Qué historias más bonitas estáis poniendo. Me encanta leerlas
Definitivamente Michael tenía un aura especial, una energía tan poderosa que conseguía cambiar la atmósfera de un lugar incluso antes de que él apareciese.
Y esos ojos… Quién podría olvidar una mirada como la suya. Se dice que los ojos son el espejo del alma, y en el caso de Michael, sus ojos, además de ser preciosos, reflejan el alma misma.
Gracias por el relato Mariate.
Es más, yo incluso diría que sus ojos son su propia alma.
Sigo por aquí, pero sin leerlas, quiero meterme un atracón cuando esté todo en el archivo final, y leerlo de contínuo, así mis sueños serán todavía más intensos