Si el otro se inclina bajo el peso de una excesiva tristeza, quítale un poco con tu comprensión y reencontrarás su hermosa armonía. ¿Qué otra mujer podría tener el porte de una princesa cuando la llevas al baile y después, en un abrir y cerrar de ojos, atarse las botas, ponerse el mono de leñador y ayudarte a cortar la leña para el fuego? Le sobra gracia para lo primero y fuerza para lo segundo. Si a nadie se le ha ocurrido componer una canción con el nombre de tu amada Libra, escribe tú una melodía con tiempo de vals, bien ritmada, y dedícasela. Fortissimo.


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Miles de gracias, Crissty!!! :eek: Lo que has puesto de mi es todo cierto menos una cosa. Gracias, Aeon, porque ya se que mi ascendente es Acuario.
Una pregunta, es el ascendente lo mismo que el signo solar? :confused:
Crissty, esa descripcion de la mujer Piscis he de enseñarsela a mi marido porque creo que va a ayudar mucho a nuestra relacion, asi el podra entenderme mejor cuando yo no se lo puedo explicar. Podrias tu poner tambien sobre el Hombre Capricornio? Asi le comprendere yo mejor a el :)
 
:dime: Silvi me complace mucho lo que me has dicho. Justo tocó que esta descripción del signo te identifica más, me imagino será porque está hecha por una astróloga profesional. Ahora siempre ten presente los detalles de los otros signos el día que naciste, me refiero a que el ser humano es tan "complejo" que para tener una visión más exacta y personal, aquello siempre es interesante de tener en cuenta. Lo que no quita nada de "importancia" a nuestro correspondiente signo solar.

La página que compartió Aeon (gracias!!) es muy didáctica e interesante también. Ahora con respecto al ascendente he comprobado personalmente que la forma que ellos tienen de "darlo a conocer", de acuerdo sólo a las horas es una fórmula inexacta. Me refiero, puede coincidir en tu ascendente real, pero cabe la posibilidad dado que es importante el lugar de nacimiento y no sólo la hora, que no sea el que allí aparece. Te lo digo porque en mi caso no es el que me aparece en aquella web.

Te daré una página donde puedes sacar tu carta astral gratis, aunque en una versión resumida, a grandes rasgos, sin embargo es muy útil para tener datos mucho más exactos de todos los signos que están en tu carta, incluyendo obviamente, el ascendente y así asegurarte de cual es. Agregas tus datos: nombre, fecha, hora (lo más cercana posible) y lugar de nacimiento. Aparte puedes consultar otras cartas gratis que pueden resultar ser útiles para tu autoconocimiento y/o comprensión de otras personas. La página es ésta

La información del Hombre Capricornio ya está puesta, se encuentra 2 posts después de la Mujer Piscis. Y recuerda que esto sea sólo una "guía" al conocimiento tuyo y de quienes te rodean, la energía es mejor que esté puesta en tu sabiduría interior. Y la fé ampliamente en el creador. Abrazo :*)!
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Última edición:
Crissty dijo:
Sé que estás ansioso de leer a Piscis:rolleyes:, al igual que el Misterioso noble iluminado:jajaja::p; pero como sabes Piscis va al último de la lista así que falta. Aparte este signo es super especial para mí en lo personal por lo cual yo también estoy deseosa de ponerlo pero... hay que saber esperar, eh?:rolleyes:.

Es como que me hubieran pasado un delicioso platillo por la narices, y me hubieran dicho: aun no te llega el turno, haya que saber esperar... :7:
 
Crissty, muchas gracias por poner el mío :*).

Lo he leído todo y en lo que respecta a la descripción del Capricorniano es como si me hayan visualizado y plasmado mi forma de ser.

¡¡¡Muy buen post!!! Gracias de nuevo.

:*):*):*)
 
DeNévoLa dijo:
Cristty, cuando puedas pon la mujer aries. :p
Ya está puesta, se encuentra 11 (mensajes) posts antes que el tuyo;).



Bluelite dijo:
Es como que me hubieran pasado un delicioso platillo por la narices, y me hubieran dicho: aun no te llega el turno, haya que saber esperar...
A veces... las mejores cosas de la vida tienen una espera previa:dime:. Por tanto disfruta del temple que ganas mientras esperas, para que luego se derrame al doble tu satisfacción al... obtener lo deseado:rolleyes:!



Aeon dijo:
Crissty, muchas gracias por poner el mío :*).

Lo he leído todo y en lo que respecta a la descripción del Capricorniano es como si me hayan visualizado y plasmado mi forma de ser.
:eek:¬.¬) En cierta forma me "satisface e impresiona" el que la mayoría se haya sentido tan ampliamente identificado con las descripciones aquí compartidas.

Entonces eres de los sensibles que no expresan tanto sentimiento externo? que pueden incluso hasta pasar
por "fríos" y sin embargo son muy sentimentales?. Aunque por aquí no lo haces tan mal, digo se "traspasa" tu sensibilidad en variados detallines. Y de nada Andrés, me alegra que te hayas entretenido por aquí :muac:.
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