Os dejo otra historia!!!
[FONT="]THE DANGEROUS “BALCONY” SHOW IN TEL AVIV (1993)[/FONT]
[FONT="]Por Julia Orendi, Birgit Hoffmann,[/FONT]
[FONT="]Dagmar Wendel & Monika Reimann, Alemania[/FONT]
[FONT="]Después de mucho reflexionar, razonar y bastantes cancelaciones de viajes causadas por la critica situación en Israel – y tras unas semanas muy estresantes – al final y a pesar de todo, nos fuimos a Tel Aviv, donde Michael iba a ofrecer dos conciertos. Tel Aviv nos recibió con un calor abrasador. Cogimos nuestro equipaje y fuimos directamente al hotel donde se alojaba Michael, que había llegado el día de antes. Cuando llegamos allí, ya estaban un montón de fans esperando delante de la entrada, sobre un gran cartel fijo que rezaba: “El Hotel DAN de Tel Aviv da la bienvenida a Michael Jackson y su Dangerous Tour 1993”. [/FONT]
[FONT="]Esa tarde vimos a Michael en su autobús después de un año de gira “Dangerous” y casi no podíamos creer que lo veríamos en el escenario dentro dos días. Alrededor de la media noche, por suerte, encontramos una habitación en un hostal, donde las cuatro nos dormimos completamente agotadas. [/FONT]
[FONT="]Al día siguiente hicimos la trayectoria de Michael por Jerusalén, donde visitó la ciudad antigua y las excavaciones arqueológicas. Al mismo tiempo fuimos a Hayarkon Park, donde se llevarían a cabo los conciertos, para ver las mejores entradas. Por la noche, comenzó toda la tensión con respecto a las entradas para el concierto, las cuales todavía no teníamos en nuestras manos debido a dos días de fiesta consecutivos que habían tenido lugar en Israel. Después algunas largas conversaciones telefónicas con la señora del organizador del local Haim Slutzky y con Marcel Avram de Mama Concerts, quién se quedó en el hotel de Michael, obtuvimos nuestras entradas al día siguiente sin más problemas y así nos encontramos a las 7 en punto de la mañana frente a las puertas de entrada esperando a la apertura de puertas. Eso sucedió a las tres y media de la tarde, tras largas horas de paciencia soportando un calor inaguantable. Nos las arreglamos para conseguir nuestros lugares en la primera fila. Tras el acto de apertura “Culture Beal”, Michael, como siempre, realizó una actuación incomparable, dejando a un lado nuestro “Working day and night” para convertirlo en “Dangerous”, lo que hizo que nosotras y las otras 60.000 personas enloqueciéramos por completo. El descomunal espectáculo terminó con unos fuegos artificiales increíblemente hermosos y fue muy aclamado por la prensa. [/FONT]
[FONT="]Esa noche, todavía estábamos sentadas en la playa junto con algunos fans ingleses, cuando Michael apareció repentinamente en su balcón para observarnos. Aprovechamos la oportunidad para darle las gracias por tan único y espectacular concierto y cuando le dijimos que en “Billie Jean” estuvo brillante, nos saludó con entusiasmo. Esto fue sin duda la guinda del pastel de un día especial. [/FONT]
[FONT="]El lunes compramos algunos periódicos y, mientras tres de nosotras nos pasamos el día de compras y nadando, Monika se quedó en el hotel de Michael. Cuando Michael salió del hotel, su camioneta fue rodeada por varios fans entusiasmados. Monika, que le había dado un libro con dibujos hechos por ella misma a su médico varios días antes, quería saber si Michael había recibido el libro. En una pancarta le preguntaba si tenía un libro con un título específico. Michael asintió con vehemencia, algo que por supuesto la hizo muy feliz. Monika siguió entonces a Michael, quién fue a un Hospital Infantil con el fin de hacer una donación. Por la tarde volvieron para sentarse cuando Michael, de forma absolutamente inesperada, salió a su balcón para ver la hermosa puesta de sol. [/FONT]
[FONT="]Había cientos de aficionados en la playa que se volvieron completamente locos cuando Michael comenzó una actuación bastante inusual. En primer lugar se encaramó a la balaustrada de la terraza, sentándose en el borde y dejando sus pies colgando. Luego se acostó boca abajo y apoyó la cabeza entre las manos, sonriendo y riendo todo el tiempo. La gente no podía creer lo que veía, estaban completamente enloquecidos, pero cuando Michael empezó a balancearse sin temor por el borde, sus guardaespaldas aparecieron de la nada para tratar de poner fin a sus peligrosas maniobras. Tras un breve debate desaparecieron de nuevo y él continuó con sus acciones. Cuando el cielo estaba completamente oscuro, siguió mostrando y explicando las estrellas a los niños a los que se les permitía pasar la tarde con él. [/FONT]
[FONT="]Esa noche alcanzó su cima cuando sus guardaespaldas regresaron para entregarle algo: un megáfono. Con él comenzó a hablar a los fans diciendo cosas como “Sanad el mundo”, “Os quiero” y “¿Puedo ir allí abajo?”, lo que creo la histeria entre los fans. [/FONT]
[FONT="]Después de veinte emocionantes minutos apareció otro guardaespaldas, cogió el megáfono y nos dijo que ahora Michael tendría que ir a la cama. Aturdidas por las acciones de Michael, pasamos el resto de la noche en la playa. [/FONT]
[FONT="]Al día siguiente, se llevó a cabo el segundo concierto y más de 100.000 fans estuvieron presentes para ver primero a “Culture Bear” y convertirse luego en testigos del gigantesco y perfecto espectáculo que ofreció Michael dejándonos a todos sin palabras. El calor era tan insoportable que debían rociarnos con agua para evitar desmayos. Después de un sorprendente espectáculo, Michael se despidió: “¡Te quiero Israel!”, “Heal the World” fue su última canción y Michael abandonó el escenario, con sus fans celebrando y acompañado por un interminable aplauso. Por desgracia, tuvimos que dejarle esa misma noche, así que cogimos nuestro equipaje y nos fuimos al hotel de Mike por última vez. Lamentablemente, no tuvimos la suerte de verlo. Más tarde nos dijeron que ya había abandonado Tel Aviv y se dirigía a Estambul. [/FONT]
[FONT="]Después de esos cinco días de locura también dejamos Israel y volvimos a casa, ya teníamos en mente nuestro próximo concierto en Tenerife, donde una vez más experimentamos muchos más momentos increíbles y un espectáculo muy especial: el escenario, que se encontraba en el puerto rodeado de enormes cruceros, era mucho más bajo y fue posible ver a Michael de pies a cabeza, por lo general una visión muy rara desde la primera fila. Desde el principio tomó contacto visual con los fans de la primera fila, lo que nos hizo felices porque él continuó señalándonos de vez en cuando a lo largo de todo el concierto. [/FONT]
[FONT="]Monika tuvo suerte ya que consiguió el sombrero de Billie Jean, que es hasta día de hoy uno de sus mayores tesoros entre sus objetos de recuerdo. [/FONT]
[FONT="]Los conciertos en Tel Aviv y Tenerife fueron los primeros lejos de casa. Hemos asistido a muchos conciertos por todo el mundo desde entonces y nos hemos encontrado con Michael en varias ocasiones. [/FONT]
[FONT="]Michael, muchas gracias por tu maravillosa música, tu influencia en nuestras vidas y tu misión de “Sanar el Mundo”. ¡Nunca te olvidaremos![/FONT]