Los niños de Michael no son niños cualquiera, son los hijos de la persona más famosa del mundo.
Hay cosas que no pueden hacer, porque no es bueno para ellos, ¡¡los pies en el suelo por favor!!, Michael lo sabía muy bien, sabía en el terreno que se movía, y por eso les protegía tanto, Michael era muy inteligente y por mucho que le tomaran por loco sabía muy bien lo que tenía que hacer.
Además, los niños no son los que tienen que solucionar los problemas de la familia, no les corresponde ese papel, en esa familia ahora mismo están más ocupados de arreglar los tejemanejes de pleitos, líos de dinero y lucha por el poder, que por el cuidado de los niños.
Tampoco he visto a los hijos de ningún famoso airear su vida, los hijos de los famosos suelen estar bastante protegidos, lo que pasa es que en este caso han pasado de ser los hijos del famoso a ser ellos los famosos, y eso es consecuencia de las decisiones de su abuela de exponerlos a la vida pública, se han convertido en protagonistas. Son menores, que no se nos olvide.
¡¡Ah!!... y por cierto, Michael lavaba los trapos sucios de su familia en la intimidad.
Pero la culpa no es de los niños, es de la familia que lo ha permitido y que lo ha propiciado.
Si los niños están exponiendo su vida en el twitter y en los medios de comunicación es porque los adultos que están a cargo de ellos se lo han permitido.
Porque ésto no empezó la semana pasada, ésto empezó el día que su abuela decidió sentarlos en un plató de televisión tras la muerte de su padre para dar una entrevista, por ahí se empieza.
El monumental lío que han montado los Jackson desde que sacaron la carta del testamento va a ser difícil que lo lleguemos a comprender, a mi me importa un rábano, y ya se pueden despellejar vivos entre ellos, pero el caso es que los niños han sido el epicentro del capítulo más bochornoso de la familia Jackson, y eso es imperdonable.
Michael ya podía estar pasando todo tipo de presiones y de problemas tremendos, pero sus hijos SIEMPRE estarían al margen, y estoy segura de que si estuviera vivo no sería un problema ni la adolescencia, ni los catorce años, ni el twitter, ni nada... seguiríamos sin saber prácticamente nada de esos niños, y estarían BIEN COMO SIEMPRE, aunque el mundo entero explotara alrededor de Michael.
Los niños pueden querer mucho a su abuela, pero el giro que han tomado sus vidas desde que ella tomó la tutela es preocupante, no están siendo protegidos, están en el ojo del huracán. Y no creo que tengan visión para comprender el efecto tan negativo que puede tener la fama y la exposición mediática en sus vidas.
Para mi NO tiene justificación lo que ha pasado, no hay nada que justifique el miedo que han pasado esos niños.
En esa familia tienen todos una guerra nauseabunda por el poder y el dinero que pasa por encima de todo, por encima del bienestar de los niños, y por encima de los deseos de Michael.
No quiero ni pensar lo que va a pasar el día en que todo pase a manos de los niños.
Michael manejaba todo esto con una habilidad increíble, no sé cómo se las arreglaba para mantener a todo el mundo más o menos en su sitio, aunque de vez en cuando se le desmadrara alguno.
El precio que hay que pagar para manejar ese legado es demasiado alto, Michael pagó con su vida.
Ojalá alguien los aparte de toda esta locura y les de una vida tranquila y feliz.