Diálogo entre Dios y un perro abandonado - España
Cada año abandonan a miles de perros en España. Unos resultan de camadas no deseadas, otros son regalos de navidad que ya no tienen gracia, otros son abandonados porque llega un bebé, otros porque no han sido educados, otros porque ya no valen para cazar...
DIÁLOGO ENTRE DIOS Y UN PERRO ABANDONADO
Quien haya tenido perro sabrá lo fieles que son, lo que adoran a su dueño. ¿Qué sienten estos animales cuando son llevados a la perrera para sacrificarles? ¿Qué sienten esos cachorritos tirados a
contenedores de basura cuando aún no han abierto los
ojos? ¿Qué siente ese
galgo después de unos añ
os acompañando a su amo a la cazería cuando le abandona en medio del
campo? ¿Qué siente ese perro que abandonan en
una carretera y ve marchar a sus dueños en el
coche?
- No puede ser, ¡Se habrán olvidado de mi!
No, mi amor, no se han olvidado de ti. No
les esperes más allí sentado. Ya no te quieren, les estorbas, ya no era tan divertido sacarte a pasear, ya no tenía tanta gracia cuando les mordisqueabas los dedos, los niños ya han crecido y no quieren jugar contigo; la mamá está harta de tus pelos por todo el suelo; el papá está cansado de llevarte al veterinario para curarte. Si, tú eres uno de esos perros a los que han abandonado. ¿Creías que tus dueños eran especiales? No, son miserables, te tratan
como un objeto que ya no tiene valor, ya no estás de moda y ya no eres tan
rico como de
cachorro.
-¿Pero porqué yo? ¿acaso me portaba mal? ¿soy feo? ¿ya soy viejo?
No, les ocurre a muchos perros. Los guapos, los de raza, los que tienen pedigrí también son abandonados,
ninguno se salva. Los
jovenes también son abandonados, e incluso cachorros de tan solo unos días de edad. Los buenos y obedientes también son abandonados, porque aunque fueras educado, manchas la casa,
hay que pasearte, tus medicamentos y comida vale mucho
dinero, durante las vacaciones puedes resultar un incordio.
Tú no tienes la culpa. Simplemente nunca debiste caer en sus manos, los irresponsables no deberían poder tener perros.
-
Yo no sé cuidar de mi mismo. ¿Cómo sobreviviré?
Es verdad. El
hombre te convirtió en un
animal domestico, pero de la noche a la mañana eres un animal salvaje que debe luchar para seguir viviendo. Debes buscarte la comida y el agua. Debes protegerte de otros animales (sobre todo cachorros humanos que pueden tirarte
piedras, dispararte balines u otras barbaridades). Debes huir de las máquinas en movimiento que los
hombres llaman coches, será uno de tus principales enemigos. No te metas por los
campos, hay zarzas, cepos, animales peligrosos...
-
¿Qué va a ser de mi? ¿Qué futuro me espera?
No lo sé. Todo depende de si un ángel se cruza en tu camino. Sabes, no
todos los humanos son malos, algunos tienen sentimientos, y cuando ven a un perro abandonado lo recogen y se lo llevan a su
hogar hasta que le encuentran un
nuevo dueño. Pero estas personas están muy ocupadas, también limpian
jaulas en las protectoras; esterilizan a los perros de las protectoras, visitan las perreras para salvar de la muerte
segura a algunos perros; difunden por
internet casos de perros como tú...
Si no aparece tu salvador, puedes morir de hambre o atropellado, o puede que vayan unos hombres de uniforme a recogerte. Pero no te alegres aún, son personas que recogen animales abandonados, pero no por voación, es su
empleo, lo hacen por dinero, muchas veces no les gustan los animales. Éstos te llevarán a un campo de concentración de perros (ellos le llamarán perrera, e incluso "albergue sanitario" o "
centro de protección animal") pero que no te engañe el nombre. Se trata de un lugar frío, lleno de pises y excrementos, los perros sois encerrados en jaulas pequeñas junto a otros perros. Algunos cojos, otros tuertos, otros acaban de nacer (abandonaron a su mamá
embarazada), y otros perros eran mimados, como tú y les llevaron engañados "vamos al parque, Toby", le dijeron sus dueños. Se irán llevando a tus compañeros, uno a uno. Les habrán adoptado, pensarás tú. No, mi inocente niño, esos señores les van a poner una inyección para que duerman para siempre, no volverán a despertar.
- ¿Me matarán a mi también?
Ojalá me equivoque, pero seguramente a ti también te sacrificarán. Las probabilidades de que te adopten son escasas: prefieren cachorros y prefieren de raza. Además de ti, hay unos 40 más en la perrera, ¿qué tienes tú de especial? ¿que
has sufrido? Los demás también han sufrido, puede que incluso más, como los cachorros que aun no han conocido un hogar, como el
perrito tuerto al que le tiraron piedras; como al
pitbull abandonado tras una pelea clandestina; como al galgo que ha malvivido siempre, dándolo todo por un puñado de huesos viejos. El tiempo corre, solo os dan 10 días, si en ese tiempo no sois reclamados, os sacrifican.
- Ha entrado una pareja en la perrera, ¿qué debo hacer para que me adopten a mi?
Tienes dos opciones: tumbarte en la jaula, permanecer callado, con carita de pena y rezar porque se fijen en ti, tal vez sientan compasión. O puedes olvidar todo lo que has sufrido, y comenzar a ladrar, saltar, y dar lametones, demuestra que eres el perro más mimoso del
mundo.
He de dejarte, unas personas se han ido de vacaciones y como no podían llevarse al perro, lo han dejado en la cuneta. Espero que tengas mucha suerte, ojalá te adopten y seas muy feliz con ellos hasta que seas viejito. Sino, nos veremos en el
cielo dentro de unos días.
Isabel Cubero
isabelcubero@hotmail.com
http://groups.msn.com/PerrosAragoneses