Me toca, me toca!! Ya que esta vez las historias tienen poca "chicha" os dejo dos.
EL VIAJE DE MI PEQUEÑO REGALO
por y Dawn Trethewey, Australia
Vivo en Australia. Sabía que iría de vacaciones a Estados Unidos en marzo de 2005, así que hice un “regalo” con la intención de ir a las puertas de Neverland a dejarlo allí para Michael.
Después de todo, mi regalo viajó cerca de 70,000 Km. y nunca supe si alguna vez llegó hasta él.
Este es el kilometraje que “recorrió” mi regalo.
1--- Brisbrane (Australia) hacia Los Ángeles con escala en Tapei, en avión.
2--- Los Ángeles a Tampa, en avión.
3--- Un crucero por México de 7 días en barco.
4--- De Tampa a Baltimore, Nueva York, Las Cataratas del Niágara, Chicago y Los Ángeles, con la línea de trenes Amtrak.
5--- Los Ángeles hacia Las Vegas en autobús, con la línea Greyhound.
6--- Las Vegas a Los Ángeles en autobús, con Greyhound
Yo tendría tres días para mí en Los Ángeles para poder llevar a mi “regalo” a Michael. Sin embargo cuando llamé a la persona de L.A que se suponía que debía organizar mi viaje a Neverland, eso no había sucedido.
7--- Así que mi “regalo” volvió a Australia junto a mí.
8--- A finales de mayo o principios de junio, una fan que sabía que vivía en Sydney (Australia) iba a viajar a Santa María para el juicio de Michael, así que envié mi “regalo” con ella. Ay dios, el juicio terminó antes de lo que pensábamos, así que mi “regalo” volvió de nuevo a mí.
9--- Por ultimo, una fan de Baltimore organizó un proyecto para el cumpleaños de Michael en 2005. Contacté con esta persona y le envíe mi “regalo”.
Como sabemos, cuando el cumpleaños de Michael llegó, él estaba en Bahrein así que solo podía esperar que mi regalo JAMAS le fuera entregado.
Siempre me siento decepcionada cuando pienso en todo esto, pero la distancia que mi “regalo” recorrió en mi empeño de que llegara a Michael por lo menos lo hace muy singular.
VIÉNDOLO EN DIRECTO
por Gabriela Bejan, Rumania
Tengo muchos recuerdos de Michael. Me convertí en admiradora suya a los 14 años y aprendí todas sus canciones, escuchaba toda su música y para cuando vi mi primer vídeo de MJ, ya me había vuelto completamente loca, probablemente igual que todos sus fans.
La primera vez que visitó Rumania no lo podía creer. Estuve leyendo todo los periódicos y recorté todos los artículos que hablaban de él, así que ahora tengo una auténtica colección de artículos. Traté de comprar todos sus discos, algo que en ese momento era muy difícil aquí en Rumania, recuerda que hablamos del comienzo de los 90.
Cuando regresó un año más tarde, en 1996, hice un esfuerzo por comprar una entrada para su concierto. Él era mi vida en ese momento y deseaba con todas mis fuerzas conseguir una entrada para poder verle en directo, sobre el escenario, escuchar su voz, su maravillosa voz y ser testigo de sus movimientos y su mágico baile. Le quería mucho. Finalmente pagué 38 dólares por una entrada (que por entonces era mucho dinero) pero ¡valió la pena! Fue increíble y yo no podía ser más feliz porque por fin ¡había tenido la oportunidad de ver a mi ídolo y artista favorito en directo!
Ahora que se ha ido, emplearé todas mis energías para que su música sobreviva.
¡Siempre te querré y te llevaré en mi corazón Michael! ¡Que Dios te bendiga!