Al Qaeda reivindica la masacre en una supuesta
carta enviada a un diario árabe de Londres
El Gobierno no descarta que un grupo árabe esté tras la masacre
MADRID.- Aunque el Gobierno sigue pensando que ETA está detrás de la masacre perpetrada en Madrid, no descarta que un grupo terrorista islámico pueda ser el responsable de los atentados que han costado la vida al menos a 192 personas y han causado heridas a más de 1.427. La policía ha localizado en la localidad madrileña de Alcalá de Henares una furgoneta robada en la que se han hallado siete detonadores y una cinta en árabe con versículos del Corán. Una supuesta carta de la red terrorista Al Qaeda ha reivindicado los atentados, según la edición digital el diario árabe 'Al-Quds'.
En su segunda comparecencia oficial del día, el ministro del Interior, Ángel Acebes, ha matizado las hipótesis sobre la autoría de los atentados de Madrid. Por la mañana, dijo que "no le cabía ninguna duda" de que la banda terrorista ETA estaba detrás de la masacre en la capital de España, pero horas después ha informado de que ha ordenado a las fuerzas y cuerpos de seguridad que trabajen también en otras líneas de investigación.
La principal circunstancia para este cambio ha sido la localización de una furgoneta en Alcalá de Henares, que fue robada el pasado 28 de febrero y en cuyo interior se han encontrado siete detonadores y una cinta en árabe que contiene versículos del Corán.
El ministro Acebes ha explicado que esa cinta normalmente suele utilizarse para la enseñanza y no contiene ninguna amenza ni mensajes de otro tipo.
El primero en apuntar a grupos terroristas islámicos como posibles autores de la masacre fue el portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi.
Ángel Acebes precisó además que el explosivo utilizado en los atentados suma más de cien kilos de dinamita, repartidos en diez mochilas con unos diez kilos cada una de ellas y otras dos con una cantidad que estaría entre los once y los doce kilos.
Ante la posibilidad de que no haya sido ETA la autora de la masacre, los periodistas le han preguntado al ministro de Economía, Rodrigo Rato, en el recinto ferial de Ifema, el lugar donde se están llevando los cadáveres de las víctimas, que de confirmarse esa hipótesis contra quién deberían manifestarse los españoles. "Contra el terrorismo. El terrorismo es todo igual", ha dicho Rato.
Los terroristas han provocado 10 explosiones en cuatro trenes de Cercanías que, desde Alcalá de Henares y Guadalajara, habían llegado a las estaciones de Atocha, El Pozo y Santa Eugenia. Los TEDAX han explosionado más tarde otros tres artefactos trampa.
Los terroristas pretendían hacer coincidir la explosión de los artefactos colocados en dos de los trenes en el interior de la estación de Atocha, con la intención de provocar su derrumbamiento. El retraso de dos minutos de uno de los convoyes evitó que se cumplieran los deseos de los terroristas.
Fuentes de la investigación han señalado que, de haber hecho explosión ambos trenes en el mismo lugar, el efecto multiplicador de los explosivos y las características arquitectónicas de la estación habrían causado su derrumbe, provocando aún más víctimas mortales.
Acebes precisó que el explosivo utilizado en los atentados suma más de cien kilos de dinamita, repartidos en 10 mochilas con unos 10 kilos cada una y otras dos con una cantidad que estaría entre los 11 y los 12 kilos.
Los cuatro trenes
Uno de los trenes siniestrados es el 17305, que salió de Guadalajara a las 6.45 horas con destino a la estación de Chamartín, de Madrid, y que sufrió la explosión cuando entraba en la estación de Atocha.
Otro es el 21431, que salió de Alcalá de Henares a las 7.00 horas con destino a Alcobendas, localidad del norte de Madrid, y que se encontraba circulando por la vía 2, de Atocha, cuando se produjeron las explosiones en su interior.
El tercer tren es el 21435, que salió de Alcalá de Henares a las 7.10 con destino a Alcobendas y en el que se registró la explosión en la estación de El Pozo, barrio del sur de Madrid.
El cuarto tren es el 21713, con salida de Alcalá de Henares a las 7.15 de la mañana con destino a la estación de Príncipe Pío, de Madrid, y que sufrió la explosión en la estación de Santa Eugenia, también barrio del sur de Madrid.
Estaciones sembradas de cadáveres
Varias víctimas de los atentados de Atocha aseguran que los peores momentos tras la explosión fueron los 10 o 15 minutos que tardaron las asistencias en llegar al lugar de la explosión, escondido entre montones de tierra y un muro de hormigón.
500 de los heridos permanecen hospitalizados. 44 se encuentran en estado crítico, 27 muy graves, 153 graves, 157 con pronóstico reservado y 119 leves, según ha informado Interior.
De las víctimas mortales, 67 han sido recogidas en la estación de El Pozo, 64 en la calle Téllez, 34 en Atocha y 16 en la de Santa Eugenia. El resto ha fallecido en hospitales.
Los cadáveres han sido trasladados al pabellón 6 de Ifema, en el Parque Ferial Juan Carlos I, donde son introducidos por la puerta exterior del ala este. Los familiares pueden acceder al edificio por la puerta norte. Un total de 80 forenses trabajan en la identificación de los cadáveres y 100 psicólogos atienden a familiares.
Fuentes jurídicas han informado de que se celebrará un Funeral de Estado en memoria de las víctimas.
En la misma línea se manifestaba la Europol, que considera que los atentados "no responden al 'modus operandi' de ETA".
Interior ha colgado en su web
www.mir.es un listado provisional de heridos. Además, hay dos teléfonos a disposición de los familiares: el 112 para Madrid, y el 902 222 292 para el resto de España.
Interior ha habilitado asimismo un teléfono para aquéllos que puedan facilitar pistas sobre los autores del atentado: 900 100 091.