marcel44
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Michael quizas, quiso enseñarnos algo... no era una persona q no queria crecer... era alguien que supo descubrir que si dejamos de etiquetar nuestra vida y condicionar nuestras emociones seriamos verdaderamente felices.
Intenten dia a dia reconectarse con las pequeñas cosas q los rodean, disfruten caminar una tarde de otoño... sonrian al ver la lluvia en un cristal, porq hay media vida que se nos escapa en la nuestra.
No etiqueten sus dias, ni condicionen sus pensamientos ni los de otros...
Nosotros podemos ser adultos y ser completos. Porq conservar esa inocencia no significa ser ignorantes... significa q somos lo suficientemente sabios para poder apreciarla.
Es exactamente de esa manera Filantro.
Cuando éramos niños, todos los días eran preciosos. El Sol era maravilloso, la Luna era mágica. Cada día era diferente y no había nada en lo que pensar del ayer que pudiera arruinar nuestro día de hoy.
Pues bien, ese niño sigue ahí y allí es adonde lo mantuvo Michael.
Ese atractivo, esa cualidad de la inocencia, deben estar y permanecer siempre en nosotros. El poder dar la bienvenida a cada nuevo día, a cada momento que llega, la dicha de vivir, aún están ahí. Siempre estuvieron y siempre estarán. La inocencia y la sinceridad residían en el corazón de Michael y reside también en cada ser humano.
Lástima y pena que el caparazón (como sinteticamente apuntó Will en alguna oportunidad), haya sido demasiado fino...